Parte 3 El inicio de una aventura

755 104 61
                                    


Xie Lian lo sabía, estuvo presente cuando sucedió —En aquel entonces te dije que no encariñaras mucho con él. Por tu bien.

Shi Qing Xuan entendía que se lo decía porque estaba preocupado por él, sin embargo, suspiró dándole a su rostro ya casado un aspecto aun más agotado. —Su alteza ¿Qué haría usted en mi lugar? Es solo un niño.

Xie Lian no supo responderle porque probablemente habría hecho lo mismo que Shi Qing Xuan, pero todavía la circunstancia eran diferente porque no estaba relacionado con el Maestro del Agua HenYu

El silencio quedó entre los dos, Shi Qing Xuan tampoco espero que el respondiera se dio la vuelta para marcharse cuando escuchó la voz de Xie Lian.

—Quédate aquí para descansar, te ves muy pálido.

—No es... — Un repentino mareo hizo tambalear a Shi Qing Xuan. Quiso apoyarse en la pared, pero perdió el conocimiento. Su cuerpo cayó hacia el piso como una hoja marchita.

—¡Qing Xuan!—Alarmado Xie Lian iba a atraparlo, pero alguien más sujetó al Señor del Viento antes de que tocara el piso.

—Lo siento su alteza, cuando me di cuenta ya había bajado al reino mortal—Dijo Pei Ming acomodando a Shi Qing Xuan en sus brazo. Al verlo tan débil, en su ojos un brillo de preocupación se encendió.

 — Debió imaginar que vendría a jugar con la Lluvia Carmesí.

—Yo también lo creo, pero si estuviera en la Ciudad Fantasma lo sabríamos, sobre todo por aquí los demonios lo conocen —Xie Lian tosió porque no podía decir que el pequeño tirano en realidad le gustaba intimidar a los habitantes del lugar.

Lindo por fuera, pero su corazón era como un pequeño demonio travieso.

Pei Ming sabía lo quería decir, rio para sí mismo con ironía. Todas las malas mañas del pequeño dios debía aprenderlas de la Lluvia Carmesí, pero incluso ahora también eran víctimas de sus travesuras.

—El general también vino a buscarlo.

—Sí, ya sabes, será más obediente si voy a buscarlo personalmente.

Xie Lian río y recordó algo que Shi Hen Yu le dijo una vez — " Es mi sirviente número uno, como soy su maestro solo debe prestarme atención a mí"

—¿A que viene eso?— Pei Ming lo miró confundido.

—Es lo que dijo el Maestro del Agua.

—Ese mocoso...

—Ge ge

Hua Cheng ingresó a la habitación y  alzó una ceja al ver a dos dioses en su territorio como si fuera un lugar turístico, pero no dijo nada. Solo se dirigió hacia Xie Lian.

—¿Qué pasa San Lang? ¿Alguna noticia?

—Sí, vieron al Señor del Agua en la ciudad.

—¿Eh?—Exclamaron Xie Lian y Pei Ming.—¿Cómo llegó aquí?

La expresión de Hua Cheng se volvió complicada antes de agregar otra frase—Y no estaba solo

Las expresiones de Xie Lian y Pei Ming cambiaron de asombrados a pálidos. Hua Cheng no los mantuvo en suspenso y les revelo la verdad— Estaba con Aguas Negras.

Pei Ming no su pudo mover porque sostenía Shi Qing Xuan, en cambio Xie Lian estaba a punto de salir de la mansión paraíso con un paso rápido, pero fue detenido por Hua Cheng.

—Ge ge ya no están aquí. Al parecer dejó al Señor del Agua acá y luego se fue, pero  A-Yu fue detrás de él.

—¿Por qué estaban juntos?— Xie Lian se puso nervioso, la situación se volvió mala de repente.

El Tiempo que te he amadoजहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें