Capítulo 21

9.2K 1.1K 112
                                    

Jimin escuchó el chillido de todos los omegas, sintió la angustia del cachorro menor al no poder resguardarlos y el olor del alfa de Yoongi, que se debatía en proteger a los cachorros o dejarse llevar. Sabía que él no les haría daño pues su alfa jamás lo permitiría, estos nunca herían a sus crías. 

Cada lobo tenía una esencia particular, que permitía a los demás reconocerlo e incluso interpretar sus emociones, pero los aromas cargados de feromonas funcionaban de forma diferente. Ellos provenían de las glándulas de olor del alfa u omega, cuando este estaba en plena conexión con su lobo.

Por su parte, el alfa saturaba el ambiente con feromonas de apareamiento enmarcadas en un fuerte olor a anís, que estaba alterando a los cachorros y causando algo de temor en Jimin. El castaño se concentró en su omega y le rogó expulsar su aroma con el fin de tranquilizar a todos, a pesar de las consecuencias que eso le traería. El omega aulló, pero al final decidió hacerlo para proteger a su manada.

Después de unos minutos los cachorros comenzaron a adormecerse y la respiración de Yoongi, se volvió más lenta y tranquila. Jimin sentía como poco a poco, su pecho comenzaba a doler y su vientre se revolvía levemente. El olor a nueces tostadas invadió los sentidos de todos, encontrando tranquilidad, tanto así que Minyoon cerró sus ojitos y se recostó sobre su padre omega. Los cachorros somnolientos se acercaron por inercia  a él buscando confort.

El alfa sintió como su lobo descansaba también, la ira que lo atormentaba quedando relegada tras el delicioso aroma. Sacudió la cabeza alejando el aturdimiento de sus sentidos.

— Te ayudaré a llevarlos a dormir — susurró a Jimin, al ver que estaba haciendo piruetas para que ninguno de sus cachorros cayera al suelo por el sueño.

El castaño asintió agradecido, suspirando por lo que vendría. Juntos subieron a los cachorros hasta sus habitaciones y los dejaron bajo las sábanas, envueltos como burritos con sus peluches favoritos para abrazar. Cuando Jimin finalmente dejó a su pequeño Minyoon en la cama, sintió las náuseas atacar, el sudor frío comenzando ha aparecer humedeciendo su frente. Se levantó para dejar la habitación observando a Yoongi, que se encontraba de pie y con los brazos cruzados sobre su pecho, recostado contra la pared contraria del pasillo, quedándose dormido. 

El alfa despertó al ver al castaño, sintiéndose avergonzado por todo lo que había sucedido, minutos antes ya había realizado el pedido de los supresores inyectables que usaría, pero su lobo se agitó al ver al menor tembloroso.

— Jimin yo lo...

— Mira Yoongi — susurró el contrario fatigado — Tienes que irte, estás en celo y... — Jimin se vio obligado a sujetarse de la pared, su cuerpo seguía con las feromonas tranquilizadoras inundando la casa, pero su cabeza ya se sentía pesada.

Perdió el equilibrio, haciendo que el mayor le sostuviera.

— Jimin ¿Estas bien? — preguntó angustiado.

El menor soltó un quedo sollozo, el dolor le recorrió por completo, expandiéndose desde su vientre a sus manos y pies, sintió como todo a su alrededor se ponía oscuro, mientras su cuerpo ardía.

— ¡Mierda! — gruñó el alfa desesperado, dejando atrás todo rastro de sopor. Con facilidad levantó a Jimin y le cargó al dormitorio principal. Lo depositó en la cama con delicadeza.

— ¿Por qué estás tan caliente omega? — cuestionó en voz alta al percibir que la piel de Jimin hervía.

Caminó al baño, tomando la toalla de manos y humedeciendola con agua fría. Al regresar a la habitación su lobo aulló desesperado. Jimin se retorcía del dolor en medio de gemidos lastimeros. Corrió a la cama mirando impotente sin saber que hacer, se sentó sobre la colcha y arrastró al menor hacia su pecho.

Mistakes «Yoonmin» - Omegaverse -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora