Volveré

Capítulo 6

Ranma

Hoy volví a Nerima, mi hogar. Dónde están Akane y mi hijo, de dónde nunca tuve que haber salido.

Me cuesta recordar algunas cosas todavía, y más aún que todo ya está muy cambiado, las casas, las calles; fue algo difícil encontrar aquel lugar, aquella calle donde está el dojo Tendo. El dojo dónde vivía mi familia, solo espero que aún sigan viviendo ahí.

Llame a la puerta aún era temprano, no más de las ocho de la mañana, esperaba que alguien saliera a abrir. Estaba nervioso, asustado, no sabía cuál sería su reacción, pero yo solo quiero volver a estar con ellos.

Volví a llamar a la puerta, otra vez nadie salió, quizá ya no vivían aquí, si eso pasara no sabría que hacer, y entonces no podría volver a verlos.

No sé cómo puedan reaccionar, y se que es muy probable que esten molestos, y más por el largo tiempo que estuve ausente; pero quizá y si les explico el porqué no regresé, puedan perdonarme, deseo que lo hagan. Quiero que volvamos a ser una familia, como la que fuimos antes, como la que aún podemos ser.

Se que ahora Rokuro ya es más grande, y se que han pasado varios años, pero quizá todo pueda volver a ser como antes, quizá ellos entiendan todo y puedan perdonarme.

Quiero estar con Akane y mi hijo, quiero volver a ver mis padres, quiero ver al tío Soun, quiero volver a ver todos, quiero explicarles todo. Pero también tengo miedo de que no crean en lo que digo, y no puedan perdonarme. Temo volver a estar lejos de ellos.

También temo que Akane ya no me ame, yo la sigo amando con todo mi ser, es mi esposa la madre de mi hijo. Tengo mucho miedo de que ella me desprecie; pero ahora debo ser fuerte, estoy parado al frente del dojo Tendo, esperando a que alguien salga.

Los necesito a mi lado, ya no quiero estar más tiempo sin verlos.

Llame una tercera vez, de pronto ví que la puerta comenzó a abrirse; mi corazón dió un brinco. Espere hasta poder ver quién era la persona que abría la puerta, cuando pude al fin apreciar quién era lo supe al instante, era Rokuro, mi hijo. Sin duda era él, no podía equivocarme; claro que ahora es más grande, y se parece a mi, solo que el tiene los hermosos ojos de Akane... mi linda Akane.

Al cruzar sus ojos con los míos el supo al instante también quien era, me alegra tanto  que no se haya olvidado de mi, porque al final de cuentas cuando yo me fui el todavía era muy pequeño.

—Ro-Rokuro ¿eres tú? —No pude evitar abrazarlo, cuánto deseaba hacerlo; y sin poder evitarlo unas lágrimas ya bajaban por mis mejillas —Crei que nunca podría volver a verlos —dije al fin completamente feliz por tenerlo ahora en mis brazos.

Sentí que él también empezó a llorar pero no dijo nada ni tampoco me abrazo, aunque comprendo, es normal que este molesto, enojado, y... en realidad no se cómo puedan sentirse. Lo único que espero es que no me odie.

Rokuro

—Apartate —le dije furioso cuando al fin pude hablar.

Él no se alejó, pero tampoco dijo nada, estaba llorando lo sentí, pero no me importo. Ya bastante sufrimos nosotros.

—Apartate —repetí—, vete de una vez y no vuelvas —él se apartó un poco de mí—. Ya nadie te necesita aquí —dije serio, aunque no lo podía negar yo también estaba llorando.

—Por favor hijo, déjame explicarte por que ya no pude volver —pídio.

—No —limpie mis lágrimas— sólo causas dolor.

—No hijo por favor, sólo déjenme explicarles —volvio a pedir.

—¡Rokuro! ¡¿quién es?! —hablo mamá desde la casa—¡¿Porqué tardas tanto?!

—¡No es nadie mamá, en un momento voy! —le respondí a mamá —vete —le dije otra vez a él—, entiende, ya no quiero que hagas sufrir a mamá.

—Akane —escuche que susurro viendo de dónde venía la voz de mamá, de pronto quiso entrar.

—Vete —le dije y lo empuje hacía afuera —no eres bienvenido aquí —no desearía estar aquí ahora— ¡Tu tiempo de volver se terminó! —tampoco quisiera hablarle así, es papá de todas formas.

—Por favor Rokuro, solo quiero explicarles, quiero explicarles a tí y a Akane, a todos.

—No, sólo quieres hacernos sufrir más, vete —yo solo deseo que mamá no vuelva a sufrir.

—¿Rokuro? —dijo mamá mientras caminaba por el pasillo hacía nosotros.

—¡¡Vete!! —le grite, no debía verlo mamá, ya no quería verla sufrir. ¡Tiene que irse ya!

—¿Quién es hijo? —dijo mamá a mis espaldas.

De pronto silencio, nadie dijo nada.

—Ranma... —dijo mamá cuando lo vió; tarde, demasiado tarde, tuve que haberlo hechado y mamá ya no sufriría.

—Akane —dijo él al verla, mamá se llevó ambas manos a la boca, e inmediatamente comenzó a llorar.

—Maldito —dije mientras veía a papá de reojo—, mamá está llorando otra vez por tu culpa.

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Hola, antes que nada una disculpa por tardar en actualizar, y porque el episodio sea algo corto.

¿Qué les ha parecido el capítulo?

Déjeme sus comentarios, me encanta leer sus opiniones.

Muchas gracias a todos los que leen este fic, espero actualizar pronto. :)