El Pasado En Mis Manos || •Manjiro X Oc•|| Terminada||

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Ambos hermanos siguieron de cerca al chico mayor y por donde estaban caminando solo se podían escuchar sus pasos asi como el tintineo de los cascabeles de la Hanagaki y Hanemiya, aunque ambos se estaban preguntando como es que no conocían a Hanemiya si estaban en la misma escuela, sobre todo la menor de los Hanagaki habría reconocido al chico porque siempre estaba vagando por los clubes de las escuela y lo habría reconocido pero no.

- Disculpa, Hanemiya.- Llamaron ambos hermanos al mismo tiempo haciendo que el chico se sobresaltara.

- No sean tan corteses conmigo, solo es un año lo que nos diferencia sería mejor si me llama Kazutora.- Él se detuvo su andar por un momento para seguir camino después, detestaba que lo llamaran por su apellido solo le hacía saber que el hombre que era su padre lo odiaba, por ser un hijo no deseado y por esa razón era tanto su odio hacia él.

- Disculpa, Kazutora tengo una pregunta si eres de nuestra escuela ¿Por qué nunca llegamos a vernos o encontrarnos?- Oyuki pregunto mientras seguía mirando al chico intentando recordarlo, porque lograba recordar varios rostros y nombres de distintos compañeros de tercer grado, pero este chico era un completo desconocido para ella.

- Wuuaaa, ustedes realmente son unas personas muy curiosas.- Kazutora miro de reojo a los gemelos y puso su atención en la chica, porque había algo en ella que le llegaba a dar cierta tranquilidad pero no sabía porque.

- Hace rato nos dijiste que era de tercer año, de nuestra escuela ¿Pero porque nunca antes nos llegamos a ver?- Takemichi pregunto en lugar de su hermana, y esta lo miro mal por haberle ganado al preguntar.

- Creo que conozco a varios chicos de tercero, pero nunca nos llegamos a conocer.- Oyuki miro a Kazutora con curiosidad.

- Oh, bueno no me conocen ni me han visto en la escuela porque solo asistí en el primer grado.- De forma despreocupada el paso sus brazos tras su cabeza, para voltear a ver a los gemelos.- Porque estaba en el reformatorio.- Kazutora miro a ambos hermanos y noto que la chica parecía recordar algo malo por la cara que puso.- Eso no es una reacción normal ¿Esconderá algo?- Se preguntó y luego se encogió de hombros tal vez en algún momento se interese en averiguar lo que oculta.

- ¿En un reformatorio? ¿Fuiste arrestado?- Takemichi hizo preguntas que eran bastante obvias.

- Si, ya sabes un reformatorio donde meten a los chicos malos que hicieron algo malo, debes de ser alguien muy tonto para no saber eso.- Kazutora se burló de chico por las preguntas tan obvias y estúpidas del rubio teñido.

- Fue arrestado.- Murmuro muy bajito la chica para esconder sus manos dentro de su suéter de borreguitos, no quería que vieran sus manos temblorosas y sudorosas, porque recordó su casi arresto en primero.

- Fui arrestando por.... Culpa de él.- Kazutora miro al suelo y después ignoro a los hermanos para seguir caminando.

Ninguno de los dos hermanos pudo comprender que era lo que Kazutora quiso decir y no volvieron a decir ninguna palabra, pero siguieron hasta que llegaron a un local abandonado que antes fue un árcade lleno de risas de adolescentes pero ahora solo era un lugar oscuro y deprimente, Takemichi busco la mano de su hermana para que no fuera alejarse de él y sobre todo para protegerla de lo que pudiera pasar cuando entraran en la guarida de Vallhalla y Oyuki no tenía la intensión de soltar la mano de su hermano en ningún momento, porque aquel lugar le desagradaba bastante y no era como en otros lugares como en los que llego a estar cuando estuvo en New York. Dentro de aquel lugar al estar todo cerrado y sin ventanas todo olía a cigarros y podría que también marihuana, asi como el humo se quedaba flotando en el lugar, los hermanos al haber entrado en el lugar tuvieron todas las miradas encima de ellos dos y era como sentirse un par de cervatillos que por separarse de su madre, ahora estaban en el territorio de los lobos.