El Brillo De Sus Ojos/Inazuma Eleven Y Tu

Capítulo 47

Narra Cristal

Salgo de la tienda de campaña acariciandome la oreja derecha mientras asesino a Nelly con la mirada. Hay maneras más agradables de despertarme que pegándome un grito en la oreja. Por lo menos mi despertador era más agradable a la hora de levantarme. Camino asta los chicos haciéndome con una taza de café y me siento junto a Jude. El echo de que la entrenadora Schiller no me permita ir a la cafetería del instituto me fastidia más de lo que debería. ¡Me estoy perdiendo un buffet libre por su culpa! Magdalenas, cruasán de chocolate, bizcochos de todos los tamaños y sabores, cajas con distintos tipos de galletas, frutas ni muy verdes ni muy maduras, bacon crujiente, huevos fritos con la llema líquida, tostadas crujientes con mermelada de todos los sabores….. Los estudiantes que viven en este instituto tienen que estar poniéndose las botas ahora mismo….. Y yo aquí. Desayunando unas tostadas un poco quemadas cubiertas por la misma mermelada de fresa de todos los días y una taza de café. No digo que el desayuno de nuestras gerentes esté malo. De echo estoy segura de que el café les sale mejor cada día, es solo que…… No puedo comparar este desayuno con un increíble buffet libre. Suspiro levemente y le doy un mordisco a una de las tostadas tratando de no mover mucho el cuello. He debido de dormir en una mala postura….. Otra vez. 

-¿Pasa algo? No pareces tener muchas ganas de desayunar, lo cual es algo completamente inusual en ti….. - giro mi cabeza hacia el estratega apoyando la taza sobre la mesa

-No es que no tenga ganas de desayunar. Es solo que me da rabia que la entrenadora no nos deje ir a desayunar a la cafetería. Los desayunos aquí son maravillosos…. Se me hace la boca agua solo de recordarlos-sonrió de lado levemente observando el líquido oscuro-aunque si soy sincera, su cafe no puede compararse con este

-Bueno, me alegro de que por lo menos te guste algo de nuestro desayuno-Celia y Silvia se sientan a nuestro lado con su desayuno entre las manos. Diría que están enfadadas, pero sus sonrisas burlonas me hacen cambiar de idea

-No es que no me guste vuestro desayuno, pero…… Si pudieses provarlo entenderíais a que me refiero-las gerentes asienten levemente mientras le dan un sorbo a su taza. 

-Tendremos que convencer a la entrenadora para que nos deje ir-asiento despacio. Ojalá

-¿Hay algún plan para hoy?-levanto la taza de café de la mesa y la acerco a mis labios. Necesito algo con lo que distraerme, si no estaré dándole vueltas a lo que no debí haber descubierto ayer a la noche

-La entrenadora Schiller dijo algo mientras desayunabamos. Creo que tenía planeado algo como…… 

-¡Cristy!-antes de que Celia pueda terminar de explicar los planes de hoy un grito la interrumpe.

Se de quien es el grito, pero antes de que pueda girarme para comprobarlo unos brazos me empujan hacia delante provocando que parte de mi cuerpo se choque contra la mesa. Mierda. Se me ha ido el café por donde no debería. Toso un par de veces tratando de recuperarme y giro mi cabeza hacia Charles fastidiada. Mi amigo sonríe inocentemente, como si no hubiera estado a punto de matarme

-A una parte de mi le gustaría terminar el día con vida, ¿sabes?-suspiro agotada y le doy otro mordisco a mis tostadas. Podría regañarle, pero eso no cambiaría nada. Y lo que menos quiero ahora es que nos enfademos por algo estupido

-¡Lo siento mucho!-casi como si se hubiese acordado de donde esta, Charles se gira hacia el resto de equipo con una enorme sonrisa en la cara-¡Buenos días a todos! 

-Buenos días Charles-la mayoría del equipo se inclina hacia dentale en una especie de reverencia.

Creo que aún siguen medio dormidos. Hurley esta tan concentrado en esforzarse por no dormirse que no se da cuenta de que tiene la mitad de su pelo dentro del tazón de leche. Y yo que pensaba que era la que menos dormía del equipo. Aunque puede ser porque yo me tomo un buen café cargado todas las mañanas. Deberían probarlo….. O mejor no. No quiero imaginarme a Mark y a Darren con una buena dosis de café en el cuerpo. Se pasarían el día corriendo. No se si sería capaz de soportar eso. Estoy a punto de darle otra sorbo a la taza cuando la mano de mi antiguo compañero me quita la taza de las manos