El Pasado En Mis Manos || •Manjiro X Oc•|| Terminada||

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Oyuki salió del hospital con su patineta bajo su brazo el dolor en sus rodillas ya era soportable así que ya podía andar con más libertad, sin tener ninguna clase de idea de a dónde iba a tener que ir primero si ir a buscar a Mikey o a Draken, tenía que evitar que la ToMan se dividiera por la situación que estaba pasando y ella tenía dos promesas que cumplir iba a cuidar de los chicos hasta que Pah regresara y tenía que hacer que se reconciliaran. Al andar en su patineta iba atenta en su camino y evitaba chocar con las personas, que iban caminando por la banqueta podría tener una idea de que alguno de los dos rubios mayores estuviera en el templo donde se reunían todos los chicos de la Tokyo Manji, pero estaba tan sumergida en sus pensamientos que no veía que el semáforo aún estaba dando el permiso a los carros y ella iba a cruzar sino hubiera sido por una persona que la sujeto de la mano, evitando que la rubia terminara siendo atropellada.

- Sabes princesa deberías de ver por dónde vas andando, porque podría ocurrir un accidente.- El chico que salvo a la rubia de cabellos rubios, era mucho más alto y tenía en los dorsos de sus manos unos tatuajes "Castigo" y "Pecado".

- Lo siento y gracias por haber salvado mi vida.- Ella agradeció de verdad a aquel chico que al verlo se le hacía bastante familiar, como si ya lo hubiera conocido de algún lado.- Lo siento ¿por casualidad nos habíamos visto antes?- Sus ojos azules miraron al chico de ojos dorados, que estaba frente de ella y ese chico parecía intimidante para otros y de otro momento empezó a incomodarle por el apodo puesto, en un intento de calmar esa incomodidad abrió una paleta y la llevo a su boca.

- Si nos hubieras visto antes, me acordaría de tan linda chica como lo eres tú, bueno princesa nuestros caminos se tienen que separar en este momento espero que lleguemos a vernos en otra ocasión.- Antes de irse y dejar a la chica que parecía un lindo desastre con las heridas en sus rodillas y llena de tierra, se agacho para estar a su altura.- Me llevare esto como una muestra de agradecimiento.- De una manera suave le quito la paleta que la joven tenía en sus labios, para meterle en su boca y empezar a alejarse de ella.- Tan hermosa princesa de mirada azul, inocente y brillante pero la princesa mantiene esa crueldad y locura en lo profundo de su mirada.- El chico iba canturreando bastante feliz y saboreaba la paleta sabor cereza que antes fue de la chica de la cual cantaba.

Oyuki estuvo quieta en su lugar y tuvo esa extraña sensación de tener un deja vú, solo para ver la dirección en la que el chico se había ido realmente no sabía si iba a poder soportar lo siguiente que fuera a pasar en su camino a buscar a Manjiro y Draken e incluso sentía que su límite estaba por sobrepasar en ese instante. Ella ahora iba atenta a su camino hasta que frente a ella estaba un grupito de unos siete chicos caminando de forma lenta haciendo que empezara a enojarse y tuvo que bajarse de su patineta antes de querer intentar taclearlos con esta, al caminar cerca de ellos termino por escuchar su conversación y eso fue algo para que su límite se rompiera.

- Que jodido término todo, Osanai termino siendo apuñalado todo porque aquel niñato quería venganza por haberle destrozado la vida de su amigo, aunque fue más porque violamos a la novia de este frente suyo.... Pero carajo se sentía tan bien.- El chico se sintió tan feliz por su acción, tan repugnante.

- Esa perra lloraba, pero bien que le gustaba que le diéramos.- Se burló otro de los chicos y sus compañeros estuvieron de acuerdo al ser los participantes de todo.

La chica apretaba con fuerza su mandíbula y estaba bastante enojada por la forma de hablar de aquellos malditos malnacidos, ya no tenía necesidad de buscarlos porque ellos solos terminaron llegando a ella y Oyuki vio como ellos giraban a la derecha para meterse en uno de los callejones, con fuerza sostuvo su patineta y ella los siguió. El chico que iba hasta atrás de los demás tenía la guardia baja, porque estaba con sus amigos burlándose de todo lo que hicieron y sentían orgullo de sus acciones aparte nadie iba a ir contra ellos, pero si supiera que estaba tan equivocado no habría pensado cuando escucho el sonido de alguien corriendo hacia ellos sin tener tiempo de reaccionar ya alguien le había dado un golpe; Oyuki había tomando el impulso necesario para poder brincar hacia el chico y con ambas manos sosteniendo su patineta con ambas manos, golpeando la cabeza del chico y este se sintió desorientado por aquel golpe para caer de rodillas al suelo, la chica con su enojo sujeto del cabello a este y con fuerza estrello su cara contra el suelo fueron dos veces la que hizo eso, dos golpes que hicieron que el chico terminara con la nariz rota y que perdiera unos dientes sin llegar a golpear al punto de matarlo. Los chicos que iban enfrente al escuchar el escándalo detrás de ellos voltearon, encontrándose con aquella situación donde la chica dejaba de sujetar el cabello del que ahora estaba inconsciente en el suelo y pudieron ver como ella levantaba la cabeza para verlos, ellos no sabían porque se sobresaltaron si era solo una niñita de catorce años que media menos que ellos.