[ C U A R E N T A Y D O S ]

1.8K 140 19
                                    



[ Capítulo 42 ]

TITULADO
TENTACIONES, AMENAZAS Y VERDADES





TITULADOTENTACIONES, AMENAZAS Y VERDADES

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.






Caroline


—Debo decir que hiciste una buena elección usando ese vestido. —me susurra al oído y sonrió por lo que se me ocurre para decirle—. ¿Y esa cara qué?

—Lo eligieron para mí. —admito y me giro para verlo de frente aún estando atrapada en sus brazos. Sus ojos me demuestran confusión y no entiende que quiero decir—. Cadell me lo compró para que luciera bien esta noche, me ha demostrado ser un buen amigo y un gran hombre de negocios. —rodeó su cuello con mis brazos y puedo ver cómo los celos se apoderan de él oscureciendo sus ojos—. ¿Sucede algo, mi amor?

—Te gusta hacerme perder la paciencia, ¿no? —niego contenido la sonrisa que quiere surgir en mi rostro—. No te dejes impresionar por eso, preciosa. Que si lo quieres te compro dos, tres, cuatro o todos los vestidos que tú quieres. —me dice llevando su mano mi mejilla y me sonríe airoso—. Y si nada te complace en New York te lo mando a comprar en París, en Milán, en Rusia, en donde se te antoje a ti.

—¿Tanto por un vestido?

—Tanto y más si es para ti.

—¿Ya ves? Eres tú quien me hace ser caprichosa. —sonríe divertido y baja sus manos a mi cintura para luego posar sus manos traviesas en mi trasero—. Por tu culpa me he vuelto así. —le digo—. Caprichoso e insaciable.

—Estoy igual que tú. —una de sus manos sube por la parte aún descubierta de mi espalda y antes de que haga algo, llevo mis manos para subir el cierre pero él me detiene subiéndolo por su cuenta—. Aunque contigo no me puedo aburrir. —besa mi hombro y me ayuda a acomodar el vestido para que no se ve tan arrugado ahora que tenemos que bajar.

Terminamos de arreglarnos la ropa cada uno y bajamos justo por donde vinimos. La noche del evento apenas comenzaba y sería pésimo que él lo dejara tirado cuando es el más interesado en esto. Así como yo. Era conveniente que hoy se cerraran muchos tratos para ganar dinero y abriría más puertas. Era cierto James había dado una cantidad sumamente generosa para invertirlo en el negocio y aunque eso ayudaría se necesitaba más para sacar andar la producción al cien.

Y aunque le debía a Charles una explicación de cómo fue que me terminé involucrando, prefería dársela mañana temprano para hablar con calma y sin interrupciones de parte de nadie.

El elevador se abre para nosotros e ingresamos tomados de la mano. Él no dice nada así como yo. Esperamos a que este nos llevara  a la recepción y el camino es corto, así que apenas llegamos nos vamos directo al salón del evento. Hay gente bailando y no puedo ubicar donde están mis amigos con los cuales debo hablar pero con Charles pegado a mí será imposible hacerlo.

La esposa del Diablo: Infierno [ 1 ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora