Orgullo y Prejuicio | Yoonseok | Omegaverse

Capitulo 30

Después de aquel caluroso beso, la pareja siguió paseando sin preocuparse de la dirección que llevaban. Tenían demasiado que pensar, que sentir y que decir para fijarse en nada más. 

—debo confesarte que fue gracias a mi tía que decidí volver a acercarme a ti. Me visitó cuando llegó a la capital y me contó todo, trataba de convencerme de romper con cualquier compromiso que tuviera contigo al contarme lo grosera y maldecida que fuiste—dijo el alfa con una suave y tímida risa—gracias a eso volví a tener esperanzas que antes apenas me habría atrevido a formular. Conocía de sobra tu carácter para saber que si hubieses estado absoluta e irrevocablemente decidido contra mí, se lo habrías dicho a mi tía con toda claridad y franqueza.

Hoseok se ruborizó y se rio, contestando:

—Sí, conoces de sobra mi franqueza para creerme capaz de eso. Después de haberte rechazado tan odiosamente cara a cara, no podía tener reparos en decirle lo mismo a todos sus parientes—Hoseok giró su rostro tímidamente y ¨accidentalmente¨ golpeaba su mano con la del alfa, quería sentirlo más cerca

—No me dijiste nada que no me merecía. Tus acusaciones estaban mal fundadas, pero mis acciones no fueron las mejores y merecían tal reproche. Aquello fue imperdonable; me horroriza pensarlo—dijo el alfa.

Yoongi sintió los dulces roces de los dedos del omega junto a los suyos y no pudo resistirlo, engancho su dedo índice con el dedo del castaño y ambos sonrieron enamorados

—No vamos a discutir quién estuvo peor aquella tarde —dijo Hoseok— los dos tuvimos nuestras culpas. Pero me parece que los dos hemos ganado al final

—Yo no puedo reconciliarme conmigo mismo con tanta facilidad. El recuerdo de lo que dije e hice en aquella ocasión es y será por mucho tiempo muy doloroso para mí. No puedo olvidar tu frase tan acertada: «Si se hubiese portado usted más caballerosamente.» Éstas fueron sus palabras. No sabe, no puede imaginarse cuánto me han torturado, aunque confieso que tardé en ser lo bastante razonable para reconocer la verdad que encerraban—dijo Yoongi atreviéndose a tomar la mano completa del omega

—Créeme que yo nunca pensé que pudieran causarte tan mala impresión. No tenía la menor idea de que te afectarían de ese modo—Hoseok se detuvo y se paró frente al alfa para mirarlo a los ojos

—No lo dudo. Sé que me tenías en un concepto de orgulloso y egoísta.  Nunca olvidaré tampoco tu expresión al decirme que de cualquier modo que me hubiese dirigido a ti, no me habrías aceptado.

—No repita todas mis palabras de aquel día. Vamos a borrar ese recuerdo. te juro que hace tiempo que estoy sinceramente avergonzado de aquello—replicó el omega y con su mano libre acarició la mejilla del pálido

—La carta que te escribí ¿te hizo cambiar tu opinión sobre mí? ¿Dio crédito su contenido?

—honestamente cambio mucho mi opinión de ti después de leer esa carta, todos mis prejuicios sobre ti desaparecieron—le dijo Hoseok sin dejar 

—Ya sabía —prosiguió Yoongi— que lo que te escribí tenía que apenarte, pero era necesario. Supongo que habrás destruido la carta. Había una parte, especialmente al empezar, que no querría que volvieses a leer. Me acuerdo de ciertas expresiones que podrían hacer que me odiase.

—Quemaremos la carta si crees que es preciso para preservar mi afecto, pero aunque los dos tenemos razones para pensar que mis opiniones no son enteramente inalterables, no cambian tan fácilmente como supones. Te amo a pesar de lo que pasó y dijimos

—Cuando redacté aquella carta—replicó Yoongi — me creía perfectamente frío y tranquilo; pero después me convencí de que la había escrito en un estado de tremenda amargura.