winter ; 𝗺𝗶𝗰𝗵𝗮𝗲𝗻𝗴

Capítulo 7 (2Yeon)

<Nayeon>

"¡A la víbora de la mar por aquí podrás pasar el de a-".

"Cállate por favor". Se quita los lentes y me mira con súplica, leva una hora leyendo y no me presta atención, he estado hablando sobre las cosas que alguna vez me pregunto pero que yo decido ocultar y ahora que estoy dispuesta a decirselas no me presta atención.

"¿Que lees?". Pregunto y me acerco lentamente, esta recostada en el sillón y mis ojos viajan desde sus labios hasta el libro.

"Nada que te importe". Me empuja y caigo sentada al suelo.

Al frío y duro suelo.

"¡Yoo prestame atención!". Rueda los ojos y acerca más el libro a su rostro.

"¿Estas leyendo cincuenta sombras de Grey?". Hace una mueca y se cubre por completo. "Entonces es...¿por que no me dejas ver?". Me estoy empezando a molestar de más.

"Porque es mi asunto y yo no te pregunto todo". La miro sin decir nada, intento transmitir mi desesperación. "Es una historia de dos chicas". Bufa y luego de un tiempo deja el libro a su lado, aprieto los labios expectante por las cosas que hace.

"¿Que más?". Muevo mis manos.

"Más nada, deja de molestar y ve a...no lo se hacer tus cosas". Dice y noto el fastidio en su voz, hago un puchero y me acerco. "No te diré nada de la historia, niñita hetero homofóbica".

"Lindo apodo niñita lesbiana asquerosa". Cubro mi boca y muerdo mis labios, ella me mira, se levanta y se va con el libro hasta la habitación. "Yoo lo siento, no qui-".

"Ahora si ve a molestar a quien sea menos a mi porque te voy a desfigurar la cara con el libro". Cierra la puerta y salto por el sonido tan estruendoso.

"Jeongyeon, lamento haberte dicho así". Toco varias veces la puerta. "¿En serio te vas a poner así?". Necesito que alguien me haga callar. "Por favor Jeong, no volveré a decir".

"Eso piensas de mi". Murmura. "Así que no te diré más nada, ¡vete Im a donde se te pegue la regalada gana".

"No pienso eso de ti". Aclaro. "De todos en general". Susurro.

"¡Vete a la mierda!". Golpea la puerta y escucho que se aleja.

"¡Lo siento!". Derrotada me voy a la cocina, con algo la tengo que arreglar y hacerla sonreír o por lo menos disculparme.

"Y...listo". Limpio la capa de sudor que habia en mi frente y voy a la habitación, lista, preparada y más que feliz.

Abro la puerta con la llave que encontré luego de darme cuenta que habían unas, además de que estaban en la mesita, a veces se me escapan los pequeños detalles por estar pensando tanto.

Al entrar me doy cuenta que Jeongyeon está dormida, me acerco y soplo sus ojos. "Despierta". Esto ya se está haciendo un hábito extraño. "Avestruz ¡despierta!". Grito y salta de la cama.

"¿Que haces aquí?". Abre los ojos y bosteza.

"También es mi habitación y...". No puedo discutir, no otra vez, porque ya he hecho cosas afuera para que le perdone como para volver a cagarla. "Te preparé un montón de cosas".

"No gracias, no tengo hambre". Se da la vuelta.

"Vamos Jeong, ya me disculpe y te prepare un montón de cosas, se que dije algo feo y me disculpo de corazón". Tercer intento, cruzo mis dedos y...

"Esta bien, pero no hables tanto". Coloca sus dedos en mis labios y siento una corriente en mi cuerpo.

Me deja algo inestable y en las nubes. "Bue-bueno vámonos". La jalo del antebrazo hasta la mesa del comedor. "¡Ta-Da!". Señalo con mis manos abiertas lo que hice.

"¡Wow!". Muevo mi puño en círculos, ella voltea y detengo la celebración. "Ok...". Se sienta y yo me siento que su lado.

"Come". Apoyo mis codos en la mesa y reposo mi rostro entre mis manos, ella come y yo la veo.

No sé ha dado cuenta que es muy bonita o si lo sabe pero no es tan engreída como yo. "¿Te ocurre algo conmigo?". Deja los palillos a un lado y yo luego niego sin querer hablar.

"Come". Repito y levanto las cejas.

"Estas muy rara, no me veas así". Sus mejillas enrojecen y sonrío por ese simple acto de ternura.

"La señora Yoo Jeongyeon esta atemorizada por una simple damisela". Sigue comiendo y toma agua. "No estés tan nerviosa, las amigas se miran así".

"No, ninguna amiga se mira tan fijamente". Refuta. "Por lo cual no me estas viendo como una amiga". Trago en seco y aparto la vista de sus ojos.

"Claro que te veo como una amiga". Ignoro como sonríe con gracia. "Eso es mentira, es imposible verte así, porque a mi no me gusta eso".

"¿Eso?". Mete el último trozo a su boca y no puedo evitar ver sus labios.

"Eso". Digo.

"Yo no te estoy diciendo homosexual". Abro los ojos en grande. "Dije que te gustaba ver mucho a las personas, debe ser por eso que me miras así". Asiento.

"Si eso". Cruzo las piernas y las aprieto al sentir el roce de su muslo contra el mío.

"Nayeon estas pálida, otra vez te estoy viendo palida, yo creo que mejor te vas a recostar que estuviste haciendo todo esto, créeme no me lo comeré todo, te dejaré una parte en la cocina y sabes que te dejaré pastel". Me levanto y me voy sin decir nada. "¡Duerme!". Grita y cierro la puerta.

Me despierto al sentir algo cerca de mi cuerpo, que me abraza y me aprieta como si fuera un peluche o una almohada.

Inhalo su aroma y me acomodo mejor, puedo sentir el latido de su corazón, sonrío paso lo nariz por toda esa extensión hasta que llego a sus. "¡Yoo Jeongyeon!". Grito como si la estuviera saludando, ella abre un ojo y lo vuelve a cerrar. "Estas aquí y yo no sabía, ahora lo sé y es raro". No puedo evitar hablar como una presentadora de algún tipo de producto súper malo.

"No es raro y...". Tapa mi boca con sus largos dedos, bajo la vista a ellos y los desvio rápidamente.

"Jeongyeon, no tengo hambre, pero me gustaría obligarme a comer". Me aparto nuevamente y vuelve a jalarme hasta la cama.

"Cómeme". Cierro los ojos y río, luego de un tiempo analizo lo que acaba de decir y salto de la cama.

"¿Jeongyeon?". He perdido la cuenta de cuántas veces mi corazón a latido con fuerza este día. "Estas dormida y dices cosas raras". Murmuro y me recuesto en su pecho. "Cosas raras que me hacen sentir cosas raras".