Promise [Pt. 02]

008

2 semanas después

Rosé en todo momento ignoro a Jisoo haciéndole saber que sus palabras le hirieron, por otro lado la pelirroja a estado muy estresada y no solamente por las clases y sus asuntos de trabajo.

Rosé se la a pasado con Lalisa y Jeongyeon, platican, hacen pijamadas, hacen comentarios acerca de las personas que les gusta.

Ahora el trío de chicas se encuentra a punto de entrar a la Universidad para empezar las clases un día más a lo que Jeongyeon va con todas las ganas del mundo con cara de pocos amigos al igual que Rosé y Lisa. Parecen zombies de tanto que de a ratos cerraban los ojos en el camino, sabían que sería mala idea desvelarse tanto un Domingo sabiendo que al día siguiente tendrían clases temprano, pero que les quedaba

Llegaron a las puertas del instituto entrando mientras trataban de saludar lo más amablemente posible a aquellos que las saludaban, una vez llegando a su aula se sentaron cada una en su asiento correspondiente. Para la mala suerte de Rosé, su primera clase era con la profesora Kim, cosa que le emocionaba ya que vería a Jisoo pero trataba de disimular lo mejor que podía. Se dedicaron a platicar mientras el resto llegaba de a poco, hablaron de temas triviales mientras el ánimo de las tres aumentaba y era lógico, Jeongyeon vería a la persona que le gusta, Lisa le hacía burla a esta por esa razón y Rosé por que vería a Jisoo. Pasando los 20 minutos, todos empezaron a llegar rápido ya que la clase iba a empezar pero no se podía si la profesora aún no llegaba, cosa que a todos no se les hizo raro. Kim a estado llegando tarde todos los días desde que ella y la menor no se hablan.

Luego de unos largos minutos, entro aquella mujer de traje gris y tacones con unos cuadernos en el brazo y su portafolio en otra con cara pocos amigos. Dejo las cosas sobre el escritorio.

—Buenos días chicos.– Saludo la profesora con una tranquilidad.

Todos contestaron al unisono al escucharla, tomo uno de sus Libros y anoto en la pizarra el tema que se hablaría, si era sincera, no tenía ganas de ir a la Universidad, últimamente no tenía ganas de nada.

—Hoy veremos el tema que quedó pendiente el miércoles así que saquen su libro e ubiquense en la página 119... por favor.– Dijo calmada y sin ganas.

Todos se veían raro, sabían que algo pasaba con la Profesora pero nadie se atrevía a preguntar o eso pensaban.

—Profesora.– Jeongyeon alza la mano pidiendo permiso de hablar.

Jisoo asintió mirándola.

—¿Le ocurre algo?,Ha estado muy rara estas dos semanas.– Dijo bajando su tono de voz al mirar como Kim fruncía el entrecejo.

—No me pasa nada, solo es... cansancio.– Se limito a decir a lo que la chica asintió no convencida del todo.

Y así comenzaba el día de Rosé que solo miraba la espalda de la profesora, ya que está se encontraba anotando en la pizarra, su mirada fue bajando por la espalda baja de la profesora hasta llegar a... se sonrojo demasiado desviando su vista al libro de Jeongyeon que se encontraba dibujando una especie de dibujos raros menos la actividad, ella trató de centrarse en lo que estaban por ver tratando de olvidar lo que acababa de ver.

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—¿Estas diciendo que le viste descaradamente el trasero a la profesora?.– Pregunto con una sonrisa divertida Lisa mientras Jeongyeon trataba de no reír y seguir comiendo.

Estaban en la hora de descanso y las chicas pillaron a Rosé que seguía mirando a la profesora a lo lejos, Rosé se sonrojo.

—Cla-claro que no, ¡no digas tonterías!.– Espetó Rosé avergonzada.

—No son tonterías Roseanne, yo te Vi como descaradamente le viste el trasero a la profesora, niegamelo.– Dijo Lisa dando un trago a su jugo.

Rosé agachó la mirada encogiéndose de hombros, Lisa y Jeongyeon rieron haciéndole burla a Rosé pero la chica de cabello corto paro al momento de ver a aquella chica linda que pasaba junto con una castaña directo a su mesa, se les quedó mirando hasta que la chica sintió una mirada alzando la suya encontrándose con la de Jeongyeon a lo que le saludo amistosamente mientras seguía masticando su comida, la chica se sonrojo devolviendo el gesto.

Rosé miro eso rodando los ojos mientras una pequeña sonrisa escapaba de sus labios para enseguida volver su vista a Lisa y pillarla a ella mirar a lo lejos a una chica que pertenecía al club del consejo estudiantil, una castaña con ropa impecable y postura recta que miraba atenta un libro, al parecer Lisa se había enganchado tanto con esa chica desde hace una semana atrás pero no se animaba a hablarle y eso Rosé lo había notado desde el primer momento en que la chica siguió a esa castaña con la mirada a su respectiva mesa de siempre, Rosé soltó un suspiro.

—Deberías tratar de hablarle.– dijo al ver como Lisa regresaba su vista a ella y ladear la cabeza como si no estuviera entendiendo lo que su amiga le trataba de decir.—Ahg, me refiero a que le hables a esa chica si tanto te interesa.

Lisa volvió a mirar a la castañita y volvió a comer.

—Rosé hoy en día tienes que ser popular para hacerte notar y te hagan caso, ¿si sabes, no?.– contesto Lisa haciendo que Rosé crispara de hombros restándole importancia.

—Llevamos poco tiempo y tú ya eres popular, Lisa.– dijo Yeon soltando una pequeña risa.

Siguieron en lo suyo cada una hasta que Rosé levanto nuevamente la mirada y observando a su al rededor podía sentir que alguien la miraba pero no estaba tan segura o de a plano ya se estaba volviendo loca, pues tal vez la segunda opción fuese mas creíble ya que en estas dos semanas no le había dirigido la palabra a su querida profesora a pesar de extrañarla mucho, extrañar su cercanía y que esos ojos la mirasen solo a ella.

—...tierra llamando a Rosé, tierra llamando a Rosé.– Dijo Lisa mientras pasaba la palma de su mano por enfrente de la rubia que enseguida recobró la consciencia volteando a verle.

—¿Qué pasa Lisa?.– Sin más pregunto.

—Te desconectaste demasiado, vamos que ya termino la hora de descanso y Yeon se fue detrás de una del club de porristas.

—Creo saber quien es.– Dijo Rosé sonriendo

Ambas caminaron a su clase que tocaba con la profesora Bora, sin duda Sociales es la materia que hacía esa profesora que fuera aún más aburrida, solo se la pasaba hablando de lo increíble que es todo según ella.