winter ; 𝗺𝗶𝗰𝗵𝗮𝗲𝗻𝗴

Capítulo 8 (Michaeng)

<Mina>

Otra vez con insomnio pero este si tiene razón y es que luego de que pasara una semana del cumpleaños de Momo me di cuenta que cada vez que hablaba de ella Chaeyoung buscaba una excusa para cambiar de tema o irse sin dar una explicación concreta.

La he estado buscando, pero nada de nada, no me ha querido decir por qué es que le molesta tanto que interactúe con si mejor amiga, que yo recuerde era ella la que quería que fuera más sociable no yo.

Lo que no entiendo de todo esto es que por más que intente hacerla sonreír, reír e incluso molestar pero no me hacia caso.

Eso fue hace dos días y desde anteayer no me ha querido dirigir la palabras, así que volvimos al comienzo de la historia, al comienzo de todo, las mañanas son aburridas, las tardes sin emoción y las noches, como hoy, frías y solitarias.

No es que no me guste la soledad, bueno llevo toda mi vida sola, ahora que tenía todo lo que se supone tiene el ser humano, no podía evitar sentir un vacío debido a su falta de interés hacia mi.

Pensé que a ella le gustaba Momo aunque por la forma en como se expresa de ella, pues no, porque se nota que la quiere como una amiga y las amigas se llevan bien, hasta como hermanas.

Así las sentí, algo que me llamó la atención de su interacción como amigas es que Momo no actúa como ella, lo hace con más entusiasmo, más amor, demuestra más su cariño y siempre está diciendo algo bueno de Chaeyoung, a diferencia de ella que decía cosas puntuales.

Como si fuera un examen y solo respondía lo que yo le preguntaba, no parece estar celosa de esa forma, ni tampoco de la forma romántica en cuanto a Momo por lo cual esa no es la razón por la que esta tan molesta conmigo, eso si, no si lo esta o es que tiene sus días para estar sola.

Suspiro y tapó mis ojos con la sábana debido a la intensa luz que se cuela a la habitación desde la sala, no había  apagado la luz, es algo raro porque siempre lo hace, sin excepción alguna.

Me levanto y camino hasta donde se supone que está Chaeyoung, al asomarme la veo haciendo lagartijas. "Ejercicio". Murmuro y ella para de hacerlo.

"Me mantiene en línea". Su voz agitada y el sudor en su cuerpo me hace desviar la mirada hacía la televisión.

"Si, se ve que haces bastante". Digo con un hilo de voz y me dirijo, sin ser capaz de cruzar miradas, hacía el sofá vacío.

"Son las seis de la mañana y tienes tantas ojeras que me hace pensar que no dormiste". El 'clap clap' de sus botas chocando contra el suelo me desconcentra un poco.

"No tenía sueño y me puse a cer una película". Informo sin necesidad de hacerlo y enciendo la TV. "Muy buena por cierto". Sigo hablando y no tengo ni idea que decirle si me pregunta cual es.

"¿Cual era?". Siempre me pasa lo mismo.

"After we collided". Contesto.

"En esa película pasan escenas sexuales bastante fuertes pero si tuviera que elegir una película que ver contigo seria...". La miro de reojo y sonrío por su rostro, como amo su sonrisa y ni se diga sus tatuajes.

¿Desde cuándo amo eso?, golpeo levemente mi cabeza y lo disimulo con una pequeña sonrisa.

"Ni se te ocurra nombrar una de la trilogía de cincuenta sombras de Grey o...

"Trescientos sesenta y cinco días". Chasquea los dedos al recordar el nombre.

"No, ni loca la vería contigo". Mis mejillas arden y bajo la mirada al suelo.

"¿Tus hormonas están muy alborotadas?". Pregunta y luego ríe.

"No es por eso, es que es raro, es casi porno".