Capítulo 19.

104 14 0
                                    


Joel:

¿Qué hace él aquí?

- Hola. - sonríe.

- Hola. - respondo. - Si buscas a Estrella se fue hace una hora, tenía cita con el doctor.

- De hecho, vengo a buscarte a ti... - sonríe Ángel.

- ¿A mi? ¿Por qué? - respondo mientras camino.

- Quiero hablar contigo sobre un tema. - dice apenado.

- ¿Es muy urgente? - él asiente.

¡Ugh! ¿Por qué soy tan fácil de convencer?

Caminamos de camino a un parque para poder conversar con más tranquilidad.

- ¿Y bien? ¿Qué es lo que querías decirme? - le pregunto.

- Verás... Lo que te dije ayer fue...

- ¿Fue mentira? - me adelanto.

- No, no lo es... Él se llama Danny, tiene un año más que yo.

- ¿Por qué terminaron? - sabía que no debía preguntar pero tenía curiosidad, no conocía a otra perspna que comprendiera lo que yo sentía.

- ¿En serio quieres saberlo? - me mira fijamente.

- Si quieres contarmelo normal, no quiero pecar de indiscreto. - respondo, él sonríe.

- Pues... Lo conocí en mi campamento de verano... No conocía a nadie y se ofreció a enseñarme el lugar.

- ¿Cómo te diste cuenta que te gustaba?

- Pues, al inico no quería creerlo, luchaba contra este sentimiento... No sé como explicarlo pero sentí lo mismo que sentí por mis exes... Que si eran mujeres.

- Continúa... - le digo al notar que solo me observaba.

- Nos volvimos enamorados cuando nos quedamos encerrados en una de las cabañas, yo fui quien le declaró mis sentimientos y al parecer era correspondido. - ríe. - dos meses después, sentí que no era como al inicio... Sentía su ausencia y él siempre estaba ocupado cuando quería verlo.

- ¿No lo veías entonces? - eso llamó mi atención.

- Él queria verme cuando yo no podía, estoy en un equipo de fútbol y tengo que asistir a los entrenamientos pero no me comprendía pero yo si tenia que comprender su ausencia. - suelta una carcajada.

- ¡Wow! Creo que ya sé a donde va todo esto... - suspiro.

- Un día no lo soporté más y decidí afrontar la situación, terminé con él.

- Siento lo que pasaste. - dije poniendo mi mano en su hombro.

- ¿Lo sientes? - asiento. - Yo no... Sentí que me liberé de una gran carga... Como te digo, ya no lo soportaba.

- ¿En serio? - lo miro sorprendido.

- Era muy inmaduro para su edad... En fin. - suspira. - de lo que te quería hablar es lo siguiente.

- Te escucho.

- Todo lo que te dije ayer fue verdad, pero es una verdad que quiero mantener en discreción.

- Pensé que era una verdad abierta, que todos lo sabían menos yo.

-No, por alguna razón te la conté a ti... Me inspiras confianza, Joel. - sonríe.

- Gracias por la confianza. - digo.

- No sé si te caigo bien o mal, pero quiero que seas mi amigo. - me mira.

- No soy muy sociable y casi siempre tengo el mismo gesto, tal vez sea por eso que no sabes si me caes o no. - sonrío.

- Tengo que irme. - dice mirando el reloj que lleva en su muñeca. - Tengo entrenamiento dentro de una hora.

Me despido de él y regreso a casa. No sé si mi curiosidad ayudó a aclarar mi mente o me confundió más.

¿Habré actuado cómo Danny? ¿Será por eso que Christopher no contesta mis llamadas? ¿Pensará que soy muy inmaduro?

No debí actuar como un niño, él me necesitaba, estaba pasando por un momento difícil... Yo, yo debí pensar mejor las cosas.

Me dirigí a casa y a duras penas almorcé, luego me encerré en mi habitación y empecé a escuchar música, otra vez, andaba deprimido.

Christopher:

- Hola Jenny. - digo entrando al cuarto.

- Hola... ¿Cómo te fue? - besa mi mejilla.

- Pues... No fue un buen día. - suspiro mostrandole lo que obtuve hoy.

- No te desanimes, mañana te irá mejor. - trata de animarme. Sus intenciones son buenas pero no lo logra. - ¡Ya sé! ¡Vamos a comer!... Yo invito.

- Comer levantará mi ánimo. - sonrío.

Fuimos a un restaurante muy cerca de donde vivimos.

- ¿Ya tienes listo lo que vas a llevar? - pregunta repentinamente.

- No sabía que tengo que acomodar mi equipaje. - digo con la boca llena de papas.

- ¿Sabes cuánto tiempo estaremos en México? - pregunta.

- Solo necesito encontrarlo y hablar con él. - suspiro.

- Espero no demoremos mucho en encontrarlo para que no pierdas ni un minuto. - sonríe.

- Nunca me cansaré de agradecerte por todo lo que estás haciendo por mi. - tomo su mano.

- ¡Hey! Mira... - dice sacando de su bolso los ticket del vuelo. - Salimos mañana.

- Estoy ansioso... Ansioso por verlo, por saber de él. - sonrío.

- Anda recordando algo que te haya dicho y que nos pueda ayudar a ubicarlo.... Sino, nos tomará mucho tiempo.

- Tienes razón, en una oportunidad me habló de la escuela en la que estudia pero no recuerdo el nombre. - me pongo pensativo.

- Busquemos en internet las escuelas que se encuentran en la capital, tal vez así lo recuerdes... - sugiere.

- Esa es una buena idea... - la apoyo.

*******************

Estaba acomodando en mi mochila algunas prendas para el viaje... La emoción se apoderaba de mi y no podía dejar de sonreir... Por fin te volveré a ver mi amor, todo este tiempo que estuve alejado de ti ha hecho que este amor que siento por ti incremente.

No he dejado de pensar en ti ni un solo día, no puedo olvidarte es más, no intento borrarte de mi vida... ¡No renunciaré a ti!

Espérame Joel...

Antes de dormir llamé a mi mamá como lo solía hacer cada noche.

Quería escucharla antes de dormir, ella me da fuerzas para estar en un país completamente nuevo para mi pero felizmente no estoy solo, tengo a Jenny... Ella es como una hermana para mi.

Joel:

Es mucho por hoy.

Me levanto del escritorio, me la pase toda la tarde ahí, desearía que todo este no me afecte tanto, volverme más fuerte, más maduro... Quiero dejar de ser un muchacho al que le afecta todo pero no lo demuestra.

Hoy escribí la mitad de una canción, al menos de algo sirve estos estupidos sentimientos de confusión.

Miro mi teléfono y me quedo observando una foto que me tomé con Christopher cuando era feliz, en Ecuador, no la he borrado, solo la he tenido en la papelera y de vez en cuando la observo.

Era tan feliz y no lo sabía...

El hilo rojo // JOCHRIS - Virgato. Where stories live. Discover now