Capítulo 5: Busco Golpeador

568 53 6
                                    

Blaise caminaba junto con Theo, detrás de Draco y Harry, quien de la noche a la mañana se había hecho cercano a su hermano. No se quejaba, no era ciego y veía que esa amistad con Potter le estaba haciendo muy bien a Draco y estaba muy agradecido por su ayuda cuando él intento suicidarse. Draco se había abierto las muñecas y se había tirado al lago y él, como su hermano, no se había dado cuenta de nada. Esa culpa jamás lo iba a dejar, estuvo apunto de perder a una parte de lo que le quedaba de su familia y no pudo hacer nada. Toda la vida le iba a estar agradecido con Granger y con Potter. Al entrar en el Gran Comedor tomo rumbo hacia la mesa de Slytherin encontrándose con la sorpresa de que estaba invadida por dos Gryffindor. Neville Longbottom hablaba animadamente con Astoria, mientras que Hermione Granger le explicaba algo de un libro a Daphne. Parecía que estaba en otra dimensión.

-Les guardamos lugar-dijo Hermione haciendo espacio para Harry y Draco, mientras Astoria hacia espacio para Theo y Blaise.

-Pensé que nos sentaríamos en Gryffindor-comentó Harry a su amiga. Era un poco inquietante ver a Harry Potter desenvolviéndose con tanta naturalidad en la mesa de Slytherin.

-Sí, pero alguien no le gusto nuestra presencia ahí-respondió Daphne mirando fríamente a cierto pelirrojo de la mesa de los leones.

- ¿Pansy? -preguntó Draco al no ver a su hermana.

-La dejamos en la biblioteca-respondió Neville, otro león que había aprendido muy bien el mezclarse con las serpientes.

-Hola-todos se voltearon al ver a Pansy aparecer con Luna Lovegood. Blaise estaba alucinando, sin embargo observó como Theo se movía algo inquieto ante la presencia de Lovegood. -Me encontré a Luna en la biblioteca y la invité a comer con nosotros-explicó Pansy sentándose al lado de Daphne, quedando así el único puesto libre el de al lado de Theo. Serpiente lista.

-Hola, Theodore-saludó Luna a Theo con una sutil sonrisa.

-Hola, Lu... Luna-dijo con cierta timidez impropia. Se notaba a kilómetros a la distancia lo que sentía Theo por quien lo cuidó mientras estaba en el hospital. Era grato verlo así de emocionado por alguien después de todo lo que habían pasado.

Sentía que era un poco cruel admitirlo, pero jamás se había sentido tan aliviado como cuando le informaron de la muerte de su madre. Xandra Zabini siempre fue una mujer fría y calculadora, incluso con su propio hijo, siempre lo vio como quien le abriría todas las puertas necesarias de la sociedad al ser el único heredero de la familia Zabini. Su padre, Leonardo Zabini, murió cuando él tenia 4 años y tenia muy pocos recuerdos de él, era un hombre triste que se marchitaba día con día al lado de una mujer que amó en su minuto, sin embargo siempre le dedicó tiempo a su hijo y aunque estuviera destrozado siempre le sonreía y le decía cuanto lo quería. Cuando murió, Blaise dejó de escuchar palabras amorosas dedicadas a él, era el instrumento que su madre necesitaba para estar en sociedad y engatusar a más hombres para obtener sus fortunas. Su madre fue una verdadera viuda negra. Una sola vez ella volvió a quedar embarazada de su cuarto marido cuando Blaise tenia 10 años, y él fue tan feliz cuando perdió al bebé a las 18 semanas, aun más cuando el medimago les informó que no iba tener más hijos. Para Blaise esa noticia fue la mejor de su vida, ningún hermano suyo iba ser utilizado como él. Lo único bueno que hizo su madre por él fue impulsarlo a hacer amistad con Draco y Pansy, fue un regalo encontrarlos, al poco tiempo se unió Theo. Entre los cuatros se entendían y apoyaban, se volvieron hermanos sin darse cuenta. Aun así su madre siempre fue su pesadilla constante. Recordaba como lo torturó al decirle que no pensaba ser mortifago, como lo obligó a ver tanta barbarie. Él jamás fue su hijo, solo un instrumento. Ahora con ella muerta era libre, podía hacer lo que deseara con su vida sin que nadie lo importunara. En Azkaban había empezado a pensar que hacer y lo tenia claro. Borrar todo lo que había hecho su madre, limpiar el apellido de su padre y empezar de cero si era necesario. Los inicios de la fortuna de los Zabini fue gracias al trabajo de joyería, él podría retomar aquello.

Camino hacia un futuro mágico inesperadoWhere stories live. Discover now