Orgullo y Prejuicio | Yoonseok | Omegaverse

Capitulo 16

–La verdad, Nam querido, es muy duro pensar que Ga-young será un día la dueña de esta casa, y que yo me veré obligado a cederle el sitio y a vivir viéndola en mi lugar.

–Querido, no pienses en cosas tristes. Tengamos esperanzas en cosas mejores. Animémonos con la idea de que tú puedes morir primero.

No era muy consolador, que digamos, para Jin; sin embargó, en vez de contestar, continuó:

–No puedo soportar el pensar que lleguen a ser dueños de toda esta propiedad. Si no fuera por el legado, me traería sin cuidado.

–¿Qué es lo que te traería sin cuidado?

–Me traería sin cuidado absolutamente todo.

–Demos gracias, entonces, de que te salven de semejante estado de insensibilidad.

-Nunca podré dar gracias por nada que se refiera al legado. No entenderé jamás que alguien pueda tener la conciencia tranquila desheredando a sus propios hijos solo por ser omegas. Y para colmo, ¡que el heredero tenga que ser el señor Lee! ¿Por qué él, y no cualquier otro?

––Lo dejo a tu propia consideración.

Namjoon se levantó del sillón en donde estaban sentados, le dio un beso en la frente y salió de la sala dejando a su esposo meditando con coraje.

La carta de la señorita Lisa llegó, y puso fin a todas las dudas. La primera frase ya comunicaba que todos se habían establecido en la capital para pasar el invierno, y al final expresaba la tristeza del hermano por no haber tenido tiempo, antes de abandonar el campo, de pasar a presentar sus respetos a sus amigos de Hertfordshire.

No había esperanza, se había desvanecido por completo. Taehyung siguió leyendo, pero encontró pocas cosas, aparte de las expresiones de afecto de su autora, que pudieran servirle de alivio. El resto de la carta estaba casi por entero dedicado a elogiar a la señorita Min. Insistía de nuevo sobre sus múltiples atractivos, y Lisa presumía muy contenta de su creciente amistad con ella, precipitándose a predecir el cumplimiento de los deseos que ya manifestaba en la primera carta sobre el matrimonio de su hermano con la omega. También le contaba con regocijo que su hermano era íntimo amigo de la familia Min, y mencionaba con entusiasmo ciertos planes del alfa sobre redecorar su casa.

Hoseok, a quien Tae comunicó en seguida lo más importante de aquellas noticias, lo escuchó en silencio y muy indignado. Su corazón se dividía entre la preocupación por su hermano y el odio a todos los demás. No daba crédito a la afirmación de Lisa de que Jungkook estaba interesado por la señorita Min. No dudaba, como no lo había dudado jamás, que Jungkook estaba enamorado de Taehyung.

-Es algo lamentable y debo admitir que me duele su partida pero no me pondré triste. No puede durar mucho. Lo olvidaré y todos volveremos a ser como antes.

Hoseok solamente miró a su hermano, pero no dijo nada.

–¿Lo dudas? No tienes motivos. Le recordaré siempre como el mejor alfa que he conocido, eso es todo. Nada tengo que esperar ni que temer, y nada tengo que reclamarle. Gracias a Dios, no me queda esa pena. Así es que dentro de poco tiempo, estaré mucho mejor-con voz más fuerte añadió después–tengo el consuelo de pensar que no ha sido más que un error de la imaginación por mi parte y que no ha perjudicado a nadie más que a mí mismo.

–¡Querida Tae! Eres demasiado bueno. Tu dulzura y tu desinterés son verdaderamente angelicales. No sé qué decirte. Me siento como si nunca te hubiese hecho justicia, o como si no te hubiese querido todo lo que mereces

-Hobi, no digas eso. No es ningún mérito extraordinario-tae se ruborizo

-No, eso no está bien. Todo el mundo te parece respetable y te ofendes si yo hablo mal de alguien. Tú eres el único a quien encuentro perfecto y tampoco quieres que te lo diga. No temas que me exceda apropiándome de tu privilegio de bondad universal. No hay peligro. A poca gente quiero de verdad, y de muy pocos tengo buen concepto. Cuanto más conozco el mundo, más me desagrada, y el tiempo me confirma mi creencia en la inconsistencia del carácter humano, y en lo poco que se puede uno fiar de las apariencias de bondad o inteligencia. Últimamente he tenido dos ejemplos: uno que no quiero mencionar, y el otro, la boda de Ga-young. ¡Es increíble! ¡Lo mires como lo mires, es increíble!