Capítulo 5: La trampa

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Entre un pequeño grupo de chicos de 25 años aproximadamente se sucitaba una pelea, al parecer era por una chica que le correspondía a uno y al otro no, por lo que los jóvenes enamorados terminaron en golpes, uno de ellos lanzó un golpe a la cara del otro haciéndolo girar y salpicando su sangre a la cara de Amber que justo en ese momento pasaba por detrás de ellos. Ella solo se limitó a limpiarse con las mangas de su sudadera y fingiendo perfectamente, actuó con miedo ante tal situación por lo que dio un paso asía atrás tropezando y cayendo al piso, haciéndose una cortada en su mano con un trozo de vidrio de alguna botella, por lo que broto un poco de sangre de su palam, uno de los chicos que estaba apreciando la escena se acercó a ella y la ayudó a levantarse.

-  ¿Estas bien?- le pregunto amablemente.

- Si, lo siento, soy un poco torpe. - respondió con cierta timidez que causaba ternura y deseo.

- ja ja ja si se nota, además eres miedosa ja ja te asustaste con el golpe. -

Amber se sonrojo - Si, un poco, es solo que no me gustan las peleas, nunca terminan bien- dijo algo tímida.

- ¿Qué haces tan sola?

- Este... Estoy buscando a un amigo, quede de verme con el pero aún no lo encuentro.

- ¿Quieres que te ayude a buscarlo?

- No gracias, estoy bien, me tengo que ir.

En ese momento el chico se acercó a ella tocando su brazo; mientras que ella sintió su mano sobre su brazo, visualizo a uno de sus amigo de la universidad a un chico alto, delgado, con piel clara y varios lunares en su rostro, con su cabello lacio y peinado de lado, con orejas un poco grandes y sus dientes de adelante un poco salidos.

- Bueno, cuídate. - le dijo con una sonrisa un poco siniestra.

- Gracias.- se dio la vuelta con una sonrisa disimulada de triunfo y siguió caminando haciendo parecer que buscaba a alguien.

Después de un rato Amber caminaba hacia un puesto de comida cuando de repente vio a su amigo de la universidad, aquel joven que ella había visualizado.

- ¡Said! Hola aquí estoy- corrió hacia él y lo abrazó.

- Hola, perdón se me hizo tarde.

- No te preocupes lo bueno es que ya estás aquí, vamos. - lo tomo del brazo y sutilmente lo llevo hasta atrás del escenario. - Bien ya estamos aquí, me prometiste que lo traerías.

- Si bueno... Te lo prometí ¿no? Pero primero quiero que me des un beso. - Le dijo de manera galante.

- Tardaste mucho en pedírmelo - dijo avergonzada y agachando la cabeza apenada. - Claro que quiero besarte, pero la verdad me da pena... Cierra los ojos.

- Está bien. - cerró los ojos y se quedó fijo esperando que sus labios sintieran los de ella; pero no fue así. Amber hizo aparecer uno de sus cuchillos y de un golpe certero le abrió la garganta haciendo que se cubriera de sangre; cayó hincado sujetándose la garganta, pero ya nada podía hacer, se había formado un charco de sangre debajo de él.

- ¿Como? Exclamó, observando como la mirada de Amber cambió totalmente de ser una mirada dulce a una mira fría.

- Sé que eres Dens, me enviaron a matarte, así que muere de una vez.

Le clavó el cuchillo sobre la cabeza terminando con su sufrimiento, hizo aparecer de nuevo el brazalete pasando su mano sobre su muñeca izquierda, frotó la piedra roja y de inmediato se empezó a incinerar el cuerpo de Dens consumiéndose al instante.

- Ya está hecho. - se dijo para sí misma; camino en dirección hacia donde se encontraba Crots.

- ¿Ya está hecho?

- Así es.

- Dime, ¿algún inconveniente? -

-No, resultó de acuerdo a mi plan. Estuve buscando alguna pelea dentro del lugar, como me dijiste que susurra para provocar caos era lógico que estaría cerca de algún conflicto.

Vi a unos chicos peleando, me hice la inocente para llamar su atención y funcionó, al momento en que caí hice que oliera mi sangre cortándome la palma de mi mano, su sed de sangre hizo que me tocará para poder ver en mi mente a quien estaba buscando, por lo que visualice a un amigo de la universidad, era lógico que él no estaría aquí y después de un rato se apareció frente a mí, había visto su imagen en mi mente y se transformó en él para engañarme, pero todo esto era parte de mi plan y para acabarlo de manera rápida lo lleve atrás del escenario donde no había nadie y ahí lo mate y después queme su cuerpo, por lo que no quedó rastro de él.

- Bien hecho, así no habrá evidencia. Parece que te he entrenado bien, si seguimos así limpiaremos este sector de todos esos demonios. Bien, es hora de volver, por hoy hemos terminado.

Amber frotó la piedra dorada y de nuevo cambio su ropa a la que traía desde un principio.

Atravesaron un portal y ella despertó, estaba en su cama miro su celular eran las 2:50 de la mañana del tercer domingo de marzo, se paró fue al baño a lavarse la cara, se quedó un rato contemplando su reflejo en el espejo, su mirada estaba vacia,vera como si parte de su felicidad e inocencia hubiera sido arrebatada, ella ya no era la misma, sentía que su corazón estaba destrozado y una inmensa culpa la agobiaba; regreso a la habitación y permaneció sentada a la orilla de su cama mirando con profunda tristeza el suelo.

Llegaban a su mente escenas del asesinato de su tío por sus propias manos, las cuales al verlas recordaba como en algún momento se bañaron de sangre, sangre que ella podía aún ver y sentir en su piel.

Continuará...

Amber El Origen de un GuardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora