Soy el hijo del tirano.

Capítulo 5 Ojos

Era un día como cualquiera, habían pasado varias semanas y pocos meses, Cecilia y yo pasaban la mayor parte nuestro tiempo oyendo lo que decían las personas que estaban a nuestro alrededor, nosotros solo éramos bebés y no había mucho que hacer, pero yo sabía que el conocimiento era poder y quería saber todo lo que pudiera lo más rápido posible

El lugar donde estamos es el palacio imperial, residencia personal del emperador el más grande y lujoso palacio del imperio, puede que hasta del continente.

El lugar donde nacimos es el imperio Acris, el único imperio en todo el continente, es el que posee la mayor extensión territorial, abarcando la zona norte y este del continente.

Pasábamos momentos juntos debes en cuando el emperador venía a visitarnos en sus tiempos libres para pasar tiempo con nosotros, la emperatriz era la que se encargaba de darnos leche y pasar tiempo con nosotros además también las sirvientas nos preparaban leche para alimentarnos.

Con el tiempo me entere del nombre que me dieron era Cecil Acris y el de mi hermana es Cecilia Acris, como todavía somos bebes el nombre todavía no estaba completo y cuando crezcamos nos darán nuestro nombre completo, solo me podía imaginar que sería muy largo

Nosotros dos seguíamos pasando el tiempo como éramos unos bebés era muy limitado lo que podíamos hacer, decidimos ver la forma de entrenar nuestro cuerpo para que se pudiera desarrollar lo más rápido posible

Pero un día.

Sirvienta 1-mira el príncipe y la princesa nos están viendo

Sirvienta 2-deberia de llamar al doctor

Sirvienta 1-porque lo dices

Sirvienta 2- bueno, ellos dos no lloran mucho, cuando nacieron lloraban mucho pero ahora no lloran debería de ver si algo está pasando

Cecil-(Rayos estamos en problemas)

Sirvienta 1-bueno cuando es su hora de comer, es como si ellos esperaran, además de que a veces en las noches los he encontrado despiertos unas pocas veces pero no han llorado, solo se vuelven a dormir

Sirvienta 2-Pero unos bebes tranquilos y calmados es algo raro pero lo bueno es que no causan problemas, así que.....

Jefa sirvienta-Que creen que están diciendo, será mejor cuiden sus palabras

Sirvienta 1 y sirvienta 2-lo sentimos mucho

Jefa sirvienta- los príncipes son nuestra responsabilidad y si algo les sucede nos echaran la culpa a todas nosotras

Jefa sirviente-llamen al doctor inmediatamente

Cecil-(Rayos)

Un hombre de edad media que ya conocía llego, era nuestro doctor personal, desde que nacimos fue asignado para revisarnos, parece que era un pediatra, no sabía si existía esa clase de profesión aquí en el imperio.

Nos revisaron completamente el doctor parecía tener mucho cuidado a la hora de revisarnos, recuerdo que en una de sus conversaciones decía que le parecía raro que a la hora de revisarnos le era fácil y que no llorábamos cuando nos revisaba

Doctor-todo está bien, no hay nada malo en ellos

Jefa sirvienta- si está seguro doctor

Doctor-claro que sí, sin embargo....

De repente pum

La puerta de la habitación se abrió, pude ver que la persona que había entrado era el emperador que se miraba que se había apresurado en venir