treinta

2.7K 447 52
                                    

スカーレット・ラブ
Amor escarlata; capítulo treinta
«una persona más a la lista»

スカーレット・ラブAmor escarlata; capítulo treinta«una persona más a la lista»

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

• • •















































Un estruendo resonó por toda la torre Hokage, alertando a los empleados que estaban adentro que fueron directamente a donde provenía el sonido. Shikamaru entró a la oficina de Miko encontrándola con sus hebras rojizas elevadas en el aire mientras un pergamino estaba tirado en el suelo junto con papeles, sorprendido observó el desastre que ocasionó la mujer y se quedó mirando a la susodicha que estaba temblando mientras miraba por el ventanal. 

—Prepara un escuadrón, Shikamaru, para acompañarme —ordenó con seriedad la fémina sin voltearse a ver al Nara que fruncía su ceño sin comprender del todo la situación—. Y que estén atentos a las órdenes de Tsunade mientras yo no esté.

—¿Qué hará, Hokage?

—Iré a por Gaara —soltó, volteándose a verlo. Dejando a la vista su mirada azulada que estaba levemente cristalizada, y el pelinegro llegó a la conclusión que algo malo había pasado.

Asintió y salió de la oficina siendo seguido por varios guardias, dejando a la Uzumaki golpear con fuerza su escritorio rompiéndolo por la brutalidad del golpe. Hace tan solo unos cuantos días había sido informada del secuestro del Kazekage, se resistió al principio de ir porque tenía unos asuntos que atender primero y había mandado al equipo de Kakashi y el de Guy. Pero ahora con lo que le había traído uno de sus leones que había ido de manera oculta con ellos, solo aumentó esa opresión en su pecho. Un nudo en su garganta se formó mientras sus manos temblaban, apretó sus labios mirando hacia el techo sin querer desahogarse pero un pequeño sollozo salió de sus labios al recordar las palabras de que pronunció su león.

Posiblemente esté muerto, líder.

—Lo siento, lo siento tanto —murmuró con la voz quebrada—. No te pude salvar, lo siento tanto.

Otra vez no era capaz de salvar a uno de sus seres amados.

Suspiró pasando su mano por sus ojos para tomar su capa y salir de su oficina sin mirar el desastre que había hecho, haciéndole una señal a Takeshi que caminaba por el pasillo en dirección a la habitación. El león preguntó rápidamente la situación y la pelirroja le explicó lo que estaba pasando, sin poder evitar mostrarse enojada consigo misma por no haber podido hacer algo. Al estar en la entrada de la aldea un escuadrón pequeño de ANBU y Shikamaru estaban esperándola, la Hokage dio la señal y comenzaron a correr en dirección al lugar al que el informante rojizo de la mujer había visto al Kazekage ser llevado por una ave de arcilla. 

Su pecho se oprimía cada vez más ante el pensamiento de aquel chico de hebras rojas esté muerto, sin querer que el nombre de Gaara estuviera en la lista de las pequeñas que fallecieron y fueron importantes para ella. No podía creer que ese chico de dieciséis años haya podido enamorarla y por más que se hayan visto tan pocas veces, él había hecho de todo para que por lo menos entablaran conversaciones de media hora. A ella antes no le gustaba Gaara, solo lo veía como un amigo más de su sobrino, pero poco a poco se dio cuenta de pequeños detalles y junto con las jugadas de la Vida no pudo evitar caer ante los pies del menor. Primero, su manera directa de confesar cosas había logrado que su interés despertara, también cuando lo vio asesinar y ese deseo de sangre en sus ojos le recordaban a ella y no pudo evitar pensar que tenían algo en común; luego de hacer misiones en Suna y ayudarlo en algunas cosas por pedido de él se dio cuenta que era un chico tímido, responsable y que deseaba que su aldea no lo vea como el monstruo que anteriormente era. Él quería cambiar, y ella pensó en lo fuerte y decidido que estaba para lograrlo.

Se ganó su admiración y luego de tantas cartas se ganó su cariño más sincero, estaba enamorada de un mocoso de la arena y que era doce años menor que ella.

—¡Hokage, veo a Naruto a unos metros! —gritó Shikamaru apuntando a unos kilómetros al haber mandado una cantidad de chakra a sus ojos para aumentar su capacidad visual.

—¡Entendido, Shikamaru! —exclamó la mujer saliendo de sus pensamientos, y sus pasos se detuvieron cuando observó a su sobrino llorar con fuerza mientras veía el cuerpo tendido de Gaara en el suelo—. Na-Naruto, ¿él está...?

Tartamudeó avanzando a pasos torpes, siendo observada por los presentes que vieron con asombro como pequeñas lágrimas salían de los ocelos azules de la Hokage y caía de rodilla a un costado del cuerpo de el pelirrojo que descansaba en el suelo sin moverse e inerte. Naruto lloró aún más al ver como el alma de su madre se rompía cada vez más visiblemente, y ella lo acompañó de manera silenciosa en su llanto. La mujer acarició la mejilla fría del menor, creyendo que era una mala jugada de la Vida y gritó saliendo de sus estribos; sus hebras se elevaron mientras un aura rojiza la rodeaba con fuerza y algo del mismo tono salía con lentitud de su pecho para instalarse en el de Gaara. Takeshi saltó hasta estar al lado de la fémina que tenía rasgos felinos, pareciéndose a Naruto cuando se salía de control. Unas marcas de bigotes decoraban sus mejillas de un tono rojizo mientras sus ojos tenían un tono rojo más fuerte, como si un río de lava decorara esos ocelos. 

«Sucumbió ante el dolor de los Leones Rojizos, una de las fases escondidas de los leones que solo tres líderes anteriores pudieron sentir» pensó con impresión, pero se vio más sorprendido al notar como esa sustancia que salía del pecho de la fémina entraba al cuerpo de Gaara. «¿Es un nuevo poder? No, no lo es. Es más como un chakra extraño, parecido al de Naruto. Chakra de un Bijū» afirmó con seriedad, buscando en sus memorias cuando obtuvo la mujer el chakra del Bijū de una cola. «¿Cuándo? Ella tenía algo extraño desde hace unos años, desde la invasión de Orochimaru».

—M-Mamá —susurró con sorpresa el rubio cuando el rostro de la pelirroja cambió, pareciéndose al de él cuando fue a la Tierra de las Olas y vio a Sasuke "morir". Miko lo miró con su mirada cristalizada—. ¿Qué fue eso?

—Chakra de el Bijū que antes tenía Gaara —respondió el felino para todos, impresionándolos—. Al parecer éste le dio un poco hace unos años cuando sucedió la invasión de Orochimaru, solo que no entiendo el por qué.

—Sabía que algo malo pasaría —opinó Shikamaru acercándose a la Hokage que tenía entre sus manos las de el pelirrojo—. Un cuerpo sin chakra es uno vacío, sin vida; pero con un poco de chakra vuelve a funcionar, y el de esos Bijū son más poderosos de los chakra que yo o Kakashi tenemos, por lo que posiblemente ahora el Kazekage pueda vivir al recibir ese chakra poderoso.

—Ojalá sea así, Shikamaru —suspiró Miko y estuvo a punto de usar el jutsu que le prohibió Tsunade para por lo menos lograr que el corazón del chico latiera, pero un apretón en sus manos logró que mirara intranquila al pelirrojo que abría con lentitud sus ojos.

—¡Gaara!

Miko se paró y se alejó unos metros con Takeshi a su lado, dándole la espalda a los shinobis para que no vean sus lágrimas de alivio salir pero ya no era necesario porque todos ya la habían visto llorar anteriormente. Se giró con lentitud para ver como su hijo se tiraba arriba del pelirrojo llorando a rienda suelta mientras musitaba lo preocupado que estaba y lo regañaba por hacerla llorar, logrando que el Kazekage buscase con su mirada turquesa su presencia y ella le dedicó una pequeña sonrisa cuando sus miradas chocaron creando un hermoso mar de tonalidades azules y rojos.

—Miko... —susurró al verla ahí con esa transformación que le hacía parecer un león rojo, como el que estaba al lado de ella.

—No por nada me dicen la Leona Sangrienta, Gaara —dijo ella para acercarse al menor y, ante la vista de todos, le dio un beso en la frente del pelirrojo—. Me alegra verte con vida, mocoso.




 Me alegra verte con vida, mocoso

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
❛ 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐞𝐬𝐜𝐚𝐫𝐥𝐚𝐭𝐚 ❜ ;; naruto, naruto shippudenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora