UN NOVIO OBSESIVO Y AGRESIVO

✨Capítulo: 35✨

- ¡Hey James! - gritó Jane, mientras alcanzaba a James en la playa.

El giró en la arena para verla, venía hacía él, hasta que al fin llegó y se detuvo, mirándolo fijamente.

- ¿Si? - dijo James.

- ¿Por qué me dejaste esta fotografía a noche? - dijo Jane, James frunció el ceño y se rascó la cabeza - no te hagas James... esta foto solo la tenías tú - dijo Jane, totalmente segura.

- ¿Cómo lo supiste?

- Por qué aquel día te gustó tanto está que la guardaste en tu billetera y te negaste a dármela - dijo Jane recordando los viejos tiempos, James sonrió, aun se acordaba.

- Pensé que lo habías olvidado - dijo James esbozando una sonrisa. Ella negó con la cabeza.

- No lo hice - respondió - fuiste alguien muy importante para mi - confesó Jane mirándolo a los ojos.

El corazón de James comenzó a acelerarse, moría por besarla y abrazarla y decirle cuanto la amaba y que lo perdonara porque sin ella la vida no era vida.

- Quita esa sonrisa de tu rostro, James - dijo Jane, esta vez seria - dije "fuiste"... ya no eres - la sonrisa de James se esfumó, su corazón estaba destrozado por ella.

- Esta bien - dijo James - aclaremos los puntos de una vez - dijo algo estresado - la puse bajo tu puerta porque quiero que la tengas - Jane lo miró confundida - ya no quiero nada de ti Jane - ella se sorprendió al instante, frunció el ceño - querías que me aleje y te olvide, pues lo haré... haré lo que tu quieras, me olvidaré de ti, de todo, por eso te dejé esa foto... tenla tú, has lo que quieras con ella, quémala, córtala, rómpela... lo que quieras ¿Yo para qué la quiero? Si ya no puedo tenerte - se miraron fijamente, James acarició su mejilla lentamente como dándose el último adiós - yo te amo - dijo James rozando la punta de su nariz contra la suya, ambos cerraron los ojos - pero tú a mí no... entonces te olvidaré - Jane suspiró - suerte.

James se alejó de ella, besó su frente y luego se alejó por la orilla. ¿A dónde? No lo sé.

Ella se quedó observándolo partir por la orilla, aún no lo podía creer. Tenía temor a perderlo pero terror a que vuelva.

Y así pasaron 3 días.

Playa, juegos, fiestas, todo iba de maravilla, Jane y Cody pasaban mucho tiempo juntos, ella se escapaba todas las noche para verlo, iban a pasear a la playa tomados de la mano, a los juegos del muelle por las noches, todo estaba perfecto.

Jane se encontraba con Hanna en su habitación arreglándose para su última cita, mañana partirían a Los Angeles otra vez.

- Este vestido blanco está perfecto - dijo Hanna señalándolo, Jane aun estaba en bata - te haré el mejor maquillaje del mundo, te verás hermosa.

- Gracias, Hanna - dijo sonriéndole desde el espejo, se encontraba maquillando sus pestañas.

- ¿Y a dónde irán?

- Iremos a cenar a la playa... y luego a su casa - dijo Jane.

- ¿O sea, van a follar cuando el vino se termine? - Jane río nerviosa.

- Ordenaremos champage.

- Jane - dijo Hanna.

- Ya bueno...

- ¿No lo han hecho en estos días? - preguntó la curiosa Hanna.

- No - dijo Jane.

- Pero hoy si ¿No?

- No lo sé... si se da solo.

- ¡Ay, ya! A mi no me mientas... solo usen condón.

- ¡Ay, Hanna! - dijo risueña Jane.

- ¿A qué hora regresas? Es difícil cubrirte por las noches...

- Mmm, supongo que a las 3.

- Dale, pero tendré que cerrar la puerta con todos los candados - dijo Hanna, ambas rieron.

De pronto el estomago de Jane se revolvió, tenía muchas ganas de vomitar, sentía un acido asomarse por su garganta, salió disparada al baño, se arrodilló frente al retrete y arrojó todo.

- ¡Jane! ¿Qué te pasa? - preguntó Hanna, sujetando su cabello en un gesto de gratitud.

Cuando Jane terminó de vomitar, se lavó la cara y salió del baño junto con Hanna.

- ¿Te sientes bien? - dijo Hanna preocupada - ven siéntate - dijo acomodándola en la cama.

- Si, si - dijo Jane - solo comí demasiadas papas fritas en la tarde.

- Jane...

- De verdad - dijo Jane.

- No te irás de aquí hasta que se te pase el mareo.

- Pero llegaré tarde.

- No me importa... ahora ahógate con agua - dijo dándole un vaso de agua y un algodón con alcohol.

***

Cody estaba sentado en la playa, había velas por todos lados y una linda mesa cerca a la orilla. Había preparado todo para ella, con esa camisa blanca y la luna sobre su cabeza.

Las mujeres siempre se demoran, pensó mirando su reloj.

- ¡Hey! - dijo una voz aproximándose a él, Cody giró y vió a James caminando a su lado.

- Mira... ¿Cómo te llamas? ¿James? - dijo Cody esperando respuesta.

- James Maslow - se presentó.

- Bueno... James...

- No he venido a pelear, sino a abrirte los ojos. - dijo serio.

- ¿Perdón? - dijo Cody - no se que quieres, pero...

- Pero Jane no te ama - dijo James.

- ¿Has venido a pelear? - preguntó Cody a la defensiva.

- No - respondió - he venido a decirte la verdad.

- ¿Qué verdad? - dijo Cody - eres ridículo James... ella no te quiere.

- ¿Tú como lo sabes? Lo que tuvimos Jane y yo, no fue de meses, o semanas, Cody. Fue de mucho tiempo.

- Tú eres su pasado, deberías entenderlo.

- ¿Qué voy a entender? - James rió levemente - no he venido a ofenderte, ni nada de eso... pero Jane esta enamorada de mi, esta contigo por qué esta herida - dijo mirándolo a los ojos.

- Imposible - dijo Cody - ¿Por qué inventas mentiras? Ya basta.

- Es verdad... si no... no hubiera hecho el amor conmigo un día antes de venir aquí.

Las pupilas de Cody se dilataron al máximo.

- Eso es mentira - dijo Cody.

- Pregúntaselo... - dijo James - no tengo problema.

- No puede ser.

- Tampoco hubiera venido aquí para escapar de mi hace... mmm ¿2 meses? Cuando ella llegó aquí habíamos terminado recientemente, o sea... en pocas palabras, vino a Miami para olvidarse de mi y tu "fuiste utilizado" como arma para ello.

- ¡Ya cállate! Estas mintiendo.

- Ya te dije que puedes preguntárselo, que te lo niegue.

- !Eres un imbécil! - dijo Cody haciendo puños, lleno de ira.

- Solo te utilizó para olvidarme, y ni siquiera lo logró... cuando llegó a Los Angeles hizo el amor conmigo... y ahora regresó solo para que yo los viera y sintiera celos. - dijo James encendiendo un cigarrillo - la metí en mi cama y follamos duro, toda la noche.

El puño de Cody despegó en la cara de James.

- ¡Eres un hijo de puta! - gritó Cody - ¡Es mentira!

James sonrió.

- Piensa lo que quieras - respondió - yo ya te lo dije...

Se dió media vuelta y se marchó.

- ¡Cobarde! - gritó Cody hecho una furia.

Continuará...