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Recuerdo que todo comenzó una vez terminado el verano, la academia volvía a abrir sus puertas a los estudiantes que llevaban ya un año en curso y yo no era uno de ellos; había tenido muchos problemas que involucraban el trabajo de mi tío como comisionado de policía, pero la academia me dio la oportunidad de inscribirme para el siguiente año tomando el mismo curso que los que recién habían ingresado.

Estaba entusiasmado por aquella oportunidad, la academia Kibougamine es la más prestigiosa de todo Japón, solo aceptan a jóvenes que hayan hecho algo increíble demostrando que son dotados de un gran talento; estos alumnos son conocidos como definitivos.

Ahora yo soy Shuichi Saihara, el Detective definitivo.

Prepare con prontitud mi maleta, pues el asistir a esta academia no necesitaba solamente de una mochila; faje mi traje y acomode mi gorra ocultando parte de mi cabeza y mi mirada. Finalmente bajé a la puerta de salida de mi casa ya listo para marchar, mi tío me esperaba impacienté en su auto detonando la bocina con cierta alegría.

—¡shuichi! —llamo mi atención—¿¡porque tanta tardanza!? ¡llegaremos tarde!

Tras esto aceleré mi paso, subí al viejo auto estilo mid size de color café de mi tío notando de inmediato el fuerte olor a tabaco que ya era común y eventualmente salimos a la carretera.

Recuerdo que era un camino bastante largo, desde mi ciudad hasta la academia, casi tres horas en el auto viendo por la ventana como el día me sonreía, el sol que brillaba con emoción, las casi nulas nubes y el aire que me ayudaba a dispersar el olor a tabaco; como siempre, mi tío parecía combinar con el paisaje, pues su sonrisa era más grande de lo usual y podía ver por el retrovisor sus ojos brillantes de orgullo, siendo eso quizás lo mejor del viaje.

—¿sabes que amerita esto shuichi? — volvió a nombrar con alegría

—no por favor

—¡claro que sí!

Aprovechando la inexistencia de coches o peatones en el paso, mi tío pudo sacar de su bolsillo un disco ya bastante usado y que me tenía algo harto, se trataba de un disco con la canción de el cual llevaba reproduciendo en el auto cerca de 3 semanas, sigo sin entender hasta el día de hoy como hizo para no hartarse en todo ese tiempo.

Una vez lo reprodujo en la radio del coche no tuve de otra más que quejarme mientras él reía por lo bajo, admito que sonaba bastante bien de fondo durante el camino, su tonada era algo alegre y la voz de la chica sí que llamaba la atención, aunque no sabría bien decir porque, ya que he escuchado voces mucho mejores. A pesar de todo, había algo en esa canción que siempre llamo mi atención para mal y era la letra, nunca podía ignorar la letra.

Mi tío sacaba conversación de todo, siempre alegre, siempre entusiasmado dispuesto a platicar sobre cualquier cosa mientras su canción favorita se escuchaba por todo el auto.

I was pulling out my hair

The day I got the deal

Chemically calm

Was I meant to feel happy that my life

Was just about to change?

(me estaba arrancando el pelo, el día que tuve el contrato- químicamente calmado, ¿estaba destinado a ser feliz en mi vida?, ¿Qué mi vida estaba a punto de cambiar?)

Realmente nunca pensé que esa canción llegaría a ser tan importante, nunca paso de solo ser curiosa.

One life pretending to be the cat who got the cream

Oh, everybody said, "Marina is a dreamer"

People like to tell you what you're gonna be

It's not my problem if you don't see what I see

彡❤[ROOMIE-SAIOUMA]❤ミWhere stories live. Discover now