"Eres mi cielo y mi infierno" 🧛❤🧛♂️

Capítulo 34 "La verdad"

Era temprano y Zee se veía tan sexy en traje, todo serio trabajando pensó Saint, estaba sentado frente a él, se mordió el labio al recordar la noche anterior. Revisaba atentamente los documentos del Club y de la cadena, encontrando algo que le llamó la atención, en aquellos papeles el nombre de Joss Wayar salía a menudo.

Zee: Gatito, te hago una pregunta -levantó su mirada para encontrar la del otro.

Saint: Dime – su mirada era de lujuria, hace calor pensó.

Zee: ¿Hace cuánto conoces a Joss? – su mirada se perdió nuevamente en los documentos.

Saint: Hace como cinco años ¿Por qué preguntas?

Zee: ¿Y conoces a Off Wayar? ¿O lo conociste?

Saint: Sí, lo conocí, era un hombre extraordinario, socio de Vachi, padre de Joss ¿Por qué tanta pregunta?

Zee: ¿Sabes que Joss ha estado adquiriendo acciones de "Inferno"?

Saint: ¿Cómo? ¿Qué dices?

Zee: Gun, ven un momento por favor a la oficina -dijo hablando por el teléfono.

Gun: Sí, dime – dice antes habiendo golpeado la puerta y entrado.

Zee: Necesito que investigues esto con cuidado, contacta a los nuestros -le entregó la carpeta con documentos. ¿Sabías algo de Joss?

Gun: No, sólo sé que su padre era accionista, al morir la herencia se repartió a toda la familia y la familia salió del negocio. Tienen varias empresas y consorcios, ¿Necesitas algo específico?

Zee: Sí, la compra de acciones del "Inferno".

Gun: Yo me ocupo, no te preocupes. Por cierto, Vachirawit llegará más tarde – se retiró.

Al quedar solos Saint y Zee trataron de entender la situación, para relajar un poco el ambiente y, en vista que todo en el club estaba tranquilo, quiso hablar de su relación.

Saint: Koala, tenemos que hablar.

Zee: ¿Y eso?

Saint: Es de cariño, tú me dices gatito – se sentó en sus piernas al otro lado del escritorio, pasó sus brazos por el cuello.

Zee acariciaba su espalda, intentaba concentrarse en lo que Saint hablaba, pero se movía demasiado, y él no es de fierro, su "amiguito" estaba volviéndose inquieto.

Zee: ¿Y de qué quieres que hablemos?

Saint: llevamos meses juntos saliendo – acariciaba su pecho desabotonando la camisa – y la verdad es que pasamos juntos – besó su mandíbula y bajó por el cuello – entonces me preguntaba si... es que tú te quedas siempre conmigo, entonces – suspiró, es más difícil de lo que pensó.

Zee: ¿Quieres vivir conmigo gatita en celo? – dijo con su voz más pesada y su respiración también, Saint lo estaba excitando demasiado.

Saint: ¿Te parece una buena idea? Digo... - fue besado.

Las manos de Zee bajaron hasta su trasero y lo apretó, éste gimió ante la acción, movió más su cadera sobre las piernas de Zee, el miembro completamente erecto se hacía sentir apuntándolo. Se besaron apasionadamente.

Zee: Eres insaciable, me encanta eso de ti.

Saint: Lo soy y tú también, eres mi destinado – dijo metiendo su lengua en la garganta del otro.

Las manos de ambos empezaron a recorrer el cuerpo ajeno, Saint besaba cuello y torso, Zee no se contuvo y lo sentó con las piernas abiertas sobre él. Le desabrochó el pantalón, bajó el cierre y acarició el miembro erecto y húmedo de su gatito. Lo masturbó mientras éste se acurrucaba en su cuello y lo chupaba, lamía y retorcía ante la mano de Zee. Su respiración se hizo apnea y un intenso orgasmo manchó a ambos. Se puso de pie aún con sus piernas temblando, de un golpe Zee tiró todo lo que estaba sobre el escritorio.