Capítulo 19 Despedida

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Nadia— ¿¡Donde están las sirvientas!?

Alexander—Les dije que se retiraran

Nadia— ¿Qué? — ¿Por qué hiciste eso?

Alexander—Para que estemos los dos solos sin que nos interrumpan

De repente el emperador agarro a Nadia y se puso de pie con Nadia en sus brazos

Nadia— ¡Oye!

Acto seguido Nadia estaba flotando en los brazos del emperador, una toalla que Alexander había dejado en la puerta, empezó a flotar y se dirigía hacia ellos, la toalla se envolvió en el cuerpo de Nadia

Después otra toalla que había traído, también floto y se enrollo en la cintura de Alexander

Alexander—Vamos

Nadia— ¿A dónde?

Alexander—A la habitación

Nadia— ¿Qué?

Alexander—Dijiste de que aquí no, así estaremos más cómodos en la cama

Nadia—Pero

Alexander—Nadia, mi amor

El emperador miro a Nadia froto su mejilla junto con su cabello

Alexander—Mañana me voy y no te veré en algunos meses, ya que no estaré tu trabajo aumentara en mi ausencia — Pasare esta noche conmigo

Nadia—De acuerdo

Alexander con Nadia entre los brazos salió de la habitación y camino por los pasillos, los cuales estaban completamente vacíos

"El emperador había ordenado que nos dejaran solos, también debió de planear esto todo la semana"

Al llegar a la habitación del emperador, la puerta se abrió y al entrar se cerró

En la habitación Alexander puso a Nadia en el suelo

Ella se sentó en una silla a la par de la ventana y miro hacia afuera

Por la ventana no se miraba más que la oscuridad de la noche y la luz de las tenues estrellas

Nadia escucho un ruido y al voltear, vio a Alexander tomando agua

"......"

Al mirarlo detenidamente se quedó sin palabras

Su cuerpo era enorme y lleno de músculos tonificados, era la primera vez que lo miraba detenidamente

Alexander se mantuvo erguido y miro a Nadia con una mirada indescriptible. Sus miradas se cruzaron pero Nadia rápidamente aparto la mirada sin darse cuenta

Alexander— ¿Por qué estas evitando mis ojos?

Nadia—"......"

Alexander se acercó a Nadia

Nadia—"......"

Y luego toco su cabello

Alexander—Esta mojado

Originalmente Nadia debería haberlo secado al salir de las aguas termales

Nadia—Ah, lo secare

Tan pronto como Nadia estuvo a punto de levantarse de la silla, Alexander agarro del hombro a Nadia y la hizo sentarse de nuevo

Alexander—Lo secare

Nadia—Está bien

Alexander—Quiero hacerlo

Soy el hijo del tirano.Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin