Capítulo 7

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Shelby

Estoy maravillada con el pequeño bulto de cabello rojizo que tiene Cassandra en brazos, me parece la pequeña bebé más hermosa que he visto, su cabello es igual que el de su mamá y es bastante abundante para ser una recién nacida, de una forma inevitable me recuerda a mi David.

-Ella es tan pequeña-dice Cass tomando mi mano, le doy un breve apretón para reconfortarla, no recuerdo haberla visto tan apegada a mí nunca, pero Adam me explicó que puede ser por todo esto del parto.

Volteo y veo al papá sonriente, está en una vídeollamada con los increíbles tres, sus hijos están muy emocionados por la llegada de su nueva hermanita. Procuro no molestarlos mucho mientras que los pequeños observan al nuevo miembro de su familia y la reacción de los tres me conmueve mucho, incluso me llaman "tía shelby", no recordaba lo bonito que es escucharlos.

-Campeones, es hora de dejar descansar a mamá y a su hermanita-les dice Adam preparado para terminar la llamada.

-Papá...-se quejan al unísono.

-Está bien, ¡Mamá descansa mucho para que puedan llegar las dos a casa más rápido! -Jake es el primero en ceder, hasta que otro de sus hermanos lo cortan en sus palabras.

-Por cierto, hablando del nombre ¿Ganamos?-esa pregunta de su hijo Jared hace reír tanto a Adam como a Cassandra.

Cass con todo el amor del mundo levanta un poco más a la pequeña y anuncia oficialmente.

-Mis niños, les presento a su hermanita...-comparte una sonrisa de complicidad con Adam- ¡Riley Miller! -ahí sí no puedo contener la emoción y aplaudo suavemente junto con los tres niños a través de la pantalla. Ese nombre es el que ellos habían escogido para la bebé y había peleado junto a ellos para que la nombraran de ese modo en una de las últimas veces que los vi a los tres.

-¡Oíste eso, tía Shelby! ¡Ganamos! -asiento ante la emoción de Jace y una vez que nos calmamos, Cass de despide de ellos, creo que está verdaderamente cansada si tiene que terminar la comunicación con sus increíbles tres.

-Ellos son fantásticos-le dice a su esposo, Adam asiente completamente en las nubes, esta es su historia feliz y entiendo por qué se ve tan satisfecho.

-Shelby ¿Quieres cargar a Riley? -amablemente iba a declinar la oferta de Cassandra, pero el rostro de Riley fue demasiado para resistirme, es una cosita tan pequeña y tierna.

-Eres preciosa, Riley-le digo acariciando su manita que sostiene mi dedo pulgar.

-Iré avisando a los demás para que vayan pasando a la habitación-Cass y yo asentimos a Adam algo embobadas con cada gesto de la bebé.

-Adam es todo un príncipe azul-me dice Cass.

-Te lo mereces, fuiste una mujer muy valiente durante toda tu vida.

-Tú también lo eres ¿Y tú príncipe azul? -me quedé quieta por un momento, porque a lo largo de toda mi vida no creo que "valentía" sea algo que me defina realmente-Como sea, Shelby, perdón por presionarte. Hay algo que te quería pedir, por eso Adam se fue.

-Claro ¿Qué necesitas? Lo que sea.

-Que tomes mi lugar en mi trabajo-no me atraganté solo por el hecho de que todavía sostenía a Riley conmigo, pero estuve peligrosamente cerca.

-¿Qué? Cass, no puedes pedirme algo como eso.

-Tal vez no es el momento, pero ¡No te he visto en días! Parece que te escondes de mí y por eso sí puedo, necesito tu ayuda, Shelby. Tengo a Maia inundada de trabajo con lo de las cafeterías porque siempre me dedico más a mi familia y quiero que ella tenga un apoyo, tú eres la más indicada para el puesto.

Todo o nadaWhere stories live. Discover now