1. Virgen

3.7K 346 66
                                    

Ah, la veintena...

Qué gran momento de la vida. Ese dónde se vive al límite, se sueña, se vuela, se experimenta. ¿Jimin estaba viviendo al límite? ¿Como cantante Idol? Seguro. ¿Soñaba en grande? Por supuesto. ¿Volaba alto? Joder, claro que sí. ¿Experimentaba?

Eehh... Pues según se mire.

Hacía muchas cosas divertidas, probaba nuevas experiencias con los suyos y se apuntaba a un bombardeo de ser necesario, pero había una pequeña, pequeñísima mancha en su historial de persona joven, echada para delante y aventurera: Aún era virgen. Más que el aceite, damas y caballeros. Y eso lo traía de cabeza.

—Jimin, estás exagerando.

Taehyung no era el único que sabía que era gay. El grupo al completo estaba informado sobre su sexualidad desde hacía ya bastante tiempo. Pero si era el único con quién compartía su más grande preocupación.

Jimin estaba tumbado boca arriba con aire de desespero sobre la alfombra, lamentando su suerte mientras Taehyung lo observaba con la espalda apoyada a los pies de la cama.

—¿Exagero? Oh claro, porque ser virgen a los veintitantos sin perspectiva alguna de poner solución al problema no es cosa seria.—giró un instante su cabeza solo para mirar mal a su amigo.—Gracias por tu comprensión, Taehyung.

Tae rodó los ojos, clamando al cielo por un resquicio más de paciencia.

—Vale, no has metido a mini Chim en ningún agujero, ¿Y qué? ¿Que nunca te han dado por culo? ¡A mi tampoco!—se llevó una mano al pecho.—Y no me ves haciendo drama. Relájate y deja que la vida fluya.

Jimin se incorporó hasta quedar sentado en la mullida alfombra, mirando a su amigo con los ojos enormemente abiertos en una expresión defensiva.

—¡A mi meterla me da igual!—exclamó.—Sabes que soy team bottom, joder. Y la razón de que te parezca estupendo el que no te la metan es porque no te va tener una polla en el culo, Taehyung. Pero yo la quiero.—se acercó con expresión de cachorro apaleado.—Necesito una polla en mi culo, me desvivo por ella.

—Si hay una frase más pasiva que esa, no la conozco.—declaró Taegyung, mirando fijamente a su rubio compañero de batallas, quién puchereó.—Le estás dando mucha importancia, amigo.

Jimin suspiró y regresó a su posición de Cristo redentor sobre la alfombra. Los ojos perdidos en el impoluto techo de su cuarto.

—Acabaré solo, viejo y gordo.

El castaño rio por la nariz.

—Puedes escribir tus depresivos pensamientos de viejo gordo solterón en un diario.

Querido diario.—comenzó a relatar Jimin.—Estoy a tres Doritos de hacerle un garganta profunda a una escopeta.—Taehyung trató de ocultar la risa con una tos.—Postdata: Espero que mis gatos no se coman mi cadáver.

—Cómprate un perro, entonces.—sugirió guasón. Jimin lloriqueó lastimeramente, hasta que consiguió que Taegyung se tumbase a su lado en la alfombra con un suspiro hastiado. Lo abrazó con sus fuertes y cálidos brazos y le besó la coronilla.—¿Qué es lo que tanto te preocupa?

Jimin hizo otro puchero, aunque Taehyung no pudiese verlo enterrado en su pecho. Segundos después, explicó.

—Me da miedo el tiempo, Taehyungie. No he podido buscar un chico que me guste y al que gustar porque tengo un miedo horrible a que alguien lo descubra. No sé cómo os habéis buscado vosotros la vida en estos temas hasta ahora.—Tae hizo amago de abrir la boca pero el pequeño lo interrumpió.—¡Ni quiero saberlo!—exclamó, haciendo sonreír al castaño.—Pero que se descubra que tú, o Yoongi, o Hobi Hyung tenéis novia no se compara a que a alguien se le ocurra revelar que a mí me gustan los penes.

Como voltear heteros 🌸KookminWhere stories live. Discover now