..Solo soy un juguete..

...un día mas...

Izuku despertó lentamente, sintiendo como rumi mordisqueada levemente su cuello y balbuceaba cosas dormida, mientras tenía una sonrisa y una línea de baba bajaba lentamente por la comisura de sus labios.

Izuku quito sus brazos de encima y se movió lentamente, evitando que rumi lo aprese para evitar que el se baya.

Una ves que salió de la cama, la arropo nuevamente para que siga durmiendo un poco más, mientras que el tomaba una toalla de su mochila, además de un par de vendas nuevas para dirigirse al baño y tomar una ducha, dándole así comienzo a otro día más en sus pasantías en la agencia de rumi.

Salió de la habitación y cerró la puerta, caminando por los pasillos hasta entrar al baño y cerrar tras de el con seguro.

Se desnudó y entró a la ducha, para dejar que el agua caliente se lleve toda la suciedad de su cuerpo.

Miraba las partes en blanco de sus brazos detenidamente, las partes carentes de tinta, que mostraban su piel normal, sin ninguna cicatriz o algo similar, solo piel.

No podía recordar cuando fue la ultima ves que su cuerpo no fue lo suficientemente fuerte para sanar una herida... tal ves cuando era niño y aún no tenía control sobre su cuerpo, o cuando rescató a eri de overhaul y lo atravesaron por completo con púas de concreto y metal... si, esa fue la última ves que tuvo una herida grave,  por la cual se sentía capas de morir, y podía describir el dolor, otra cosa que a medida del tiempo se iba poco a poco, hasta ya no tener mayor relevancia en su cuerpo y solo sentir una pequeña molestia por más  grave que fuese su herida.

Cortó el agua de la regadera y salió de la ducha para tomar su toalla y secar su cuerpo.

Se vistió por completo, además de colocar las vendas en sus brazos, dejándolas bastante ajustadas para evitar que se caigan durante el entrenamiento de rumi, además servían como amortiguación, para que ella no se lastime cuando izuku bloquee sus golpes con los brazos.

Salió de la ducha para dirigirse a la sala de estar y sentarse en el sofá, tomando su teléfono para ver que había de nuevo en las noticias.

No había nada de relevancia, solo las mismas cosas del día de ayer.

Rumi llegó a la sala de estar, estaba algo adormilada, así que le costó un poco subir a los hombros de izuku.

Rumi: *bostezo* buenos días izuku.

Izuku: buenas, supongo que aún tienes sueño.

Rumi: algo, desperté muchas veces por que me duele mi mano.

Izuku: ayer nuevamente me golpeaste estando dormida, incluso lloraste por un par de minutos.

Rumi: ¿y no hiciste nada?.

Izuku: ¿que querías que hiciera?, no eres una niña pequeña para tener que consolarte.

Rumi: pero soy tu novia, y debes de cuidar de mi.

Izuku: está bien.

Izuku la bajo de sus hombros y la dejó frente a él, mientras la tomaba del mentón y la atraía hacia el para darle un beso.

Antes de explorar la boca de rumi, mordió su lengua para sacar un par de gotas de sangre, las cuales se mezclaron con su saliva.