El poema y el cupcake (YurixNatsuki)

Cap. 4: El cupcake y el poema

   Monika había salido corriendo para ir a buscar a Yuri y consolarla. En cambio, Sayori se había quedado en el aula. Se acercó lentamente hacia Natsuki, quien seguía paralizada con sus puños apretados.

Sayori: Natsuki... - le susurró preocupada mientras le apoyaba una mano en su hombro.

Natsuki: No... - movió su hombro, quitando la mano de su amiga -. No quiero que nadie me toque.

Sayori: ¿Por qué estás tan enojada con Yuri? Son mejores amigas y se quieren mucho.

Natsuki: No estoy enojada con Yuri, es sólo que... - paró de hablar y dio un profundo suspiro.

Sayori: Tranquila, no hace falta que me hables.

Natsuki: Agh, y yo no quiero que me consueles, ¿sabés? – dijo de mala manera, aunque Sayori notó que estaba apretando sus labios para no llorar.

Sayori: Voy a consolarte igual porque necesitas que alguien se quede con vos. Quiero saber qué te pasa.

Natsuki: ¡Yo no voy a decirte nada!

Sayori: ¿Por qué estás tan enojada?

Natsuki: ¡Porque estoy enojada! ¡No quiero que nadie me hable ni nadie me toque! – decía entrecortando su voz.

Sayori, preocupada por su amiga, trató de acercase a ella para darle un abrazo, aunque Natsuki la sacaba rápidamente.

Natsuki: ¡No me toques! ¡Salí! ¡Salí!

Sayori: ¡Tranquila Natsuki, todo está bien! ¡Podés confiar en mí!

Natsuki: ¡NO! ¡NO QUIERO CONFIAR EN NADIE, NO!

Sayori: ¿Por qué? ¡Se te nota demasiado mal, Natsuki! ¡Si hablás, te va a hacer mejor!

Natsuki: ¡QUE NO! – forcejeaba apretando sus ojos mientras Sayori seguía abrazándola -. ¡SOLTAME! ¡NO QUIERO TUS ABRAZOS, YURI!

Natsuki abrió sus ojos de par en par. Se había equivocado. En vez de decir el nombre de Sayori, nombró a... Nombró a...

Natsuki: Yuri... - susurró por lo bajo mientras miraba al piso abatida -. Yuri...

Sin aguantar más, Natsuki se abalanzó contra Sayori y le dio un muy fuerte abrazo mientras se largaba a llorar desconsoladamente en su hombro. Sayori la contuvo muy tiernamente. Natsuki ahogaba su llanto en la ropa de su amiga mientras que sus mejillas se empapaban de lágrimas.

Natsuki: Tengo miedo... - apretaba sus dientes. Realmente estaba muy angustiada.

Sayori: ¿Por qué? ¿Miedo de qué?

Natsuki: De Yuri... De mí... De nuestra relación...

Sayori: ¿Por qué ese miedo? Vos pensás que algo va a cambiar porque... ¿se besaron?

Al oír esto último, Natsuki la abrazó más fuertemente y Sayori sintió cómo su amiga asentía con la cabeza.

Sayori: Oh, tonta, ¿por qué pensás que las cosas irían a cambiar? – la consolaba con una sonrisa -. ¡Ella te quiere mucho y vos la querés mucho a ella! ¡Un beso no va a hacer que dejen de ser amigas!

Natsuki: Es que... es probable que si vuelvo a darle un beso... ya no seamos más amigas – decía calmándose un poco.

Sayori: Ay, ¿cómo decís eso? ¡Van a seguir siendo las mejores mejorcitas amigas de siempre!