8. Intrusos en el almuerzo

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La señora del almuerzo me dio lo que sea que habían cocinado ese día. Moría de hambre, así que estaba dispuesta a comer lo que sea. Cogí una de las pequeñas botellas de agua. ¿Por qué no había una botella de tamaño normal? Ese poco de agua no iba a calmar la sed de nadie.

Me senté en mi mesa regular, a esta hora del almuerzo no había muchas personas, por lo que nadie nunca se sentaba conmigo. Era un momento de paz y tranquilidad en mi día.

―Ho-hola ―dijo Scott mientras se sentaba al frente mío, Stiles se puso a mi lado.

¿Qué diablos está pasando aquí?

―Esta no es su mesa ―dije cortante.

―Lo sabemos, solo queríamos hablar sobre lo que escuchaste en el salón de química ―dijo Stiles.

―No escuché nada, estaba sentada en mi carpeta sola.

―Acabas de mentir ―dijo Scott, aunque parecía sorprendido al decir eso―. Estás mintiendo, sí escuchaste.

Suspiré, tal vez si contaba la verdad, se irían pronto. ―Sí, escuché, pero probablemente entendí mal. No es para tanto. No es como si pensara que fueras capaz de atacar a alguien. Apenas y puedes mantenerte en pie. Además, paras todo el día con este de acá ―dije señalando a Stiles―, si hubiese alguien a quien querrías atacar, sería a él.

― ¡Oye! ―gritó Stiles―. Bueno, puede que tengas razón.

Rodé los ojos. ― ¿Pueden irse ahora?

― ¿Irse a dónde? ―preguntó Lydia mientras se sentaba al lado de Scott.

Stiles se quedó sin habla, yo también me quedé sin habla. ¿Qué hacía Lydia aquí? Hemos pasado varios años fingiendo no conocernos, como para que justo ahora se le ocurra sentarse en esta mesa.

―A la biblioteca, íbamos a ir luego a la biblioteca ―dijo Scott. ¿Por qué estaba mintiendo?

―Sí, biblioteca ―dijo Stiles.

Lydia posó su mirada en mí y yo me encogí de hombros. Cogí la botella de agua y tomé un largo sorbo. Prácticamente había acabado toda la estúpida botella.

De pronto, la mesa se empezó a llenar. Danny se sentó a mi lado, un chico del equipo de lacrosse se sentó en la cabecera de la mesa. Allison apareció y se sentó al lado de Scott, en frente de Stiles. Y más gente empezó a llenar la mesa.

―Levántate ―le dijo Jackson al chico del equipo de lacrosse cuando apareció.

― ¿Por qué no le pides a Danny que se levante?

―Porque yo no le miro el trasero a su novia ―respondió Danny, no pude evitar reírme ante ese comentario.

Lydia nos sonrió a mí y a Danny, mientras que el chico del equipo de lacrosse se levantaba y le cedía el lugar a Jackson.

―Oí decir que el ataque fue de un animal ―dijo Danny. Yo cogí el pan que estaba sobre la bandeja de Lydia, sabía que ella no lo comería. No tengo idea de porqué estaba ahí en primer lugar―, quizá un puma ―terminó de decir Danny.

―Yo oí decir que era un león de montaña ―comentó Jackson.

Un puma es un león de montaña.

Enamorándome de mi peor enemigo | EMPE #1 | Stiles StilinskiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora