Luo Binge un demonio casado con un inmortal que demuestra por este una obsesió y todo se complica cuando algo trae temor al corazon del Rey Demonio celos y dolor sufrirán por ambas partes.
¿Que pasara cuando esta persona trate de escapar? ¿Es tan ma...
Suculencia activada 😏 si no te gusta leer hasta que aparezca esto ☆¤☆¤☆¤☆¤ Sin mas avisó comencemos.😆
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Binghe recosto a Shen Yuan sobre la gran cama dejándolo caer con delicadeza.
Realmente era una belleza inmortal para el. Su figura vestida de verde y blanco sobre esas sábanas negras constrastaban demasiado bien cotra la piel blanquecina de su esposa viéndose así como un demonio seductor y no un inmortal, que buscaba corromper a cualquiera con su cuerpo.
Ciertamente su vida cambio cuando encontró a ese pequeño cultivador.
Su vida tuvo más sentido para el pero también surgió un nuevo temor de perderlo y pensar que estuvo cerca de perderlo lo hacía sentir vulnerable.
Y lo odiaba por que ahora no creeia ser capaz de amar y vivir sin el a su lado en esta vida y en las próximas vidas que tuviera.
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Shen Yuan comenzó a retirar sus túnicas al ver que su esposo solo lo miraba. Se sentía expuesto y nervioso a pesar de que ya estaban casados, terminó de quitarse sus ropas dejándolas tiradas en el borde de la cama sin cuidado. Realmente eso era lo de menos, el quería a su esposo con el. Dejar de sentir vacío en su corazón por lo que pasó.
Levantó su mirada para ver a binghe quitarse su ropa pulcramen.
Shen Yuan se sonrojo y desvió su mirada, pensando en su comportamiento tan desvergonzado de solo desvestirse sin cuidado.
Cuando comenzó el a ser tan desvergonzado, ciertamente su esposo tenia la culpa.
Escucho una risa divertida venir del Rey Demonio.
"Aún te sonrojas después de tanto tiempo de casados". Se subió a la cama como un depredador acercándose lentamente al pequeño cuerpo frente a el.
"Lo siento aun no me acostumbro a esto".
"Tenemos mucho tiempo Shen Yuan... mucho". Hablo tomando su rostro entre sus manos.
Se acerco hacia el besando esos labios rosados como un melocotón maduro delicadamente, mientras este le correspondía de la misma forma, noto unas gotas calientes donde se posaba su mano sin separarse las limpio.
