01

631 97 19
                                    

El pequeño Ryūnosuke fue llevado al hospital, donde le hicieron varios estudios necesarios, descartando enfermedades. Tenía algunas infecciones y un poco de anemia, pero entraría en tratamientos.

Despegaba sus párpados lentamente, dejando ver esos hermosos orbes grises. Lo primero que miró fue a cierto joven hombre de cabellera castaña, que estaba durmiendo con su cabeza y medio cuerpo recargados en la orilla de la cama.

— ¿D-Disculpe? ¿Quién es usted y dónde estoy?

Preguntó nervioso. Dazai despertó, poniéndose atento a lo que el menor pudiera necesitar.

— ¡Despertaste! Me alegro mucho.

Lo abrazó repentinamente siendo algo empalagoso, como si lo conociera de años. El azabache se incomodó un poco, sus heridas de golpes anteriores dolían. Se quejó.

— L-Lo siento. Me presento, soy Osamu Dazai, y de ahora en adelante, estarás conmigo, porque voy a adoptarte.

— ¿Eh? ¿A-Adoptarme? ¿A mí? T-Todos dicen que soy un perro detestable... ¿Por qué usted querría adoptar a alguien tan miserable como yo?

Comenzó a derramar lágrimas, Dazai lo abrazó más, sin importar lo sucio que pudiera estar en ese momento.

— Porque yo también pasé por lo mismo, situación de calle y abusos, y quiero ayudarte. Conmigo tendrás una familia extraña. Chūya, Odasaku, y el hijo de Odasaku, los cuatro estaremos contigo. Ellos esperan afuera.

— ¿T-Tendré una familia?

Era difícil de creer. ¿Acaso era un sueño?

— Dime tu nombre.

— R-Ryūnosuke... Akutagawa.

∆∆∆

Atsushi era el más impaciente por saber del otro niño. Esperaba que el médico encargado del azabache saliera a darles noticias sobre él.

Papá, ¿Dazai-san llevará a ese niño a nuestra casa?

— No lo sé. Parecía muy animado a hacerlo. ¿Tú qué opinas, Chūya-kun?

— Después de todo... Dazai no es tan idiota como lo imaginé...

Respondió serio.

Mi Maestro, Mi Padre, Mi AmigoМесто, где живут истории. Откройте их для себя