De Generación en Generación (Saint Seiya)

XI

Pero qué? — Saori cruzo los brazos con fastidio. Quien había osado poner a sus dorados a barrer y limpiar, eso era inaudito, inaceptable — SHION!!!! — La furiosa adolescente se puso de pie y con un enfado desbordante se dispuso a buscar al responsable de que sus amados guerreros estén sufriendo — esto no se queda así de ninguna manera... — y con esas palabras la diosa de la sabiduría abandono la sala de Aries junto a un grupo de caballeros —

Sabía que funcionaría — Death sonrió de costado —

Guao inicialmente pese que no funcionaría — Afrodita parpadeo un par de veces para ver si así la "ilusión" desaparecía —

Ten, pásate esto por las inflamaciones — Mu le tendió un potecito de crema al peli celeste, que asintió — procura que no se reviente o dolerá mucho más — agrego al ver las ampollas que tenían las manos de Afrodita consecuencia de estar barre que barre desde hace más de dos días —

Si así se puso por ver al caballero de piscis, no quiero ni pensar cómo se pondrá al ver cómo están los demás caballeros, y todo hasta la casa patriarcal — pensó el pequeño lemuriano que solo había visto todo desde la llegada de joven diosa. Joven que había llegado sin previo aviso, pues nadie la recibió como era debido o escolto. Él ni tuvo tiempo de saludar cuando la joven arrastro a Mu, DeathMask y Afrodita a descansar y le informaran por qué estaban haciendo ese trabajo —

***M***

Aldebarán? Aioria? — Saori vio con sorpresa y horro como el de tauro levantaba los pilares derruidos y los sostenía hasta que Aioria que usaba un tipo de masilla los reparara, todo bajo el sol inclemente, sin protección solar o sombreros, sin guantes para las manos. No, eso estaba mal —

Atenea — ambos dejaron lo que hacían para hacer una leve reverencia ante la deidad — no sabíamos que llegaría, la hubiéramos escoltado — la sinceridad de Aldebarán se hizo presente —

Descansen...— la joven vio las manchas rojas que se formaban en la quemada piel de sus caballeros —

Pero... — quiso replicar Aioria —

Yo me encargo de Shion — cortó lo que fuera a decir el león —

No quiero ir en contra de su orden pero... — Aldebarán solo negó suavemente, Aioria estaba entrando en papel de víctima igual que seguramente lo harían todos sus compañeros —

Yo me arreglo con él, descansen — fue la orden de la menor antes de continuar —

***M***

Porque nos tocó esto a nosotros?! — Milo volvió a reclamar con indignación —

Cállate! Tengo suficiente con la limpia de los retretes como para soportar tus lloriqueos también — el rubio de virgo tiro los guantes que usaba para limpiar —

Que? Pero si solo estas mirando?! El que hace todo aquí soy yo — rebatió ante lo sínico que era el virgo —

Todo? Quien es el que está sacándolo el papel usado... — se calló de golpe, al recordar lo humillante que era eso — en fin, terminemos pronto — casqueo la lengua antes de volver al trabajo —

Mejor — acepto el peli azul con un suspiro cansino —

***M***

Ahora, Shura! — Aioros dio la señal para que el español usara sus poderes — genial, este quedo mucho mejor — sonrió al ver la bonita forma que le había dado al arbusto — tienes talento — sonrió, haciendo que un brillo angelical lo rodeara provocando un leve sonrojo en el capricornio —

Si, si vamos que aún faltan muchos — comento desviando la mirada a la gran extensión de zonas verdes que tenían que, según Shion, dejar presentables para la llegada de Atenea — Camus, trata de no quemar a la planta esta vez —

Aja — respondió sin ánimo. Ahora nadie puede cometer un error porque se lo echan en cara cada que se puede — las regare con cuidado — agrego más para sí que para sus compañeros — con agua y no hielo — se recordó —

***M***

Y las quiero bien limpias, Docko, sin mancha alguna, entiendes? — Las doncellas veían con curiosidad como el antiguo maestro de libra, por orden del patriarca, llevaba montones de ropa, sabanas y edredones al río más cercano — y ustedes tiene prohibido ayudar — las mujeres solo asintieron ante la orden del peli verde — que pensaste, que porque eres mi amigo no te castigaría? pues no!. Que GRAN parte de culpa tienes — recordó lo alcahuete que era el peli granate con los dorados —

Abusa de tu autoridad mientras puedas — sonrió el ex anciano, ahora joven, maestro —

No creo que a la señorita le agrade esto — comento en un susurro una de ellas —

No es asunto nuestro. Vayamos a preparar los alimentos, así los ayudamos mejor — agrego otra a lo que todas asintieron y cuando ya estaban por salir del templo patriarcal al llamo su atención —

SHION!!! — la diosa había entrado violentamente y cuando pensaba que su molestia no podía ser más grande vio como Docko pasaba con más ropas —

Mejor aquí corrió, que aquí quedó — las doncellas salieron espantadas, lo mejor era que hicieran un buen banquete —

***M***

Es fue el cosmos de Atenea? — los dorados de la generación anterior miraron al mismo tiempo el mismo lugar —

No iba a llegar por el atardecer? — Asmita miro a Sage en busca de respuestas —

Eso fue lo que me dijo... — el ex patriarca no podía explicar por qué la diosa cambiaria de opinión y no es como si pudiera interponerse tampoco —

Porque estará tan molesta — Regulus susurro para sí —

No cree que debemos ir? — Degel pregunto —

Algo me dice que no — negó Aspros siendo secundado por su gemelo —

Es Atenea que puede pasar...? — La explosión que siguió la cuestión de Kardia fue suficiente respuesta — mejor esperamos — sonrió antes de darle una mordida a su manzana — Y a ustedes que les pasa? — cuestiono al cáncer y piscis que se mantenían lejos el uno del otro y así también de ellos —

No quieres saberlo — respondió el pequeño león —

Sabes algo? — Sísifo se acercó a su sobrino —

Bueno... — jugo con sus manos y desvió la mirada — es una reacción normal — se encogió de hombros —

Normal? – ElCid miro con curiosidad al menor de la orden —

Si, como alguien cuando se entera que sus reencarnaciones tienen una relación amorosa — respondió y cuando se dio cuenta de sus palabras se tapó la boca —

Que?! — todos vieron de cáncer a piscis y viceversa —

Y yo que cría que los únicos que tenían algo eran escorpio y acuario — Hakurei hizo que todas las miradas se centraran en él, sobre todo la de Degel y Kardia — que? No me digan que no han sentido toda esa tensión sexual que los rodea — río al ver como octavo y onceavo guardia se sonrojaban aún más —

Ahora que lo dices también he visto lo mismo en sagitario y capricornio — Aspros opino haciendo que Regulus empalidezca y los portadores de los signos mencionados se miraran entre si y se alejaran unos pasos, de repente sintieron que estaban muy cerca —

Son suposiciones o hechos reales? — cuestiono Asmita pensativo — Si es cierto podemos usarlo en su contra — sonrió al recordar como Aries y virgo reaccionaron ante la mención de Shion, era obvio que este no sabía nada de esa relación. Así que podían usar esa información para mantener a raya a esos mocosos malcriados — Regulus? — las miradas se centraron en el pequeño león que se había intentado escabullir. El cachorro debía saber algo —

Pues... — miro a los mayores —