X

591 54 9
                                    

Todo esto es tu culpa, Shion — el ex maestro de Jamir señalo al sorprendido peli verde —

Mi culpa? — había escuchado bien? Su culpa? SU CUPA?! DE QUE MANERTA SERÍA SU CULPA QUE AMBAS ORDENES DORADAS SE GOLPEARAN COMO ANIMALES IRRACIONALES, NI QUE EL LES HUBIESE DICHO QUE LO HAGAN. POR ATENEA DONDE ESTABAN?! — de que manera sería MI culpa? — cuestiono en un tono calmo, lo cual era solo para mantener la fachada —

Y aun lo preguntas? — negó el mayor — solo estamos aquí un par de días y eh visto lo mal que se comportan esos chicos, se levanta a la hora que les pega la regalada gana, no comen adecuadamente ni a la hora adecuada las pobres cocineras tienen que hacer doblemente su trabajo porque esos niños se levantan mucho tiempo después de que tus compañeros ya comieron — negó suavemente — se trasnochan y no haciendo guardia sino viendo esas cosas que ven en esos aparatitos con lucecitas que tienen —

Celular, televisor, computadora, Tablet? — Enumero Docko tratando de ayudar al antiguo maestro de Jamir que le miro mal — ok. No digo nada — sonrió nervioso —

En fin, el punto es que todo es tu culpa, Shion, como permitiste que eso les pasara? No te respetan, ni a ti u otra autoridad que esté presente, y aunque no sea autoridad todo ser viviente merece respeto, y ellos no parecen importarse por eso! — Gruño con mayor fastidio — SOLO MIRALOS!!! — Y fue ahí cuando su maestro le indico que mirara a sus hijos que estos hacían todo menos prestar atención a lo que se decía o como le gritaban. Los muy ingratos centrados en su propio mundo en el celular, y él tragándose los gritos que ni merecía —

Bien, tiene razón es error mío — acepto el peli verde con resignación, después de todo como podía alegar lo contrario con esas EVIDENTES pruebas que le estaban mostrando —

No, Shion... — Docko quiso intervenir y ayudar a su amigo, pues no era su culpa ni nada, más una mirada del peli verde basto para callarlo —

Caballeros — llamo a los dorados del siglo actual, que rápidamente guardaron sus móviles. Oh! Claro que los muy condenados estaban haciendo todo eso para molestarlo, como sino los conociera — a vista de las pruebas y su mal comportamiento demostrado en este tiempo, todos quedan mmm... — llevo una mano a su mentón, como se decía esa palabra. Por Atenea llevaba tanto tiempo sin decirla que se le olvido —

Castigarlos — rodo los ojos Hakurei y expreso con resignación —

Eso, castigarlos así que... — miro de uno en uno, que sería lo más doloroso para sus hijos si ya los había castigado de todas la maneras posibles y ni así cambiaban, por algo es que se había rendido hace tiempo atrás — me van a entregar todos sus celulares, sin contraseña y con sus aplicativos abiertos — sonrió al ver a más de uno abrir los ojos de par en par. Ja! Era obvio que lo que encontrara en estos lo iba a usar en su contra —

Eso no es un castigo — expreso Hakurei —

Oh, créame que si lo es maestro — sonrió ampliamente —

***M***

Pero nosotros... —

Silencio — Sage paseo la mirada de dorado a dorado — no me interesas sus excusas, ni lo que haya llevado a que se enfrentaran con sus sucesores, por segunda vez en lo que va del pequeño tiempo que estamos aquí — suspiro con cansancio — lo que quiero saber es porque, porque no se pueden llevar bien? — pregunto cruzándose de brazos en espera de que hablaran —

Patriarca, sé que no soy dorado ni caballero pero... — la vocecita tímida de Atla se hizo oír el medio del gran silencio que reinaba — Regulus y yo no hicimos nada, al contrario buscamos llevarnos bien con los actuales caballeros dorados, cierto? — miro al león que asintió rápidamente, pues ellos ni sabían porque los había llamado a todos y hasta ahora los estaban reprendiendo —

De Generación en Generación (Saint Seiya)Onde histórias criam vida. Descubra agora