28 - Un lugar maravilloso.

13.8K 1K 211
                                    


Jungkook lleva alrededor de 30 minutos conduciendo, pero no me quejo, ahora mi mirada se enfoca en la carretera vacía a través de la ventana, cada vez que él avanza más puedo ver mayor cantidad de árboles y eso me hace sonreír

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jungkook lleva alrededor de 30 minutos conduciendo, pero no me quejo, ahora mi mirada se enfoca en la carretera vacía a través de la ventana, cada vez que él avanza más puedo ver mayor cantidad de árboles y eso me hace sonreír. Le observo conducir, se ha quitado el saco y ha aflojado su corbata para estar más cómodo, su camisa se cierne a sus músculos con perfección, se ve tan sexy y masculino que me saca un pequeño suspiro.

¿En serio ese es el hombre con el que he estado experimentado tantas cosas placenteras? 

Él está concentrado en lo que hace pero aún así su mano libre viaja hasta mi muslo y allí la reposa masajeando suavemente mi muslo interior, provocándome un cosquilleo por toda el área e incluso por mi abdomen bajo, las yemas de sus dedos rozan tan ligeramente con mi piel, trazando largas líneas que van desde mi rodilla hasta el interior de mi muslo.

Como respuesta, mi entrepierna comienza a acalorarse y a contraerse de vez en cuando, debo morder mi labio inferior para evitar soltar algún sonido que delate mi excitación, o Jungkook pensaría que soy una virgen hormonal que se excita hasta por un mínimo roce, aunque está más que claro que sus intenciones no son las más puras. 

—¿En serio no me dirás a dónde vamos? —insisto como por cuarta vez, tratando de desviar mi mente y atención de su toque que no ha cesado en lo absoluto.

Él niega completamente decidido.

—No lo haré, Suni. 

—Esto puede contar como secuestro —refunfuño.

—¿Acaso estoy llevándote en contra de tu voluntad? —me mira fugazmente con su ceño fruncido antes de volver a dirigir su mirada a la carretera, yo simplemente hago silencio —Sí, es lo que pensé

Inésperadamente él se detiene en una gasolinera un tanto aislada y antes de salir me mira guiñándome un ojo y luego sale apagando el motor del auto como es requerido. Hago lo mismo, pues necesito estirarme y respirar un poco de aire fresco. 

Mis pies están algo entumecidos y poder estirarlos se siente bastante satisfactorio. Observo mi alrededor, no hay muchos autos cerca y Jungkook se concentra en llenar el tanque, verlo allí parado hace que las palabras de Jae vengan a mi cabeza y entonces no puedo evitar mirar su trasero y morder mi labio inferior.

Cielos. ¿Por qué no me había fijado antes? 

Cuando me mira desvío mi vista rápidamente a otro lugar, específicamente a la pequeña tienda situada al fondo. 

—Mhm, iré por unas golosinas, ¿Se le antoja algo, señor Jeon? —hablo juguetonamente, cruzando mis manos por detrás. 

Él niega —Nada a excepción de ti, pero está bien, eso es algo que podríamos resolver más tarde. 

Aprieto mis labios, mis mejillas comienzan a arder así que para que él no lo note giro e inicio mi andar con rapidez. Una chica pelinegra me recibe con una sonrisa tan falsa que se puede notar desde aquí, pero yo le sonrío amablemente y me acerco hasta la repisa repleta de gomitas agridulces, mis favoritas. 

Director » jjk ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora