Sufrimiento

1.5K 75 87
                                    

"Es hora de pagar por tus crímenes, pequeña

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

"Es hora de pagar por tus crímenes, pequeña. Espero ser recompensado por todo lo que me has hecho, o si no te haré sentir el mismo sufrimiento que me hiciste pasar. Créeme que soy capaz de hacerlo, no tendré compasión de tu carita hermosa"

–Michael

Acabas de encontrar esa nota escrita en el mueble al lado de tu cama unas horas después de que la familia de tu novio se haya marchado de la casa, ya que se habían estado quedando unos días aquí con ustedes. Unos días donde estuviste provocando a tu pareja hasta más no poder, poniéndote faldas cortas, usando blusas con un escote pronunciado, tocando su entrepierna por debajo de la mesa mientras comían. Había sido un sufrimiento para él aguantar todo ese tiempo sin tocarte, pues no querían que cualquier integrante de la familia Jackson los encontrara follando o escucharan sus escandalosos gemidos.

En cualquier momento Michael iría a la habitación a darte tu merecido, pero no sabías como lo haría, ni cuando. De la nada, él cruzó la puerta del cuarto, mirándote con esos ojos tan penetrantes. Él cerró la puerta a sus espaldas, mordiéndose el labio al ver la posición en la que estabas tirada en la cama, pues como llevabas puesta una faldita dejabas a la vista una parte de tus bragas.

Sus ojos de pronto comenzaron a hacerte señas, señalando el bulto que notoriamente estaba creciendo en su entrepierna. Era obvio lo que él quería, y era aún más obvio que tú también deseabas lo mismo.
...

Bien, ahora te encontrabas acostada entre sus piernas, dándole placer a su miembro desnudo. La ropa había sido lanzada en distintas direcciones de la habitación, hasta creías que la ropa interior de tu novio había caído justo en la fotografía de tu madre, o en pocas palabras, la suegra de Michael; ellos nunca se han llevado bien. Puedes ver como él está sonriendo por eso, era un todo un malcriado.

—Eso es —habló viendo como hacías un buen trabajo con su miembro—, chúpalo bien.

Él sonreía casi en un tono de victoria, tantos días sin haber intimado tal vez le subieron el ánimo. Seguiste lamiéndolo con ganas, en verdad habías extrañado tener ese contacto físico.

Su respiración agitada inundó la habitación, cada vez más deprisa, mientras él rogaba que por NADA en el mundo te detuvieras. Michael estaba desesperado por llegar a su orgasmo, quería que lo dieras todo. En un momento tu boca ya no pudo moverse más rápido, así que lo sacaste de tu boca y envolviste tu mano en su extremidad, bombeando lo más rápido posible, mirando como él se destrozaba entre gemidos fuertes, observando como apretaba las sábanas con sus grandes manos, y deseando grabar esa escena para tenerla guardada para ti solita.

"Ya casi" te avisaba entre jadeos. Esta es la parte donde normalmente te preparabas para el chorro caliente de semen que estaba a punto de salir por los aires, pero te traía la curiosidad saber ¿qué pasaría si justo en este momento pararas? Más que nada querías ver la reacción de tu novio, pues había estado conteniéndose porque su familia se había estado quedando en su casa junto con ustedes.

"Más rápido" pedía sin dejar de gemir. En su rostro podías ver como él se hallaba en el mismo cielo. Tú le hiciste caso, aumentando la velocidad en tu mano, mientras seguías pensando si sería buena idea arruinar su orgasmo. "Sólo será esta vez" pensaste en tu mente. Los suspiros de él se volvieron cada vez más fuertes, al igual que sus gemidos. "Joder... voy a correrme, nena". Tu mano que se deslizaba de forma apresurada alrededor de su miembro por fin dio un alto, haciendo que el moreno se preguntara por qué demonios habías hecho tal cosa.

"Mierda, _____" maldijo entre dientes, se le veía realmente molesto. Tu mano abandonó su lugar, y él te miró de la manera más seria que puede haber. "¿Por qué hiciste eso?" bufó enojado cubriéndose el rostro. Tú trataste de enmendar tu error, acercaste tu mano a su miembro y él se mostró indiferente. "No lo toques" soltó. "Si lo tocas me voy a correr" explicó expresando que si llegas a tentar su miembro va a tener un orgasmo, pero sin placer.

Te levantaste de la cama, pensando que ya no había nada que pudieras hacer por él, dando pasos hacia la puerta. Michael sorpresivamente envolvió sus brazos alrededor de ti, impidiendo que siguieras avanzando. "Oh, ni pienses que te me vas a escapar, chiquita" refunfuñó contra tu cuello. Te tomó por los hombros, haciendo que te sentaras al borde de la cama, tenías su miembro justo enfrente de ti, estaba hinchado y tenía pre-semen goteando. "Ahora vas a esperar a que este orgasmo se esfume y tendrás que empezar a chuparme la polla otra vez ¿entendiste, pequeña malcriada?".

"Sí, daddy" mordiste tus labios, pues amabas cuando él se ponía en ese modo de "sugar daddy" dándote órdenes de esa forma tan sexy. Él se sonrojó al oír cómo lo habías llamado, pero no dejó de estar molesto.

Los minutos pasaron y parecía que a él no se le iba la molestia, pues seguía mirándote con esos ojos. Michael nunca lo va a aceptar, pero piensas que él sería un buen "sugar daddy", claro, sólo para ti. Y cada vez que te portaras mal recibir un castigo por parte de él. No sabías si ese pensamiento era sólo un deseo o ya se estaba convirtiendo en una fantasía sexual.

—Abre tu boquita, nena —. Te ordenó tomando su miembro y bombeando un poco, al parecer su orgasmo se había ido.

Tú abriste tu boca muy obediente, esperando a ver que es lo que él te haría. Michael metió uno de sus largos dedos en tu boca —siendo más específicos, el dedo índice—, sacando y metiendo, viendo como tu saliva se adhería a su dedo. Cerraste tus ojos y comenzaste a chupar su dedo imaginando que era su grande polla. Tenías que admitirlo, ahora tu también estabas necesitada y desesperada.

Jackson se mordió los labios cuando tú lo tomaste de su muñeca para profundizar más su dedo dentro de tu boca, él empezaba a excitarse. Movías tu lengua en círculos alrededor de su dedo, haciendo notorio lo que querías, tenerlo en tu boca.

—Vamos a ver si puedes con el grande —. Dijo sacando su dedo y acercando su miembro a tu boca.

Cuando por fin lo tuviste dentro comenzaste a rodar tu lengua alrededor de su glande, chupando la punta, tan sólo la punta. Hasta que Michael metió un poco más de su miembro, ahora era la mitad. Trataste de no atrangantarte cuando lo sentiste tocar tu campanilla. Era realmente grande. Tus ojos se cristalizaron.

—Creo que no puedes con uno tan grande, pequeña —rio al ver como intentabas no atragantarte—. Tu boquita no puede resistirlo.

Él estaba a punto de retirar su miembro, hasta que lo tomaste de la base e introduciste unos centímetros más en tu boca. Michael estaba sorprendido, nunca había estado tan adentro y eso le preocupaba. No importaba que tan molesto estuviere, ante todo siempre estaba primero tu seguridad.

—Sí puedo, daddy —. Le hiciste saber cuando lo sacaste de tu boca.

El tono rojizo que tomó su rostro lo delató, se había sonrojado por segunda ocasión, a veces era algo tímido con los apodos; él sonrió tenuemente. Era un castigo tortuoso tenerlo en tu boca mientras sentías tu centro mojarse.
...

Chicas, lo siento por haber usado algunos párrafos que escribí en el apartado anterior, al igual que lamento si este imaginas no les gustó mucho. No he tenido ganas de escribir estos días, pero no quería dejarlas tanto tiempo sin actualización. Discúlpenme por todo.
...

Tengo una sorpresa para el siguiente imaginas...

Imaginas: Sueña Con Michael Jackson [#2]Where stories live. Discover now