Escogeme a mi

Capítulo 86. Ayuda para Shoto

Volví a tocar la puerta varías veces, nunca recibía respuesta, los chicos me insistieron para que dejara a mi amigo y fuera a descansar, pero Shoto era muy especial y no podía dejarlo solo en estos momentos. Las chicas dijeron que trataron de enviarle algo de comer, sin embargo, él simplemente no abría la puerta y no daba respuesta. Salí de los dormitorios una vez que la mayoría se había ido, papá seguramente estaría dormido, así que podría usar mi quirk sin ningún problema y sin ningún castigo. Volé hacia el pequeño balcón de Shoto, tenía las cortinas cerradas por lo que no veía nada, pero afortunadamente, la ventana no tenía seguro; entre en silencio y susurrando su nombre.

-Shoto...?- pregunte por quinta vez acercándome al baño -Te traje la soba que te prometí-
-Qué haces aquí?- pregunto el de pelo bicolor saliendo del baño, al parecer había tomado una ducha, lo más vergonzoso, es que solo tenía una toalla en su cintura cubriendo hasta las rodillas -Y?-
-Los chicos me dijeron que estabas mal, así que pensé en traerte la soba fría que te había prometido, pero ya que estás ocupado, te dejo vestirte y hablamos mañana si quieres- me había girado y hablado tan rápido que ni eminem me ganaba en esta ocasión
-Qué?- cuestiono Shoto
-Yo...te traje esto, espero que lo disfrutes- le entregue la soba sin mirarlo
-Gracias-
-Entonces te dejo, si?- traté de salir de la habitación lo más pronto posible, pero el abrazo de Shoto me detuvo
-Podrías quedarte un poco más?-

Mis palabras simplemente no salían, miles de pensamientos daban vueltas en mi cabeza. Shoto se percató de la situación, tomó su ropa y entró al baño nuevamente, esta vez para cambiarse. Una vez afuera, comió la soba que le había llevado junto con algunas frituras y claro, algo de agua. Terminó de comer y ambos nos sentamos en silencio en la cama. Era extraño ver a Shoto preocupado por su padre, pero era lógico, no?

-Mañana iré a ver al viejo- soltó Shoto
-Irás al hospital?- lo mire sorprendida -Pero tenemos clases-
-Tú padre lo sabe y me lo permitió, llegaré después de las dos primeras clases- explico -Sin embargo, no sé si deba ir...-
-Shoto, es tu padre y quedó muy herido por esa pelea, deberías de ir y cuidarlo- mi amigo ni siquiera me miraba -Al menos deberías de ir para asegurarte que estará bien-
-Pero él...-
-Él trata de arreglar las cosas, no crees que sería un buen inicio? Incluso sus fanáticos lo defendieron cuando lo dieron por muerto- tome las manos temblorosas del chico -En verdad se ve que quiere cambiar, apóyalo y seguro que será una mejor persona-
-Después de tratarte cómo te trato, irías?-
-Lo dudaría cómo tu, pero sino fuera, me arrepentiría por el resto de mi vida- mire el balcón, había empezado a llover -Es tu decisión Shoto, no puedo obligarte a nada, pero si te puedo aconsejar y pase lo que pase, estaré aquí para ti, si?-
-Gracias- dijo nuevamente
-Me voy, bien? Empezó a llover y ya es muy tarde, deberíamos de dormir- me levante de la cama -Si vas al hospital, envíame un mensaje, esta bien?-

El chico se abalanzó sobre mi, dejándome acostada boca arriba en la cama, él estaba en mi abdomen acostado. Me pidió que no me fuera con una ternura que nunca había visto, asentí y nos acomodamos para dormir; claro que ninguno consiguió eso. Tratamos de escuchar música, leer, hablar, comer un poco más, pero nada funcionaba. Teníamos insomnio. La lluvia se intensificó, volviendo aún más imposible la idea de dormir, poco a poco llegó una tormenta.

-Recuerdas que cuando éramos niños nos escondíamos debajo de las mesas?- Shoto miró los relámpagos
-Cuándo queríamos escondernos de tu padre? O cuando queríamos comer galletas sin que nuestras madres se dieran cuenta?- reí
-Cuándo llovía así- aclaró
-Aun no entiendo como no nos encontraban si nuestro escondite siempre fue el mismo-
-Recuerdo que el mantel era tan largo que nos permitía escondernos perfectamente, sin que nadie nos viera- Shoto tenía una sonrisa nostálgica -Siempre llevábamos de todo para hacer un fuerte de almohadas-
-Cierto!- me senté -Llevábamos luces, almohadas, un montón de dulces y galletas...-
-Mantas, pequeños televisores, peluches- Shoto río, para después poner su mano en su quemadura y cambiar su actitud muy drásticamente -Son los recuerdos más preciados de mi infancia-
-Porqué no hacemos uno?-
-Qué?-
-Un fuerte! Tenemos almohadas, cobijas, podemos usar tu escritorio como base! Y aún nos queda algo de comida...- verifiqué en la bolsa -Y puedo hacer pequeñas luces! Ectoplasm me mostró!-
-En realidad deberíamos...- Shoto lo dudo pero luego sonrió -Esta bien, hagámoslo-

Rápidamente me dirigí a su escritorio, él soltó una pequeña risa y se acercó, ambos quitamos todos los cuadernos, libros, lapiceras, lámparas... y pusimos el escritorio limpio al centro de la habitación. Colocamos la manta y la aseguramos con los libros y cuadernos. Comenzamos a acomodar las almohadas y la pequeña manta que Shoto tenía como extra en las noches de frío; de igual forma, metimos las frituras y un pequeño televisor. Estábamos listos, solo faltaba la luz, que hice con pequeños destellos de fuego y los contenía dentro de una burbuja, así no se esparcirían. Sonreímos y nos dejamos caer en las almohadas.

-Si tu padre se entera de esto-
-Mi padre? El tuyo! "Porqué haces tantas cosas infantiles?!"- imite la voz de Endeavor -Pues porque somos infantiles señor, así que siéntese viejo lesbiano-
-Imitación perfecta- Shoto volvió a reír, no era muy común verlo de esa manera
-Tomémonos una foto!- saque mi celular
-Una foto?-
-Si! Como cuando éramos niños!-
-Pero...-
-Ven, acércate- sonreí junto con Shoto y saque la fotografía -Mira que linda!-
-Si...- dijo mirando esta -Podemos tomar otra? Pero si hacemos esto...podremos sacar más y mejores-
-Vaya...- mire que el chico se las había ingeniado para que el celular tomara un buen ángulo y no se cayera -Esta bien! Tomemos más fotos-

Seguimos con eso de las fotos, me alegraba tomarme fotos con mi amigo de la infancia, hace mucho que no lo hacíamos y era divertido y nostálgico verlo tan feliz; claro que Shoto sabía de eso más que yo, pues siempre sacaba los mejores ángulos para estas. Continuamos comiendo, mirando películas, aún no puedo creer que lo convenciera de hacer llamadas de broma telefónicas o molestar a Bakugo, por obvias razones solo lo escuchábamos sus gritos, cosa que nos hacía reír bastante. Pasaron las horas y solamente nos quedaban tres y media para dormir, por lo que decidimos volver a intentarlo. Shoto me abrazó, aún en el fuerte de almohadas. Era cálido. Poco a poco, fui cayendo dormida.

-Isabell- Shoto habló, aún no tenía sueño
-Si?- pregunte tratando de no dormir
-Porqué defiendes tanto al viejo? Acaso...?-
-No me gusta Shoto, se llama empatía y amabilidad- lo interrumpí antes de que dijera alguna tontería -Es lo mismo qué pasa cuando defendemos a cualquiera de la clase, solo que aún te falta olvidar y perdonar a tu padre-
-Olvidar y perdonar- repitió, saque mi rostro de su pecho para mirarlo
-Olvidar y perdonar toma tiempo, no apresures algo que tardará, si? Tu solo te darás cuenta de su cambio y lo perdonarás por que tu lo quieras- sonreí
-Entiendo....- lo escuché murmurar, sonrió y me dio un pequeño beso en la frente para luego acariciar mi cabeza -Ahora duerme, luces realmente agotada-
-Buenas noches Shoto- dije sonriendo y volví a acomodar mi cabeza -No me tomes fotos dormida-
-Lo prometo Isabell- sentí como había dejado su cabeza apoyada en la mía, no me soltaba y parecía no querer hacerlo -Buenas noches-

Hasta aquí este capítulo!!!!
Espero, como siempre, que les haya gustado!
Y la pregunta....
Quieres ir a clases?
O prefieren no ir?
Y en la hora triste.....
Shigaraki ama la lluvia porque es lo único que no puede desintegrar
Nos vemos!!
Y recuerden que son headcanons, no se me alteren!
Byeeee!!!