El Clan Gremory está entrenando para el Rating game contra Raiser, pero no muy lejos de ellos hay un castaño de pelo castaño puntiagudo entrenando para proteger a sus seres queridos de los Asesinos elite de la mafia más poderosa.
Gianmini y Tsuna estaban sorprendidos, ya que un pájaro tenía un transmisor.
-¡Es Hibird!.-Exclamó Tsuna sorprendido.
-¡Esto es malo!.-Exclamó Gianmini alarmado.-la señal se debilita.
Gianmini monitoreo su ruta de vuelo, sin embargo el pájaro salió del rango de la pantalla.
Los gritos llamo la atención de los mafiosos y los sobrenaturales.
-¡¿Qué sucede!?.-Exclamó Lal alarmada.
-¿¡Qué es ese sonido!?.-Exclamó Gokudera alarmado.
-¡Grandes Problemas!.-Exclamó Tsuna alarmado.-¡Recibimos un S.O.S del canario de Hibari-San!.
Lastimosamente antes de que podía preguntar, la señal se perdió.
-¿Qué ocurre?.-Pregunto Tatsumi alarmado.-¡¿Qué paso con la señal?!.-Exclamó algo preocupado.
-Esperé, intentaré buscar su última emisión.-Dijo Gianmini mientras tecleaba en su dispositivo.-Lo tengo el cementerio Namimori.
-¿El cementerio?.-Dijo Yamamoto confundido.-Pero qué haría Hibari en un lugar como es?.-Dijo Yamamoto intrigado.
-¿Podra ser un desperfecto del trasmísor?.-Dijo Gianmini con duda.
-¿Desperfecto?.-Dijo Tsuna confundido.
-Por otro lado pudo caer en manos del enemigo.-Dijo Reborn con su típica actitud, alarmando a Tsuna y sus guardianes.
-Tambien puede ser una trampa del enemigo.-Dijo Lal sería.
-!¿Una trampa?!.-Exclamó Tsuna preocupado.-¡¿QUÉ HACEMOS AHORA?!-Gritó Tsuna desesperado por la situación.
Por un lado había una posibilidad de que Hibari los ayude, pero dos de ellas podían hacer que se enfrente a los mafiosos de Millefiore.
Sin embargo, la Rias de 20 años del futuro lo abrazó.
-Tranquilo.-Dijo Rias con una voz suave y dulce.-No hay necesidad de desesperarse, respira profundo y analiza todo con calma.
Lo dicho por la pelirroja del futuro, asombro al castaño, pero logro tranquilizarlo, respiro profundo y se calmó.
-Gracias, normalmente Reborn me golpearía para evitar que me desesperé.-Dijo Tsuna algo más calmado.
-No soy una mujer violenta, soy tu esposa después de todo, soy serena y cariñosa.-Dijo Rias con una dulce sonrisa, pero haciendo sentir celosas a Le Fay y Kuroka del futuro.
En el pasado.
En Kuoh.
Se encontraban Souna y Rias mirando fríamente a sus piezas desobedientes, Souna no dudo ni un segundo en darles azotes a Saji por involucrarse con las enviadas de la iglesia.
Rias por su parte abrazo a su piezas ya que la tenían muy preocupada, y le pidió que no vuelvan hacer algo como lo que hicieron, ya que iban a ayuda a Kiba, pero sin arriesgarse con la iglesia.
Pero por otro lado, Issei nunca obedeció lo que le decía Rias, se entendía y se justificaba, pero también debe imponer su liderazgo como presidenta y no dejar creer que Issei siempre puede salirse con la suya ya que que siempre la desobedesce, además de que ahora que está preocupada por Tsuna, no quiere que su peón se meta en problemas por su apasionado carácter.
Por su parte Issei estaba agradecido con el destino por darle tan bondadosa presidenta, sin embargo, paso esto.
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