Mi Mejor Error (AD #2) ✓

3.- Sobrio

Kylie

Es extraño como antes pensaba que, una vez que entrara a la universidad, mi vida mejoraría.

Cuando eres joven y tu única preocupación es sacar buenas calificaciones en el instituto, ser popular, ser considerada "bonita" y ese tipo de cosas, la universidad de vuelve como una meta para que puedas disfrutar de algún tipo de libertad en el futuro, una libertad que según tú, no habías experimentado y morirías por hacerlo.

El concepto de todo lo que compone a la universidad, ha sido tan estereotipado debido al cine, libros y series de televisión que te cuentan una historia fantasiosa de drogas, sexo, diversión y donde los estudios quedan obsoletos, porque ¿quién piensa que a la universidad se va netamente a estudiar? Obviamente, yo no lo pensaba.

Pensaba que una vez que llegara aquí, empezaría a disfrutar mi vida, mi juventud, el porqué siempre había intentado cuidarme físicamente. Quería empezar a divertirme, sería una adulta al fin, nada me detendría. Y mi abuela me apoyaba en mi sueño ridículo.

No pisaba la realidad. La realidad es un poco demasiado diferente.

Siempre había querido ir a la universidad, desde niña me había preparado siguiendo cursos de pastelería y cocina, esforzándome en mis calificaciones, haciendo actividades extracurriculares. Había cuidado de mi imagen demasiado para poder llegar a este momento. Era lo único que me importaba, lo único que había querido jamás.

Mi abuela siempre me había impulsado a mi sueño de convertirme en chef. Antes de su muerte, no me había dado cuenta que en realidad, ella era ala única persona que me apoyaba y que me dejaba fantasear sobre un futuro superficial, pero que me hacía tan feliz imaginarlo.

Ella no quería que vaya a la universidad para que yo así pudiera cumplir mis sueños. Ella quería que yo vaya para mantenerme alejada del verdadero monstruo que era su hija, mi madre.

Y cuando mi abuela murió sorpresivamente antes de que empiece mi último año, fue cuando realmente supe lo mucho que me protegía. Me dejaba soñar, fantasear acerca de un futuro que, según yo, había estado planeado a la perfección.

Estoy agradecida con ella por eso, de verdad.

Pero que pendeja que era mi yo del pasado.

¿En serio alguna vez pensé que la universidad sería divertida?

Es lo más horrible que me ha pasado alguna vez.

—¿En qué carajos estaba pensando cuando decidí ir a la universidad? —me lamento en voz alta, viendo el portátil frente a mí.

Ni siquiera tengo la cuarta parte de mi ensayo.

¡Ni siquiera sé cómo escribir un ensayo!

Mi mejor amiga Jane, se ríe mientras está acostada en su cama. Estamos en su departamento, que es mucho más tranquilo que la residencia, a pesar de estar en el centro de Manhattan. Yo estoy sentada en el la silla frente al escritorio de su habitación, mi portátil sobre la mesa del mismo. Necesito tranquilidad, así que vine a hacerle algo de compañía mientras que su esposo —sí, está casada con tan solo 20 años— se encuentra en la práctica de su equipo de fútbol americano.

—Oye, tienes aún tiempo para redactarlo —dice ella, con la boca llena de gomitas—. ¿No entras a clases el miércoles? Apenas es sábado.

—Mañana tengo reunión con el grupo de estudio y tengo trabajo de media noche, es la noche drag. Además, tengo que trabajar el lunes y martes durante la tarde y gran parte de la noche, no tendré tiempo para hacer este maldito ensayo —me quejo antes de respirar hondo y cubrir mi cara con mis manos.