𝑹𝒖𝒔𝑮𝒆𝒓𝑰𝒕𝒂 / 𝑹𝒖𝒔𝑨𝒍𝒆𝑰𝒕𝒂 [𝘕𝘎𝘈]

𝐷𝑟𝑎𝑏𝑏𝑙𝑒

-Son tan grandes... -

-Suaves...-

-Apretables...-

Italia y Alemania estaban disfrutando de apretar, acariciar y empujar levemente los pectorales del ruso, ciertamente estaba muy formado y sus pectorales eran lo suficientemente duros para acostarse entre ellos y dormirse ahí.

El ruso había vuelto de arreglar la camioneta que usaban de transporte, fue algo tardado y termino sucio lleno se aceite y algo sudado además de que su camisa de tirantes se le marco sobre su cuerpo dejando más notable sus pectorales bien marcados por su entrenamiento ruso y su infancia donde era obligado a ejercitar.

A pesar de que el siempre vio su infancia que le dejo un cuerpo escultural muy bueno pero que intimidaba a muchos y lo hacía sentir como algo muy intimidante, como un monstruo, pero realmente estaba cambiando de opinión al ver como sus parejas le daban cariño por acciones y palabras, exactamente como ahora mismo.

-¿Sabes que eres realmente atractivo...?- susurra Italia entre sus dos pectorales viéndolo desde ese pequeño valle que usa como hogar.

Mientras Alemania estaba atrás del italiano estirándose lo más posible para sentir sus costados musculosos y su espalda fuerte y bien marcada, después pasar sus manos a su vientre donde podía sentir su tableta de chocolate.

-Oigan... no quieren ir a comer ya? - pregunta el ruso algo nervioso sintiendo las manos de sus parejas adorar su ejercitado y deseoso cuerpo.

-Con esa tableta tengo suficiente para comer toda la vida- susurra sonriendo el alemán.

-Me pregunto si de aquí sale leche... si es así sería lo único que tomaría el resto de mi vida- aprieta levemente el pezón lo que saca un gran sonrojo del mismo.

Algo sensible agarra a ambos europeos, uno lo sostiene a la altura de su cadera y el otro sobre su hombro.

-Les dije que hay un límite... desobedecieron y ahora les toca castigo a los dos- los alza asustándolos levemente por el peligro de que los deje caer, algo nerviosos se remueven en los fuertes brazos para ir en dirección a la habitación donde los tres dormían.

- ¡ESPERA! Vas a ensuciar las sabanas y las acabo de lavar! - replica el alemán responsable.

-No será lo único que se ensuciará después de esto- patea la puerta y avienta a ambos contra la cama para luego cerrar con seguro la puerta.

Acalorado se quita su camisa aventándola en el suelo sin importarle mucho donde quede.

-Es hora de que yo me divierta...-