H y S

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Capítulo 6

— ¿Tú estas saliendo con mi hermanita? — Sawyer da un paso más cerca

Seth no se movía, no salió corriendo y menos intentó enfrentar a Sawyer solo parecía como que estuviera esperando el golpe.

— Sammy, esta bien ellos saben porque nos ocultaron algo tan importante — tomo el brazo de Sawyer y él me mira confundido — ¿Verdad S?, algunas veces las personas tienen que guardar secretos muy importantes.

— Ya entendimos Rye, lo siento por no decirles antes de Hannah y Seth pero me amenazaron con ya no comprarme helado si decía algo y después se me olvido — Liam se pone de pie — Lo importante es que todos estamos felices.

— Liam... nosotros no sabíamos que tú sabias — murmura Sawyer

— ¿Hece cuanto tiempo están saliendo?

— Nosotros...

— Cariño, por favor deja de sujetar mi brazo con tanta fuerza porque siento que la sangre deja de circular — gruñe Sawyer

— Lo siento — lo suelto

— Ustedes nunca nos dijeron que comenzaron a salir — reniega Hannah

— Es cierto — murmura Liam

— Nosotros no lo sabíamos.

— ¿Cómo qué no?, yo te dije San Francisco y tú me respondiste lo mismo.

— Cállate Sawyer estoy intentando arreglar esto, además nosotros no somos los interrogados aquí.

— Oigan saben no he dormido nada y acabo de regresar, son muchas cosas, ¿podemos seguir con esto mañana?

— Claro, vivimos enfrente solo grita y yo voy contigo.

— Respecto a eso... en realidad, hablamos otro día.

Tomó la mano de Sawyer y salimos del lugar.

— Me hubieras dejado golpearlo, yo deje que me golpeara cuando me escogiste.

— Si señor Bluet pero si lo golpeas en la cafetería pueden meterte la cárcel.

— ¿Vamos a casa señora Bluet?

— Estuve esperando que lo dijeras — tomó de su chaqueta y lo acercó a mí
— Tenemos mucho tiempo que recuperar.



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Seth

Un año antes.

Aunque pasaba horas debajo del agua de la ducha sentía aún la sangre sobre mi, había hecho un promesa, nunca mataría a nadie y la rompí.

Los nudillos de mis manos estaban algo lastimados, mamá lo dijo una vez nunca iba a vivir feliz gracias a todas las cosas que había hecho, ella creía que no me importaba, que lo miraba como algo sencillo y en cierto punto lo era pero mi alma siempre dolía.

Salgo de la ducha y busco unos pantalones de pijama, seco mi cabello y bajo a la sala.

El lugar está vacío, desolado no había ni un alma en el lugar después de todo aleje a las únicas personas que quería estar cerca de mi.

— ¿Hannah? — digo extraño al verla parada en la puerta

— Traje helado, Liam dijo que el helado siempre te hacía sentir mejor y como no lo quieres cerca vine en su lugar.

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