10. Al aire libre

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"Eres mi nuevo sentimiento favorito"

En una mañana casi calurosa de primavera, Hyungwon esperaba pacientemente en la puerta del edificio de Minhyuk a que este se dignara a aparecer.

Era temprano, cerca de las nueve, pero que fuera sábado lo hacía aún peor, porque debería estar envuelto en sábanas, acurrucado y durmiendo hasta pasado el mediodía. Era uno de sus días de descanso, pero ahí estaba, esperando a que el pelirrojo bajara. Solo por él desperdiciaría sus preciadas horas de sueño, y eso ya decía mucho de cuanto le gustaba.

Luego de dos semanas sin verse, debido a que Minhyuk había estado terriblemente ocupado con sesiones de fotos, al fin había llegado el día en el que tendrían su primera cita oficial. Hyungwon no sabía absolutamente nada al respecto, ya que el otro le había dicho que se encargaría de todos los detalles. Las únicas cosas que sabía eran, primero, que tenía que vestirse cómodo, como si fuera a la playa, segundo, que debía llevar un cambio de ropa completo y tercero, que no trajera el auto. Así que el profesor andaba en camisa blanca, shorts azules y unas sandalias negras, mientras esperaba apoyado contra un poste de luz, con una mochila insoportable en el hombro. Hacía mucho no se tomaba el transporte público y por miedo a perderse (o quedarse dormido), optó por un taxi.

Esperó alrededor de cinco minutos más, hasta que vio como el portero del edificio abría la puerta y un sonriente pelirrojo cargado con una mochila y una canasta apareció, vestido en un conjunto de camisa y pantalón corto estampado a rayas de varios colores. El rostro de Hyungwon se iluminó en una sonrisa al verlo y se puso derecho para estrecharlo entre sus brazos desde la cintura y besar su sien.

—Hola, cielo —lo saludó en un susurró contra su oído.

Minhyuk pasó el único brazo libre por su cuello, lo agarró desde la nuca para no dejarlo escapar y le dejo un fuerte beso contra sus labios.

—Hola, Wonnie —le contestó, sin separar del todo sus rostros, y acariciándole la nariz con la propia—. ¿Me extrañaste?

—Muchísimo —admitió y disfrutó el leve sonrojo que apareció en el rostro del más bajo.

Desde su caótica confesión, Hyungwon había decidido que no se andaría con rodeos con lo que sentía por Minhyuk. Si quería decir algo, simplemente lo diría, en tanto supiera que no pondría incómodo al mayor. Sabía que le tomaría más tiempo dejarse llevar y expresarse, pero se notaba que estaba intentándolo y que se ofreciera a organizar la salida era un paso gigantesco. Era más cariñoso por mensajes, hablaban más de sus cosas; se estaban conociendo más y eso los emocionaba. Ambos estaban descubriendo un mundo nuevo.

—¿A dónde vamos? —preguntó entonces Hyungwon, cambiando el tema.

—Ya verás —contestó el otro. Se puso en puntitas y miro por sobre su hombro—. Ahí viene nuestro transporte —avisó.

Un automóvil negro con vidrios polarizados se estacionó tras ellos. Un muchacho joven de traje y cabello rubio ondulado salió del lado del conductor. Rodeó el vehículo y se detuvo frente a ellos, saludándolos con una pronunciada reverencia.

—Buenos días, señor Lee —habló el muchacho.

—Buen día, Chris. Puntual como siempre —exclamó el nombrado, mirando su reloj que marcaba las nueve en punto.

El chofer abrió primero el baúl, donde dejaron sus pertenencias, y luego la puerta trasera del auto, la cual cerró cuando ambos hombres estaban acomodados adentro. Dio la vuelta y volvió a su puesto tras el volante, para comenzar a conducir con destino a donde a Minhyuk le había indicado.

30 Days of Smut (Hyunghyuk)Onde histórias criam vida. Descubra agora