𝐌𝐈 𝐒𝐔𝐄𝐆𝐑𝐎 [𝚉𝚑𝚊𝚗𝚈𝚒]

VIAJE

Capítulo 18 - Viaje.

El ruido de las cortinas al ser abiertas y los rayos de sol pegar justo en su rostro fue suficiente para despertar por completo al heredero Wang.

- Joven amo, sus padres lo esperan en el jardín para desayunar - Informo una chica con un bonito uniforme - Su baño ya está listo - Dijo por último saliendo del cuarto.

Yíbo se estiró en la enorme cama, dejando caer sus brazos a cada lado y como un balde de agua fría pego un brinco. Él estaba solo, el espacio al lado de su cama estaba vacío, pensó por unos segundo que quizás había soñado todo, pero una pequeña tarjeta en el cabezal de la cama le dijo lo contrario.

Levanto la almohada. La nota venía acompañada con un grupo de claveles de color pastel sospechosamente parecidas a las que su madre tenía en el invernadero y un estuche con las marca de Rolex. Miro la tarjeta sosteniendo las bella flores amarradas con un pañuelo azul

Buenos días Mi Julieta

Dormir contigo ha sido algo maravilloso, pues solo contigo encuentro la paz que hace mucho tiempo perdí. En la celebración de ayer no pude entregarte mi regalo, el cual consiste en dos partes. El primero es un elegante Reloj Rolex, quedará perfecto en tu muñeca fina y blanca. El segundo te lo daré yo en nuestra cita de esta noche, te recogere a las 12 de la madrugada en la parte trasera de tu casa. Sera algo inolvidable.

Te extrañare hasta entonces.

Yibo inconsciente sonrió leyendo frase a frase. Al terminar ansioso como un niño en Navidad abrió su regalo y formo una gran O con su boca en asombro. Tal y como dijo Zhan el Reloj era muy fino, era de acero Oystersteel, oro Everose y diamantes en el bisel... era muy bello. Se lo puso con emoción y tuvo que admitir que se veía muy bien, era el mejor regalo que pudieron darle.

Miro de nuevo la nota, leyendo las líneas donde hoy lo invitaba a una noche especial a la cual él no podría ir, pues en pocas horas el viajaría junto a su primo y amigos de vacaciones por una semana. Pensó en llamarlo y avisarle de su corto viaje pero su molestia por lo sucedido con el otro chico aún no era olvidado y como un castigo no le diría nada, dejaría que siguiera con sus planes. No era su culpa si quedaba esperando por él, ellos no tenían ninguna relación sentimental que lo hiciera sentirse comprometido a llamarle. Sonriendo con un poco de maldad, Yibo se quito su ropa y el Reloj.

Ya bañado y vestido Yibo salió a encontrase con sus padres.

- Buenos días hijo - Dijo Ayanga y Malai.

- Buenos días - Dijo Yibo tomando lugar en la mesa.

- Hoy pedí que hicieran tu desayuno favorito - Dijo Malai, moviendo su mano a un grupo de mujeres que se acercaron rápidamente al heredero para servirle un plato con tortitas, rodajas de banano y miel

- Gracias madre y gracias también a ustedes - Dijo a la servidumbre.

- Hoy pareces muy radiante hijo, aque se debe? - pregunto Ayanga al ver el buen humor de su heredero.