Capítulo 12. ¿Democracia?

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Todavía quedaba un poco de vegetación que no nos dejaba ver con claridad Suréa.

Había oido hablar de ella. Era una ciudad super habitada, con muchísimas tiendas, rascacielos... Una metrópolis, vamos. Casi se podía decir que era como la segunda capital de Channep.

Al salir de la jungla al fin nos encontramos con Suréa... O lo que quedaba de ella.

¿Qué ha pasado aquí?- preguntó Raquel en un hilo de voz-.

Es como si hubieran bombardeado...- dije en el mismo tono de voz-.

Andamos hasta llegar a las ruinas. Teníamos que tener cuidado por no caernos, ya que muchos escombros había en el suelo.

¿Habrá heridos?- pregunté-.

Lo más seguro... O peor-.

Miramos al rededor. No quedaba nadie.

¿Ha sido Casandra?- pregunté temiendo la respuesta-.

No he visto bombas enterradas con los cultivos en Yierenna- bromeó Raquel-. Así que... Sí-.

Me estaba poniendo a sudar y la cabeza me empezaba a dar vueltas. Raquel se dio cuenta de que algo me pasaba y me ayudó a sentarme en un gran escombro.

¿Te encuentras bien, Daphne?- me preguntó ella-.

Si, si... Solo que estoy un poco... M-mareada- dije mientras notaba como la vista se me nublaba y volvía a ver sombras luminosas-.

A "tientas" intenté ponerme de pie, con ambos brazos extendidos por si tenía delante algo que no brillaba.

¿Seguro que estas bien?- me volvió a insistir. Esta vez tenía un deje de miedo en su voz-.

No del todo- le dije rendida, tenía que contarselo-. Verás Raquel, a veces me pasa que todo se vuelve oscuro pero veo... Sombras. Más bien auras. Brillan y todas son blancas, pero unas brillan más que otras... ¿Sábes a que se puede deber?-.

Si- me dijo ella. Aunque no le viera los rasgos de la cara noté que estaba seria-. Tu mágia es diferente a la mía y uno de tus poderes es ver el aura de las personas y las cosas. Contra más brille esa "sombra" más pura será el aura-.

Ah- le dije-.

Miré a mi alrededor. Todo estaba negro donde se suponía que deberían estar los edificios en ruinas. Miré a lo único que brillaba, Raquel. Puse su mano cerca suya y comparé nuestras sombras.

¿Porqué tu no brillas tanto?- le pregunté-.

Me falta valor- me dijo, pero no la entendí. No la entendí en su momento...-.

Volvimos a nuestro camino entre las ruinas. Raquel me llevaba ventaja puesto que yo tropezaba a menudo.

¿Sabes cómo se controla?- me preguntó-.

Eh... No- me dije entre risas. Me resultaba obvia la respuesta-.

Cierra los ojos fuerte y ábrelos. La misma técnica sirve para "activar"-.

Estube probando varias veces hasta que ya lo dominaba.

Después de unos interminables minutos de silencio hablé...

¿Porqué han destruido Suréa?- le pregunté esperando una muy buena respuesta-.

Soy telepática, no adivina- me dijo. Frunció el ceño y saltó- ¡Espera!-.

Chasqueó los dedos y desapareció. Empecé a buscarla pero no había manera. Busqué y busqué y la llamaba a gritos pero no respondía. Rendida me senté y esperé. Al cabo de unos minutos apareció, nunca mejor dicho, como por arte de mágia delante mía.

¡¿Dónde diantres estabas?!- le pregunté casi gritando-.

Es que se me ocurrió que podía ir atrás en el tiempo y ver lo que ha pasado aquí- me dijo ella con una sonrisa-.

Y a mi que me zurzan, ¿no?- le dije enojada-.

Perdón, pero la idea me vino tan de repente que ni siquiera pensé en decirte que iba a hacer...-.

Bueno... Te perdono si me dices que has visto- le dije ya más tranquila-.

Han bombardeado Suréa. Casandra ha venido y le ha preguntado a toda la ciudad si alguno sabía donde estabas- me dijo un poco seria-.

Vaya, vaya... Con que está preocupada por mí, ¿eh?- le dije con sarcasmo-.

Bueno, pues ha preguntado y todo el mundo ha empezado a hablar entre ellos cosas como: "¿La chica se ha escapado?, ¿porqué lo habrá hecho?" Casandra ha perdido la paciencia, se ha montado en el helicóptero en el que vino y minutos después... Ha p-pasado esto- me dijo volviéndose hacia las ruinas-.

No sé que entenderá esta mujer por democracia...- le dije en un suspiro-.

Miré el cielo e imaginé las bombas cayendo y la gente corriendo y gritando y...

Casandra nos espera con armas nucleares y de fuego. Con medio país de su parte. Todavía tienen frescas las palabras de Casandra: "Ignorad a la chica, como si fuera una más, y no volveréis a saber que es morir de hambre" pensé.

Nosotras tenemos algo que ellos no. Mágia- dijo Raquel muy segura de si misma. Me debió de leer la mente-.

Jajajaja, muy bueno Raquel- le dije- ¡Somos dos contra yo que sé cuantos guardias reales, medio país y la reina!-.

Estubo pensando un rato en un plan.

Bailarás- me sentenció-.

Pensaba que me querías mantener con vida- bromeé-.

Bailarás y todo el mundo se dará cuenta de quien eres-.

No se si eso va a funcionar...- le dije un poco nerviosa-.

Pero antes de eso necesitas saber muchas cosas que te tiene que contar una persona en especial- me dijo andando e indicándome que nos íbamos-.

¿Catherine?- le pregunté-.

Catherine-.

DAPHNE 2 [sin editar ni corregir]Onde histórias criam vida. Descubra agora