Café y miel || Joerick

ミCapítulo Tres彡

Tarareando una canción vieja, comienza a perderse en sus cálidos y nuevos pensamientos, teniendo en mente a cierto Alfa de cabello rizado y ojos cafés. Hermoso en todo el sentido de la palabra. ¿Cómo sería tener una vida al lado de semejante hombre? Obviamente Erick no es nadie feo, mucho menos tímido o el típico estereotipo de Omega "servidor".

Recuerda a la perfección cuando uno de sus maestros lo vio fumando a la hora de salida y según el Beta "eso no es cosa de Omegas". Erick por otro lado solo lo miro de arriba abajo y dio media vuelta antes de iniciar una estúpida guerra.

Estando tan absorto en su mundo de fantasía, no percibió aquel aroma que tanto detesta. Mucho menos sintió cuando Joel Pimentel cerró el caño que ya había congelado su delicada piel, volviendo sus uñas de color violeta.

—Hey...

—¡Ay, Madre Santísima líbrame de todo mal! —gira un poco y descubre al Alfa que robó su corazón hace tiempo atrás. Un leve sonrojo se instala en sus mejillas—. Oh, eres tú.

—No creí que asustara tanto.

—Estaba perdido, pero no importa —contesta, alejándose de él—. Debo irme, mis clases ya empiezan en unos minutos.

Joel no pensó cuando sus pasos ya se dirigían al cuarto de baño, si bien todo el transcurso iba con la nariz arrugada por el aroma, no se detuvo. Es más, poco o nada comprende que se haya posicionado muy cerca del —atractivo, celestial, hermoso, descendiente de la luna, bello y todos los calificativos que su corazón otorga— Omega.

Así mismo, tampoco es consciente cuando de forma suave, delicada, como si temiese fracturar a Erick, envuelve su muñeca con una de sus manos.

—Y-Yo...

—Se me hará tarde —balbucea abrumado por la mezcla de aromas, mas no hace algo para aflojar el agarre.

Joel asiente ido.

—Quería invitarte el fin de semana a... bueno, debo ir a casa de mi madre, pero... también deseo pasar tiempo contigo.

Las mejillas del Omega se colorean de un bonito tono rojizo, su lobito da un brinco en su interior. Incluso puede sentir como esas mariposas bailan dentro de su estómago, empezando una fiesta que no tendrá fin.

—Tú... ¿Lo dices en serio?

—Sí —responde con seguridad; sus largos dedos terminan entrelazados con los de Erick, alzándolos a una altura visible para ambos—. Me gustas. Pero creo que eso ya lo sabes.

—De saberlo sí, de confirmarlo a través de ti, pues, justo ahora —se encoje de hombros, aunque está festejando en completo silencio para no quedar como un ser extraño ante los ojos de su Alfa—. ¿También debo hacerlo yo? Porque sí me gustas y mucho.

—¿Ahora es cuando nos besamos y la historia acaba?

—¡Estás demente! ¡Por supuesto que no!

Un par de carcajadas se escuchan en todo el recinto, luego de intercambiar números telefónicos y acordar que cada uno iría por su lado, decidieron salir del baño manteniendo una distancia prudente; sus olfatos ya no podían tolerar un segundo más el aroma ajeno.

—Joel.

—Uhm.

—¿Te fastidia el humo del cigarro?

—No. ¿Por?

—Curiosidad —se limita a decir—. Nos vemos el viernes por la tarde.

[...]

Luego de meter la llave en el picaporte, los hermanos Colón Arista ingresan a su cálido y espacioso departamento.

Tirando todo en el sofá, Erick comienza a dar brincos y grititos de felicidad, lo siente tan irreal que teme despertar y darse cuenta de que nunca conoció a Joel en aquella biblioteca. Christopher por otro lado lo mira enternecido, hace bastante no veía a su hermano con una sonrisa de oreja a oreja y, que sea provocada por un Alfa.

Sí. Realmente pasó tiempo.

—Debo contarle a papá —expresa con una leve sonrisa, yendo en dirección al teléfono fijo que está sobre una mesita—, luego a mamá. También a la tía Bertha...

Siguió mencionando a familiares que apenas conocían de una vez.

—¿No crees que es muy pronto?

—Dejemos a la tía Bertha fuera de esto, tienes razón —alude con una mueca y el ceño fruncido.

—Erick...

—¿Mi felicidad se nota natural o como si hubiese recurrido a alguna droga? Porque ya sabes cómo se ponen nuestros padres.

Christopher se limita a levantar ambos pulgares, en completo silencio se aleja de su hermano y va hacia su habitación. No pretende destrozar la burbuja de fantasía que ha creado Erick, sobre todo luego de ambas confesiones sutiles e inesperadas.

Tampoco es como si aquel Alfa se viese temible o algo por el estilo, incluso juraría que Erick podría dominarlo si así lo quisiera, porque a pesar de sus dulces encantos, resulta ser muy persuasivo.

—¡Chris! ¡Ven aquí!

Soltando un bufido de exasperación, el muchacho de piel blanquecina acude a su hermanito, arrastrando los pies y mostrándose como si fuese un hombre a punto de morir.

Una chaqueta azul es arrojada en su dirección cuando ingresa al cuarto de Erick.

—¿Pará qué soy bueno?

—Ayúdame a hacer la maleta. Cosas esenciales.

—Ok.

Entre bromas, empujones y un breve karaoke, culminan su arduo trabajo. Arrojándose a la cama, observan el techo como si fuese lo más importante, como si en cualquier momento un hoyo se fuese a crear y de allí escaparan diversas criaturas endemoniadas.

—Dejemos de ver series así.

—Te tomo la palabra —susurra Erick, espabilando todo pensamiento recurrente.

Un par de minutos se vuelven horas.

La nutritiva cena de siempre es reemplazada por pizza y cervezas, también uno que otro dulce.

Hablan de todo y nada a la vez, distrayendo sus cabezas de la universidad, de los insufribles trabajos, exámenes, maestros, compañeros, entre otros acontecimientos.

—¿Estás seguro de ir? —Christopher voltea hacia su derecha, deja la botella en el piso alfombrado y retira un mechón de cabello—. No lo tomes a mal, solo tengo curiosidad de por qué tu Omega aceptó tan rápido a Joel si apenas se conocen hace un año, aunque, si introducimos la parte más elocuente de su "relación"... Hoy se conocieron.

—Chris...

—¿Por qué Joel y no Anderson?

Erick queda boquiabierto ante la mención de aquel Alfa, tomando un largo trago se coloca de pie y se marcha sin más. Chris no debe saber que su Omega sintió un sutil regocijo al escuchar eso.

|N|O|T|A|

LAMENTO MUCHÍSIMO HABER TARDADO EN PUBLICAR. ESTA HISTORIA TENDRÁ POCOS CAPÍTULOS, NO QUIERO HACERLA MUY EXTENSA (RECEMOS). DUDO QUE HAYA EL DRAMA DE LA VIDA, ASÍ QUE CALMA :D

DISFRUTEN.

BESOS.

LXS AMO INFINITAMENTE.

INSTAGRAM: JOERICK.BUBBLES

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