Soy el hijo del tirano.

Capítulo 1 Oscuridad.

Voz masculina-Que donde estoy, esta todo oscuro no puedo ver nada, no siento nada.

Estaba muy alterado porque yo un adolecente de 25 años acababa de morir no tenía recuerdo de lo que había pasado, fue tan rápido, estaba muy nervioso y pensar que era alguien el cual había llevado una vida ordinaria y siendo feliz con su familia estaba tan triste de pensar lo que había pasado, pero no importaba lo que pasaba, no importa lo que hiciera no había nada era como si mis propios pensamientos eran los que estaban, no había nada más.

Después de un tiempo me calme y empecé a pensar lo que sucediendo , trate de ver qué pasaba intente mover mis brazos pero no sentía nada, intente mover mis piernas pero no había nada, intente abrir mis ojos pero tampoco había nada, es como si nada de eso estuviera ahí, de la desesperación gritar con todo, pero nada, sentí como si estuviera flotando en la nada, no sentía frio, ni calor y era como si mi voz era mis propios pensamiento ahí me di cuenta de que tampoco podía hablar, ni oír nada.

Después de mucho tiempo tuve que aceptarlo estaba desesperado por lo que estaba viviendo mi pensamiento era que yo habría sufrido un accidente y que estaba en coma pero sin importar lo que hiciera no había nada que me pudiera sacar en la situación que estaba.

Había pasado un buen tiempo desde que había recobrado la razón indagaba en mis pensamientos y recuerdos porque era lo único que podía hacer los recuerdos de mi vida y de mi querida familia la cual amaba mucho, yo era el más querido de la familia, mis abuelos, mi madre, fueron con los que había compartido más.

Mis tíos y mis primos siempre me lleven bien con ellos salíamos a muchas actividades juntos, mi familia fue muy unida y había amor entre todos nosotros siempre fui el más querido por todos, gracias a mi familia, mi madre y yo pudimos superar la dura perdida que tuvimos.

De pensar eso me daban ganas de llorar pero no podía, solo tenía pensamientos tristes, no había forma de llorar.

Había pasado mucho, me había percatado de que no podía sentir el paso del tiempo era como si solo avanzara no sabía si habían pasado minutos, horas, días o meses, tampoco sentí a sueño era como si no me pudiera sentir cansado.

Ya no podía resistirlo estaba al límite, estaba tan desesperado yo no podía más, quería salir de aquí.

Voz masculina- ¡Quiero salir de este lugar!

Voz femenina-¡Quiero irme de aquí!

Me quede mudo ante lo que había pasado pero después reaccione

Voz masculina- ¡Que!

Voz femenina-¡He!

Voz masculina y Voz femenina- ¿¡Quieres eres!?

Después de una discusión al final me calme, la voz que había escuchado definitivamente era la de una mujer estaba calmado pero en el fondo estaba feliz porque un sentimiento indescriptible que tenía me hacía sentir bien al saber que no estaba solo.

Voz masculina- oye sigues ahí

Voz femenina-sí, estaba empezando a preguntarme si ya te habías olvidado de mi

Voz masculina-tu pensaste eso, desde que apareciste al menos no he estado solo, estaba tan solo que ya había dejado de pensar con claridad.

Voz femenina-yo también, estaba tan sola que pensé que nunca podría salir de este lugar al menos tengo a alguien que me acompañe

Después de bastante tiempo nosotros dos nos conocimos solo por nuestras voces pero después estuvimos de acuerdo en que nosotros nos comunicábamos por medio de nuestros pensamientos.

Yo le conté mi vida la cual la había recordado y pensado muchas desde que había llegado, entonces ella me conto la suya. Ella vivía feliz con sus padres y el resto de su familia la cual tenían una muy buena relación, pero a la edad de 18 años ella enfermo y estuvo en tratamiento por dos años, estuvo luchando contra la enfermedad, lastimosamente a la edad de 20 años falleció dejando atrás a su familia, era diferente a mi accidente, pero yo también había dejado atrás a mi familia.

Estuvimos mucho tiempo juntos no sabíamos cuánto tiempo había pasado solo éramos nosotros dos no sabíamos dónde estábamos pero solo pensábamos que podíamos confiar el uno al otro.

Pero una vez sucedió algo.

Voz masculina-oye sientes eso

Voz femenina-que, a que te refieres

Voz masculina-acaso no sientes nada extraño

Voz femenina-ahora que lo dices, si, lo siento

Era la primera vez que sentía algo desde que había llegado y parece que ella también lo sentía, la sensación que sentía era calidad y reconfortante no había sentido algo así, pensé que como había pasado mucho tiempo aquí había olvidado muchas cosas, pero esta sensación era muy calidad y agradable, de repente oí murmullos y una voz muy baja que decía palabras muy reconfortantes y llenas de amor.

Voz masculina-oye que dijiste

Voz femenina-a que te refieres yo no dije nada

Voz masculina-oíste algo

Voz femenina-sí, pero creí que fuste tú.

Voz masculina-yo tampoco dije nada

Voz femenina-oí algo pero fue muy débil

Los dos nos quedamos muy atónitos por lo sucedido pero nos encantó lo que había sucedido, nunca había oído algo que no fuera mis pensamientos o los de ella. Lo mismo sucedió un par de veces más.

Pero llego un momento donde habíamos pasado mucho tiempo y empezaron a suceder muchas cosas extrañas pero todo empezó a derrumbarse.

Voz masculina-oye, oye donde estas donde estas

Voz femenina-estoy aquí donde estas tu

Voz masculina-no, no, porque te escuchas muy lejos

Voz femenina-pero tú también te escuchas muy lejos

Voz masculina-no puede ser cada vez te escuchas más lejos, algo me está sacando de aquí.

Voz femenina-no, no a dónde vas, no quiero que te vayas

Voz masculina-yo tampoco me quiero ir, no quiero dejarte

Voz femenina-no te vayas

Y así poco a poco me fui alejando, la voz se dejó de oír estaba inmerso por lo que sucedió, ella ya no estaba.

De repente estaba solo y podía sentir yo volvía a sentir, yo podía volver a sentir, sentí frio, tengo frio me dio frio, pero porque tengo, porque tengo muchas ganas de:

Voz masculina-¡buaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!