Los personajes de Tokyo Revengers no me pertenecen, le pertenecen a su respectivo autor, Wakui Ken.
Algo diferente y será el único femreader que me verán escribir
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Matsuno Chihiro. Edad: 15-27 años.
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Estaba caminando tranquilamente por los pasillos de su escuela cuando escucho que alguien le hablaba, había unas chicas con las cuales aveces solía hablar, así que se acercó.— ¿Que sucede?.— Detrás de ellas apareció Kazutora, la chica se sorprendió.
~¿Podemos hablar?.— La chica asintio y lo tomó del brazo para ir a un salón, así podrían hablar a solas, la chica se puso encima del pupitre teniendo a Kazutora delante de ella.— ¿Te teñiste el cabello?.— Acaricio las hebras de la fémina.
~Hmm si, mi hermano también se tiñio.— Kazutora la estrechó entre sus brazos, Chihiro le devolvió el abrazo. Hanemiya sentía que la chica podría desaparecer en cualquier momento.— ¿Te molesta algo?, No sueles venir a verme en horario de clases.
El chico suspiro y se separó un poco de ella, tomándola por la cintura, no quería perderla era lo más preciado que tenía.— Solo quería verte, no nos hemos visto en un tiempo.— A la chica le dió algo de ternura al escucharlo.
~No quiero que me dejes, sabes que te amo mucho, Chihiro casemonos cuando seamos adultos.— Eso sorprendió a la rubia la cual lo tomo del rostro y vio sus ojos llorosos.— ¿Quieres que nos casemos?.— Hanemiya asintio.
~Si cariño, quiero que nos casemos.— Iban a seguir hablando pero la puerta fue abierta por un pelirrojo quien era amigo de la chica.— Es mejor que corran antes que el presidente del consejo estudiantil venga.— Los dos se vieron para luego tomarse de las manos para salir corriendo.
Kazutora sonrió al verla, le gustaba estar con ella y sentir la calidez de tomar su mano, besarla y abrazarla pero pronto dejaría de verla, ya no estaría para cuidar de ella.
[...]
Estaba preocupada por su hermano ya que era demasiado tarde para que estuviera fuera iba a salir a buscarlo pero también le llamo a Kazutora pero tampoco contestaba. Así que con eso tenía que ir a buscarlos, pero escucho que se abrió la puerta así que corrió a ella.
Vio a su hermano y corrió a él, vio que tenía rastros de sangre pero el chico solo se aferró a ella y empezó a sollozar, estaba murmurando algo pero la chica no entendía.— ¿Chifuyu?, ¿Que sucede?.—
~El-el murió, Baji-san está muerto, Kazutora fue detenido.— Su mundo se empezó a caer, empezó a llorar pero solo se aferró a su hermano, tenía que saber lo que en realidad paso.
[...]
Al día siguiente fue a ver a la madre de Keisuke, iría después a ver a Kazutora pero tenía que ver a la madre de quién fue su mejor amigo y mejor amigo de su hermano, tocó la puerta y ahí la vio, tenía ojeras y los ojos llorosos, solo la abrazo y dejo que se desahogara.
~Yo solo quería que no se metíera en peleas, era un buen muchacho.— La chica no aguanto más y rompió en llanto al escuchar a la señora, la mayor la tomó del rostro y volvió a estrecharla entre sus brazos, sabía que quería a su hijo y eran buenos amigos.
Estaba esperando a que la dejarán pasar, estaba bastante nerviosa y no sabía del porque, quería abrazar a su pareja pero ahora no podría tendría que esperar a que lo dejaran salir de ese lugar.
Se sentó y ahí lo vio, se miraba desorientado y con una expresión de dolor en el rostro, se le estrujó el corazón de tan solo verlo ahí, puso su mano en el cristal y Kazutora hizo lo mismo, rompió en llanto al verla quería ser consolado por ella.
~Lo siento, no podremos casarnos pronto.— La chica se limpio las lágrimas y solo negó.— Estaré esperando por ti, lo sabes.— Sonrió aún con lágrimas en sus mejillas.— ¿Por qué sigues conmigo?, Ahora estoy metido aquí y no podré estar contigo para cuidarte.
~Porque yo te amo, vendré todos los días después de la escuela, vendre a verte hasta que salgas, no importa si hay una tormenta o está nevando, yo vendré a verte y no aceptaré un no por respuesta.— A Kazutora se le iluminaron los ojos al escucharla, sabía que era demasiado terca.— Te amo cariño, estaré aquí todos los días para poder verte.— Sin darse cuenta el tiempo había acabado y ya tenía que irse.
~Te amo Chihiro.— Se fue dándole una sonrisa, la chica solo empezó a llorar más y salió del lugar, quería correr a sus brazos.
[...]
Cumplió su palabra y lo visito todos los días sin falta, ahora mismo estaba en un hermoso vestido de color blanco, estaba esperando a que la llamarán para que pudiera pasar.
Al lado de ella estaba su madre y Chifuyu, su madre estaba con una sonrisa enorme en el rostro aunque no le agradaba demasiado que se casará con Kazutora pero aún así lo acepto, sus madrinas eran Hina y Yuzuha.— Estoy realmente nerviosa, quiero tomar vodka, ¿Alguien tiene?.— La chica recibió un apretón de manos por parte de su hermano.
~Tranquila, él está ahí esperando por ti, toma mi brazo que ya casi es tu entrada.— Y efectivamente en ese momento le hablaron, abrieron las inmensas puertas y Kazutora se encontraba en un traje de color negro con su cabello recogido.
Al verla sintió mariposas en el estómago, sus ojos se humedecieron al verla venir en ese hermoso vestido que fue hecho por Mitsuya al igual que el traje de Kazutora, la chica llevaba su tono natural de cabello, que era un azabache. La madre de la chica se acercó a él y le sonrió.— Por favor cuida de ella cómo haz hecho en estos años.— Solo asintio y tomo a la chica.
~Cuida de esta loca, te ama como no tienes idea.— Su cuñado se fue de ahí con una sonrisa, los dos se sonrieron y voltearon a ver a quien los casaría.— Estoy temblando.— Hablo el chico en voz baja.— Yo igual.
Era momento de decir sus votos, era el turno de Kazutora.— El amor no es una emoción, sino un impulso, una necesidad, mi necesidad de estar a tu lado.— Solo sonrió y ya era el turno de Chihiro.— Tú eres mi compañero de vida, mi otra mitad, sin ti no soy nada…—
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