Es agitado suavemente y despierta recuperando la conciencia lentamente, parpadeando en la penumbra y luego encuentra la cara de Jeno quien se encuentra sentado en el borde de la cama, el chaleco blanco que lleva puesto expone sus músculos a la vista de Jaemin, también el tatuaje en su bíceps.
Es demasiado temprano para encontrarse con esta imagen, Jaemin arruga la cara y se frota los ojos con los dedos.
-Vamos-dice Jeno en voz baja.
Jaemin bosteza.
-¿Qué...qué hora es?
Su cerebro está luchando para enfocar correctamente, ya que está enfocado en la forma en que se siente al despertar con Jeno a su lado, mirándolo a la cara y a los ojos.
-Casi las nueve. Tienes que levantarte ya.
-Dios-dice resoplando-¿Dónde está Mark?
-Salió temprano. Toma.
Y de repente hay una taza de café frente a él. Se sienta, sin darse cuenta la manta cae hacia abajo para mostrar su pecho desnudo, atrapa a Jeno mirando.
-Gracias-Toma el café.
-Tienes diez minutos-dice Jeno, levantándose-y luego voy a entrar aquí con una cubeta de agua.
Frunciendo el ceño, Jaemin dice.
-Ni siquiera tenemos una cubeta.
-¡Voy a encontrar una!-Jeno responde mientras se dirige a la sala.
Jaemin se une a él en la cocina unos diez minutos más tarde y Jeno, ahora está completamente vestido para salir, viste una camiseta negra debajo de su chaleco blanco, pantalones vaqueros rasgados ingeniosamente cuelgan bajo en sus caderas.
Jaemin pasa junto a él, que está apoyado en la barra de desayuno haciendo algo en su teléfono.
-No estás usando un traje hoy.
-Que habilidades de observación tan estelares tienes.
Viéndolo de frente ahora, la V en su escote deja al descubierto su piel y hecha un pequeño vistazo a sus pectorales. Jaemin mira fijamente mientras toma un par de uvas del racimo.
-¿Qué?-Dice Jeno de repente.
Jaemin se sobresalta y lo mira a los ojos.
-Nada.
-Ajá-dice Jeno, claramente divertido.
Guarda su teléfono en su bolsillo y alcanza su chaqueta de uno de los taburetes-Bueno, cuando hayas terminado de admirar mi belleza, tal vez podamos irnos.-No estaba...ugh, vete a la mierda-dice Jaemin, poniéndose rojo y Jeno ríe.
Se meten en el coche y salen de la pequeña ciudad, Jeno enciende la calefacción para contrarrestar el aire frío de diciembre. No es hasta que van cruzando la autopista que Jaemin tiene una idea repentina.
-Deberías darme tu número de teléfono.
Jeno lo mira con el rabillo del ojo.
-¿Crees que es necesario?
-Bueno, ¿Y si nos separamos en Londres?
-¿Por qué nos separaríamos?
-No sé. Nunca se sabe. Tal vez te distraigas con algún sexy jovencito y vayan a un baño cercano.
-Estoy bastante seguro de que seré capaz de controlarme el tiempo suficiente para decirte a dónde voy-dice Jeno, sonriendo-a pesar de saber qué...-añade arrastrando las palabras-seguro vas a estar en allí mirando.
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El Padrino - Nomin
RomanceJaemin está a punto de casarse tras un arrollador romance con un hombre que conoció una noche en un bar gay. Pero entonces conoció al mejor amigo de su prometido, Lee Jeno. © todos los créditos a su respectiva autora (Lola Carson).