玉:(VEINTINUEVE) 二十九

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Seungyoun frunció el ceño mientras cargaba las cajas de regreso al departamento de administración.

Ya que se trataba del último día del festival, aquellos jóvenes que se habían acercado unos con otros estaban muy entusiasmados yendo de un lado a otro.

Además en la noche se celebraría la fiesta de despedida, que era el único día del año en que el alcohol y la música alta estaba permitida en Greed, por lo que el ambiente era intenso ya desde temprano en la mañana.

Bueno, en realidad ya no era temprano en la mañana. Habían ocupado gran parte de ésta en recepcionar las jodidas cartas de solicitud de matrimonio.

Inicialmente Seungyoun no habría querido ir él mismo a entregarlas de regreso, principalmente porque no quería dejar a Seungwoo a solas con Wooseok, pero como había sido éste último quien se lo pidió, solo pudo tragar su disgusto y hacer lo que le ordenaban.

Seungyoun suspiró y puso una sonrisa en su rostro. La puerta del departamento de administración se abrió frente a él.

—¡Buenos días, vine a---

—¡AHHH! DEMONIOS, ¿POR QUÉ SIGUEN LLEGANDO?

—¡NUESTRA CIVILIZACIÓN HA AVANZADO TANTO! ¿POR QUÉ RAYOS AÚN MANTENEMOS COSTUMBRES ANTICUADAS COMO ESTAS? ¡SIMPLEMENTE DEBERÍAN ENVIAR SUS CARTAS POR LA RED, Y PODRÍAN SER RECHAZADAS AUTOMATICAMENTE!

Seungyoun se encontró con este infierno de maldiciones y montañas de papel, tragó incómodo y supo que debía ser cuidadoso si no quería ser involucrado en el asunto.

—Eh, yo dejaré esto por aquí. —Cho habló con la voz más pequeña que tenía— Adiós.

Pero cuando se giró para marcharse, sintió dos pares de manos que lo arrastraban al infierno.

Y así, fue secuestrado para realizar actividades forzosas junto al departamento de administración.

Jamás habría pensado que Hangyul decía la verdad cuando dijo que había un departamento especial para rechazar las cartas de matrimonio de Kim Wooseok, pero la realidad siempre superaba a la ficción.

Seungyoun no fue liberado sino hasta que todas las cartas fueron recibidas y rechazadas debidamente, lo cual no ocurrió hasta ya entrada la noche.

El joven Alfa estaba irritado y molesto, pero viendo los rostros exhaustos y desesperados de los encargados, no podía enojarse con ellos.

—Ah, estoy tan cansada. —Una omega se lamentó

—Solo quiero ir a casa y dormir el resto de la semana.

—¿Eh? Noona, ¿no irás a la fiesta? —Seungyoun se sorprendió— ¿No estaban trabajando tan duro para terminar, y así poder disfrutar de la celebración también?

Las exhaustas omegas miraron al joven y apuesto Alfa, y sintieron que el tan solo mirarlo era la buena recompensa de todo el trabajo duro.

—No~ después de ver todas estas cartas de solicitud, me hace sentir patética ir a la fiesta sin una pareja. ¡El Mariscal Kim es tan afortunado!

—Yah, Seungyoun, ¿por qué no nos llevas tu?

—Mm, seguramente sería la envidia de toda la manada si llegara de la mano con todas estas noonas y estos hyung. —Cho bromeó—

—Eres todo un jugador.

Ahora que el trabajo estaba hecho, los semblantes de estas personas empezaron a relajarse, o al menos ya no parecían a punto de colgarlo de cabeza si se atrevía a huir del trabajo, así que empezó a planear su huida sin que fuera tan evidente que quería largarse de una vez por todas.

JADE (SeungSeok)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora