hazel bennet

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Cuando te dicen que te alejes de una persona, es porque de verdad tienes que hacerlo. Cuando te dicen que esa persona es mala, es porque de verdad lo es. Ciertamente hay un poco de razón en sus palabras, y solo por eso deberíamos de creer en ellas. Pero a veces, romper esa regla podría traer algo bueno, o quizás algo realmente malo.

La última clase por fin había llegado, y Hazel se sintió aliviada. Ya no tenía que estar soportando las preguntas absurdas que solían hacer sus compañeros en clase. La castaña muy en el fondo admitió que el día de hoy no estuvo tan pesado, a pesar de que fuera lunes; todo esto lo atribuía a que era el primer día de la semana y no había ánimos por trabajar. Recogió sus cosas y salió del aula tan rápido como pudo. Hizo su camino hasta la salida de la escuela mientras pensaba en lo que tendría que hacer llegando a casa para tener más de la mitad libre de la tarde.

Como de costumbre, no notó que todos los alumnos estaban saliendo rápido y solo se percató de ello cuando su pequeña anatomía chocó contra alguien.

— Fíjate por donde caminas —le reprocharon agresivamente a Hazel.
— Perdón, yo no...—la castaña levantó su mirada, y sus labios hicieron una fina línea — me di cuenta.
— Es claro que no —le respondió el chico más tranquilo.
— Uhm, perdón, tendré más cuidado —

Como pudo, Hazel esquivó al chico tratando de caminar lo más rápido posible. No podía creer que la persona con quien chocó era Luke. Ahora todo parecía jugar en contra de ella.

— Espera —le gritaron, haciendo que algunas chicas que se encontraban cerca voltearán a verla de manera sorprendida — Te acompaño a tu casa.
— No necesito que me acompañes. Puedes irte sí no es mucha molestia —meditó sus palabras, esperando a que el individuo que caminaba junto a ella comprendiera lo que quería decirle—
— Te dije que te acompañaba. No era una pregunta, porque siendo sinceros, no te pregunté —Soltó sarcástico aquel chico alto, haciendo que en sus delineados labios se curveará una sonrisa; una preciosa y perfecta sonrisa —
— Ni siquiera me conoces —sentenció Hazel.
— Eres amiga de Jessica, ¿no? —indagó él.

No supo que responder, puesto que tenía razón. Era obvio que él conocería a Jessica, siendo que esta fue novia de su amigo.

— Eso que importa —musitó Hazel — Que sea su amiga no signfica que me conozcas.
— Vamos, precio... —habló pero lo interrrumpieron.
— Hazel —corrigió de inmediato ella dándose una cachetada mental por decirle su nombre.
— Bueno, preciosa Hazel, como dije, no te pregunté que si te acompañaba a casa, dije que lo haría —sonrió socarrón— Siéntete afortunada, no todas tienen este privilegio.

Hazel bufó molesta, y solo trató de acelerar más su paso, pero parecía imposible alejarse del rubio. De un momento a otro, cuando la escuela ya no era lo suficientemente visible, Luke se plantó delante de ella impidiéndole el paso.

— Soy Luke —se presentó sonriéndole— Luke Hemmings.

Jessica la mataría cuando se enterará de lo que acaba de pasar.

𝐒𝐎𝐂𝐈𝐎𝐏𝐀𝐓𝐇 - luke hemmingsWhere stories live. Discover now