Atte: El Destino 「Taekook/Adaptación」

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—¿Te gusta, amor? -pregunte a Tae una vez terminamos de inspeccionar el lugar.

—Si, ¿A ti? -asentí y mire las decoraciones que ya habíamos elegido con Taehyung.

—La decoración puede ser elegida por ustedes -Taehyung asintió ante el beta que nos atendía y luego le pidió que se acercara.

—Mi novio tiene algunos modelos. El que él elija, tiene que quedar idéntico -el beta asintió y revisó todos los modelos junto conmigo diciéndome los pro y los contra y también ayudando un poco con los detalles.

—Listo, amor. Ya quedó -dije con una enorme sonrisa en mi rostro.

El chico anotó en su computador todos los detalles que le había pedido y luego nos pidió que pasáramos por la tarde y que tendrían el boceto de cómo sería la decoración detallando que tipo de flores y telas usarían.

Yo le hablé un poco de los gustos de Taehyung, como por ejemplo, que ama mi aroma a durazno y cacao. También le dije que ama el color negro pero que no queríamos hacerlo tan tradicional por lo que iríamos solo por colores oscuros, como la madera de roble.

—¡Amor!... ¡No pregunté el presupuesto! ¡Yo solo lo elegí y no se cuanto costará! -Tae tomó mis dos manos y negó dejando un beso.

—Ese será mi regalo de bodas, amor, que sea tu boda perfecta. Tal cual se proyecta en tu mente, así será. Por eso, ahora que terminemos nuestro café iremos a elegir mi outfit para la boda -lo miré de manera neutral.

¿Acaso dijo que aún no compro su vestimenta?

—Tae... estamos a tres semanas de nuestra boda. ¿Como es eso de que aún no has elegido tu traje? -rió soltando mis manos y espero a que la chica dejara nuestro pedido en la mesa. — Taehyung, no te rías. -el reclame completamente molesto.

¡Lo estoy! ¡Yo elegí el mío hace unos meses y él simplemente me dice que todavía no lo ha elegido!

—¿A donde fuiste cuando dijiste que saldrías a comprar el traje? -pregunte con mi omega inquieto y con celos.

—Es broma, amor. ¡Mira como te pones! -no puedo creerlo, sabe que esto el miedo de no llegar con el tiempo me estresa y él hace sus bromas.— Ya tengo el traje, tengo mis votos escritos aunque creo que diré una improvisación. Tiene que nacer desde mi corazón como mi amor por ti. -dijo manchando la punta de mi nariz con crema.

—¡Yah! -dije cruzando mis brazos y luego reí.

—No me gusta verte enojado. Ya no me mires así o te besare frente a todas estas personas. -me encogí de hombros. Era una maravillosa idea provocarlo.

Miró a su alrededor y luego se levantó tirando su cuerpo hacia mi. Me hizo señas para que me acercara pero como no quise moverme, salió de su asiento y camino hasta el mío y tomó del rostro.

—Eres el omega más enojon pero sexy que conocí en mi vida y me encanta. -reí y beso aunque en medio del beso comenzamos a reír y se tiró sobre mi.