Trust Me [◇TaeJin/JinTae◇]

~ 05 ~

Jungkook volvió en sí varios minutos después, cuando una mujer de ambo blanco y sonrisa amable le explicaba que le colocaría un calmante.

—¿Puedes entenderme?, ¿Muchacho?

—S-sí... ¿qué cosa? —murmuró con duda.

—Es un calmante. Lo añadiré aquí —le mostró el suero. Jungkook solo entonces comprendió que tenía una aguja en el brazo que conectaba a un recipiente plástico transparente colgado en un tubo metálico delgado y alto. Le estaban suministrando algún líquido incoloro que goteaba a ritmo constante.

La mujer hizo algunas anotaciones en un cuaderno, a pocos metros de la camilla donde Jungkook estaba sentado.

—¿Podrías decirme tu nombre?

Jungkook miraba el lugar con atención. Una sala médica. Un hospital, probablemente. No había nadie más con él en ese pequeño ambiente que tenía camilla y unas cortinas extendidas. Alrededor podía escuchar mucho movimiento.

—Jovencito —insistió la mujer, mirándolo—. Tu nombre.

—Jungkook —contestó—. Jeon Jungkook.

La enfermera le pidió un par de datos extra y luego se marchó diciéndole que podría irse cuando el suero se hubiese terminado.

Jungkook estaba ahora solo en una camilla con aroma a desinfectante y un montón de preguntas. Notó que su mochila estaba sobre el final de la cama. ¿Cómo había logrado recuperarla?, tenía sus pertenencias de la universidad y algunas más importantes como llave y teléfono.

Y Taehyung. ¿Dónde estaba Taehyung?

De pronto comenzó a angustiarse. Tae también estaba en el tren, junto con los demás heridos. Luego recordó a Seokjin y a Namjoon, pensando que quizás podían estar muertos.

No tenía manera de conectar con el mundo exterior, sólo oía pasos apresurados en cercanía y muchos murmullos. Podía suponer que personal del hospital estaba trabajando de manera atareada, lo que significaba que el accidente había sido bastante trágico.

Después de que se terminó su suero, otra enfermera se lo quitó y le dijo que podía irse. Jungkook notó la urgencia en la petición de la mujer, puesto que seguramente necesitaban todo el espacio y los recursos que fuesen posibles. Tan pronto como salió de la guardia médica, pudo comprobarlo. El hospital estaba desbordado.

Jungkook se detuvo en la sala de espera, en un rincón, y revisó su mochila. Todo estaba allí, era un milagro no haberla perdido dentro del tren accidentado. Su teléfono quedó con la pantalla estrellada, pero aún funcionaba. Aprovechó el saldo que tenía y lo primero que hizo fue llamar a su madre. Para su sorpresa, ya tenía seis llamadas perdidas de ella.

Su madre lloró al escuchar su voz, y Jungkook decidió ocultarle que había estado en el accidente. En cambio, improvisó una versión en donde olvidaba su móvil silenciado mientras estudiaba en la biblioteca. Con suerte, ella nunca lo sabría.