Promise [Pt. 02]

005

—¿Quieres quedarte acaso Park?.– Pregunto algo molesta Lisa al ver a Rosé caminar de nuevo hacia la Universidad.

Rosé levantó su mano mientras seguía caminando dandole la espalda, levantó el dedo índice e hizo movimientos de arriba hacia abajo en señal de "sí".

Lisa bufo fastidiada, sabía a dónde iría Rosé.

Se fue y decidió correr para alcanzar a Yeon.

Rosé iba a ir a la sala de profesores, claro que no se iría sin despedirse, se a propuesto enamorar a su hermosa ex-niñera.

Entro a la universidad y paso por los pasillos llegando a la sala de profesores que aún estaban tres profesores uno de ellos Jisoo que reía por algún chiste malo que dió el profesor Seokjin.

—Nos vemos mañana Kim, cuídate, saludas a Jinyoung de mi parte.– Dijo Jin para así retirarse con la profesora Lee dejando a Jisoo arreglar unas carpetas.

Rosé paso al lado de los profesores que sonrieron saludando.

Se recargo en el marco de la puerta, Kim estaba agachada así que Rosé tenía una de las mejores vistas que en su vida había tenido, nego mirando a otro lado, no iba a estar mirándole el trasero a su profe.

—Creo que se me olvidó despedirme– Hablo Rosé llamando en seguida la atención de Jisoo que se incorporó derecha mirándola.

— Adiós cuídate Rosé.– Se despidió Jisoo con intenciones de irse pero con Rosé obstruyendole el paso no saldría de ahí fácilmente.

—Oh vamos ¿Porqué es tan difícil?, Si tan comprometida estás, ¿Porqué no traes anillo?.– Pregunto algo apagada.– ¿Porqué te lo has quitado si estás comprometida?.

Jisoo se limito a mirar a otro lado, no era fácil de explicar, ni ella sabía la razón.

—Tengo que irme.– Respondió evitando aquellas preguntas.

—Tal vez esto sea demasiado rápido pero yo desde que tengo memoria, cuando te fuiste no volví a amar a nadie más, yo también pensé que era solamente un cariño fraternal pero no fue y no es así.– Decidió ser sincera ante la pelirroja.

Jisoo no sabía que contestar.

—Y no pido una respuesta pero si un poco de comprensión, ¿Recuerdas a Jimin? Me dijiste que algún día sería su novia y ahora lo soy pero ni yo se la razón por la cuál estoy con él.

Algo dentro de Jisoo se movió al saber que aquel pelicastaño es pareja de Rosé, sintió un poco de molestia.

—¿Jimin qué?.– Se atrevió a preguntar con algo de molestia en sus palabras.

—¿Qué?

—Jimin es tu pareja.– No pregunto, afirmó.

La Rubia asintió con cabeza agacha.

—No lo amo como te he llegado a amar a ti, y te lo puedo demostrar, si me dieras la oportunidad-

—Tienes una pareja y yo un prometido qu-

—Al cuál le estás faltando quitándote ese anillo.– Interrumpió Rosé levantando un poco la voz.

Rosé sentía el latir de su corazón en sus tímpanos. Rosé no quería sufrir más, no quería perder a la única persona que a amado y era verdad, Rosé ama a Jisoo pero tal vez había una posibilidad de que Jisoo igual la amase pero se negaba rotundamente a esa idea, no la podía amar, no quería por qué sabía que caería a la primera .

Respiro profundo y soltó. Miro a Rosé, se veía algo triste, apagada, camino con un poco de temor hacia ella y la tomo por ambas manos. Rosé la miro con ese pequeño destello en sus ojos, Jisoo se acercó aún más recargando su frente en la de su contraria con su mano derecha empezó a acariciar la mejilla de Rosé que ante el contacto cerro los ojos.

—Yo siempre te quise.–Soltó en un pequeño susurro audible.

Quería besarla pero no podía, Rosé acaricio la mejilla de la pelirroja con su mejilla sacándole una pequeña sonrisa melancólica a Jisoo.

—Entonces déjame hacerte sentir que te sigo amando, déjame demostrarlo.– Pidió casi rogando.

Jisoo no podía creer que le está siendo infiel a su prometido cuando al principio de la relación fue ella la que le dijo a Jinyoung que nunca le perdonaría una infidelidad.

Y se sentía aún más culpable siendo ella quien le estuviese siendo infiel con alguien mucho menor que ella pero sin duda es alguien que extrañaba, es alguien a la cuál por una "simple promesa" de niños está a punto de caer, no puede creer que con solo dos días bastaron para hacerla sentir de una manera extraña pero agradable.

Cuando con Jinyoung le bastaron 3 años, se quería separar rápido pero el agarre de Rosé a su cintura se lo obstruia, y así fue, Rosé se apega a ella chocando sus labios que al principio solo fue un toque al cual Jisoo no respondía.

Después Rosé empezó a mover sus labios con algo de timidez, la beso con suavidad, Jisoo jadeo quedando perpleja, al instante cerro sus ojos dejándose llevar, sentía un extraño hormigueo que recorría todo su cuerpo pero agradable, los labios de Rosé acariciaron los suyos era una sensación increíble.

Con ternura Rosé acariciaba los labios de Jisoo con los suyos, se fue separando dejando a la pelirroja débil, no sabía cómo sentirse ahora, se sentía culpable, se sentía bien, se sentía feliz, triste, enojada, muchas emociones le rondaban por su cabeza que no sabía cómo explicar cada sensación, no sabía que decir, necesitaba las palabras, sus ojos se cristalizaron y lo único que le salio fue una bofetada directa a la mejilla derecha de Rosé. Tapo su boca asombrada por lo que había hecho, la Rubia seguía con la cara volteada, cerro sus ojos y se Maldijo en voz baja.

— Maldición .– Fue lo único que salió de los labios de Jisoo para salir de ahí casi huyendo.

Dejo a Rosé con una mejilla adolorida y roja con el entrecejo fruncido, tal vez lo había arruinado un poco.

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Le pegó._.
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Jisoo llego algo fastidiada a la puerta de su casa, saco sus llaves y las incrustó para abrirla, entro sacando sus tacones en la puerta cambiandolo por pantuflas, dejo su bolso y portafolio en el perchero. Se acordó en seguida y saco su anillo de su bolsillo de saco, se lo colocó, no quería que Jinyoung se molestará o sospechara algo.

—¡Llegue!.– Exclamó desde la planta baja para subir a ver si Jinyoung ya había llegado.

Escucho pasos apresurados en la planta de arriba, frunció el entrecejo, ¿Jinyoung corriendo?, sonrió al pensar que tal vez se estaba escondiendo. Llegó a la habitación de ambos y giro la perilla sonriendo encontrándose con él algo agitado sobre la cama, al parecer con poca ropa cosa que ignoro Jisoo, él siempre quitaba la suficiente ropa para estar cómodo y luego cambiarse pero esta vez él estaba raro, se veía nervioso.

—¡Oh mi amor! Llegaste, que bueno, yo también acabo de llegar.– Dijo nervioso sonriendo.

—Ya ví.– Respondió entrando al baño para meterse a la ducha.

Jinyoung se extraño, ella siempre que llega lo besa pero esta vez no, ignoro eso rápido esperando que escuchará el agua caer de la regadera para así actuar.

Jisoo dejo caer el agua templada sobre su cuerpo relajando sus músculos. Estaba muy estresada.

No podía sacarse de la cabeza ese beso, no podía creer que por un instante se le olvidará que tenía novio, prometido.

Escucho la puerta de abajo se cerrada al parecer, se pregunto si el pelinegro había salido a comprar la comida, no le prestó atención y siguió con su ducha.

No sé imaginaba como le iría el día de mañana.