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Rosé caminaba sola hacia la Universidad, esta pensando bien las palabras que le diría a Jimin, su novio.

—Muchas gracias Srta. Kim.– Rosé retrocedió para ver a su derecha que ahí está su pelirroja favorita y una Castañita.

—Oh, no hay de que, es mi deber ya sabes.–Hablo la pelirroja.

—Mis padres y yo estamos muy agradecidos con usted, ahora sí me disculpa ya entraré a clase, hasta pronto Srta. Kim.– Agradeció y despidió aquella chica que sonreía mientras se despedía de la mujer.

Rosé se quedó mirando con una ceja encarnada, no quería suponer cosas, a lo que vio solo es una simple clienta que ayudo Jisoo.

—Am, hola Profesora, buenos días.– Saludo llamando la atención de Jisoo que solo suspiro rodando los ojos, la volteo a ver y sonrió algo incómoda.

—Hola Park, ve a clases.

—Recuerda que me das clases tres días seguidos a la primera hora – Recordó llegando a un lado de Jisoo para emprender una pequeña caminata a su destino.

La mujer volvió a suspirar rendida, se había olvidado.

Iban en silencio hasta que Jisoo decidió romper el silencio.

—¿Cómo-cómo sigues de am-

—¿Ah? ¿De aquí?.– Pregunto Rosé señalando su mejilla con una pequeña manchita morada, en realidad tenía la piel muy sensible y fácil se la hizo un moretón.

Jisoo bajo la cabeza algo avergonzado y asintio.

—No hay nada de que preocuparse, Lalisa me hizo ver qué fue un poco imprudente de mi parte, pero recuerda lo que dije a noche, no me rendiré.– Volvió a decirle.

—Ya no somos niñas, Park, yo-

—¿Puedes solo llamarme Rosé? ¿O Rosie?, Me da no sé que cuando me dices así, siento que estás enojada.– Hizo un mohin, algo que Jisoo pudo ver y se le hizo muy tierno.– Sé perfectamente lo que quieres tratar de decir, yo cumpliré esa promesa.

—¡Pero yo no! ¡Es absurdo! ¡Es estúpido!– Exclamó algo molesta Jisoo sin pensar que había herido un poco a Rosé.

Rosé la miro con ojos tristes mordió su labio inferior y asintió, no por vencida, pero no la molestaría por ahora, tenía que aceptar que si dolió.

Camino sin Jisoo cabizbaja, Jisoo quería disculparse pero ya era muy tarde, se dió una pequeña palmada en la frente.

—Eres una idiota Kim.– Espetó pisoteado el suelo de molestia.

Camino a paso rápido intentando alcanzar a Rosé pero está ya había desaparecido¿Volaba acaso? Tal vez más tarde se disculparía, fue a la sala de profesores para organizar su papeleo e ir por unos libros a la biblioteca.

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Rosé se encontraba recargada en la paleta de su pupitre algo desanimada.

Lisa y Yeon llevaban minutos mirándola que ni siquiera las saludo cuando ingreso al aula.

—¿Otra vez en sus días?.– Pregunto haciendo que Lisa negara.—¿Es por la profesora?.– Pregunto y Lisa asintió.

—Es lo más seguro.

Después de unos minutos todos entraron y cada quien a su lugar, durante toda la clase Rosé le dió la espalda a Jisoo cada vez que está la miraba o trataba de llamar su atención Rosé solo mantenía su mirada a la ventana mirando el cielo, Lisa y Yeon supieron que si era por la Profesora.

El timbre sonó anunciando cambio de clase, todos acomodaron sus cosas y mientras iban saliendo Jisoo los veía hasta que al final Rosé se levantó y metió todas sus cosas a su mochila, era su momento, era ahora o nunca, Jisoo se levantó de su silla y cerro la puerta llamando la atención de Rosé que encarnó una ceja frunciendo el entrecejo.

—Rosé.– Pronunció .

—¿Si?

—Pido disculpas por lo de hace dos horas, no er-

—No se preocupe profesora, yo ya me tengo que ir a mi siguiente clase, permiso.– No la dejo terminar, llendose.

Talvez si la había herido más de lo que pensó, ésto se volvería frustrante y no quería eso.

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Okey, ahí estaba la pelirroja en el comedor con los demás profesores, comiendo y conversando de algún tema trivial.

—¿Qué opinas Jisoo?.– Pregunto el profesor Seokjin llamando la atención de Jisoo.

—Ah, que, sí.– Respondió haciendo reír a todos los de la mesa.

—No estábamos hablando de nada importante Jisoo, solo que no estabas presente y decidí llamar tu atención.– Dijo encogiéndose de hombros.

Jisoo suspiro asintiendo tomando un trago de su bote de jugo.

La hora del almuerzo paso y las clases igual dando por finalizadas, Rosé decidió irse con Lalisa y Jeongyeon, verían películas en casa de Lisa, a la hora de salir de la Universidad una pelirroja se atravesó en el camino de esta haciendo que frunciera el entrecejo confundida.

—¿Me vas a escuchar Rosé?.– Pregunto Jisoo cansada.

—Tengo cosas importante que hacer ahora Profesora asi que hasta mañana.– Esquivo a Jisoo dejándola en medio de todos.

Tal vez si se había enojado aparte se haberse puesto triste.

Por otro lado la Rubia iba cabizbaja caminando con aquellas dos chicas a su lado, ya no sabían que hacer, en el almuerzo también estuvo muy desanimada.

—Oye Chae ¿Quieres escoger la película tu?.– Pregunto Yeon intentando animar a la Rubia pero fue fracasado.

—Escojanla ustedes, me da igual.– Dijo mirando al suelo aún.

—¿Nos dices que pasó con la profesora y tú, mejor?.– Pregunto Lisa.

Rosé asintió .

—Dijo que lo que estaba intentando hacer es una estupidez y que ya no somos niñas, eso lo entiendo pero las promesas son sagradas y claro que la cumpliré pero ella se pone así y-

—Tranquila, ten en cuenta que tiene prometido, Mujer.– Dijo Lisa.

—Deja a un lado que tenga prometido, ¡es muucho mayor que tú!.– Exclamó Yeon ganándose una mirada de "¿Es enserio?" Por parte de Lisa.

—La edad solo es un maldito número.– Dijo Rosé.

—Diria que y la cárcel una casa pero ya eres mayor de edad consiente de lo que haces así que si tú quieres luchar por ella por muuy en desacuerdo que este te apoyaré.– Dijo Lisa rendida.

Rosé por primera vez en el día levantó la mira sonriendo corriendo hacia su prima para abrazarla y darle las gracias.

—Yo también te apoyo.

Dijo Jeongyeon uniéndose.

Promise [Pt. 02]Where stories live. Discover now